La corporación provincial convoca, por primera vez, las subvenciones ‘Excel•lent Bandas de Música’, destinadas a Sociedades Musicales de la provincia de València con una dotación de 1.314.500 euros

Otra de las novedades de este año en las subvenciones es una medida específica para combatir la despoblación, además de un incremento significativo en las ayudas por sociedad musical y por participar en el Certamen de Bandas de la Diputació

Diputació de València, 01/06/2020

La Diputació de València ha decidido aumentar significativamente sus esfuerzos para ayudar a las Bandas de Música de la provincia, un sector que está sufriendo de manera muy acusada las consecuencias de la pandemia. Para ello, la institución provincial ha convocado por primera vez las subvenciones ‘Excel•lent Bandas de Música’, con una dotación total de 1.314.500 euros. Estas ayudas sustituyen a las que, hasta 2019, se venían convocando para la realización de conciertos por parte de las sociedades musicales.

A priori, las subvenciones van destinadas a sociedades musicales pertenecientes a la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana, que lleven a cabo un concierto en directo o, en su caso, un concierto virtual. Sin embargo, la principal novedad este año es que la Delegación de Bandas de la Diputació de València ha previsto la posibilidad de excluir este requisito, dadas las restricciones impuestas por el estado de alarma.

En este sentido, el diputado delegado de Bandas de Música, Jordi Mayor, ha destacado que “lo importante es ayudar a garantizar la sostenibilidad de unas sociedades musicales que continúan existiendo y que tienen gastos que afrontar durante todo el año”. Así, la cantidad que recibirá cada sociedad musical pasa de 1.200 a 1.800 euros.

Ayudas contra la despoblación y participación en el Certamen

Este año además se ha incluido una importante novedad con el objetivo de combatir la despoblación que afecta a numerosos municipios pequeños de la provincia. De este modo, se ha establecido un concepto adicional por tramos de población para ayudar a aquellas bandas de localidades de menos de 5.000 habitantes, cuyos ayuntamientos cuentan con menos capacidad económica para poderlas ayudar en su sostenimiento.

Otra de las partidas que aumenta sustancialmente su presupuesto es el incentivo a la participación en el Certamen de Bandas de la Diputació de València, pasando de 1.500 a 3.000 euros, en función del número de participaciones. El diputado Jordi Mayor, ha querido subrayar que “medidas como llevar el Certamen a los pueblos e impulsar la participación de las bandas, son acciones que buscan fomentar que la música esté en la calle, y que en esa fiesta participemos todos, músicos y ciudadanía”.

La Diputació también sigue apostando por la formación musical, para lo cual este año se ha establecido un baremo de ayudas en función del número de alumnos.

Finalmente, la convocatoria prevé una línea de ayudas de 72.000 euros para que las sociedades musicales ganadoras del Certamen de Bandas de puedan llevar a cabo un concierto fuera de la provincia.

La convocatoria ha sido publicada en el BOP de la Diputació de València con fecha 1 de junio de 2020 y las solicitudes se podrán presentar en el plazo de 15 días hábiles desde su publicación a través de la sede electrónica, llenando un formulario accesible y sencillo.

El mundo de la cultura, en general, y el de las sociedades musicales, en particular, asiste actualmente a un nuevo reto: sobrevivir al impacto de la crisis del covid-19. Sobrevivir digo, antes que reactivar, pues ya me dirán como reactivar aquello que no logró sobrevivir.

Fuente: Las Bandas de Música, JOSEP-FRNCESC ALMERIA, 31-5-2020 11:21h

Como profesional de la estrategia, me resulta complicado procesar la inmensa cantidad de información que está surgiendo, en estos momentos, para explicar el entorno de incertidumbre, volatilidad, complejidad y ambigüedad en el que estamos inmersos. Creo que actualmente no hay un escenario claro, ni tan siquiera una variedad de escenarios que se sucedan uno a otro. La realidad está siendo, más bien, la ausencia de escenarios, por cuanto esta realidad está siendo, y va a ser en el futuro, altamente cambiante. El cambio continuo es la nueva normalidad.

Estamos ante un problema complejo que requiere, necesariamente, de soluciones de complejidad. Y, en este contexto, no puedo dejar de pensar en los viejos conceptos de sinergia, cohesión grupal y gestión del conocimiento ––¿viejos conceptos?–– como posibles alternativas de solución al entorno cambiante que están viviendo nuestras sociedades musicales y toda la sociedad, en general. No obstante, creo que para hacer funcionar estos conceptos se necesita algo que actúe como nexo de unión entre ellos, como un elemento facilitador y generador de cohesión: el liderazgo.

Estoy convencido del imprescindible papel de las instituciones para abordar una situación compleja como la actual, así como del valor del conocimiento. No espero liderazgo ni inversión de recursos de la administración pública, y sería una grata sorpresa que esto sucediera, aunque me puede el escepticismo. No obstante, las sociedades musicales necesitan un liderazgo, con altura de miras, para impulsar y gestionar la innovación y la gestión del conocimiento, un conocimiento que no importa dónde se genere, a fin de que pueda ponerse al servicio de todo el colectivo al que pueda afectar. Finalmente, el conocimiento creado habrá que ponerlo en manos de las autoridades sanitarias para que, una vez validado, pueda convertirse en protocolos institucionales garantes de la continuidad de las sociedades musicales en un ámbito sanitario que proporcione confianza y seguridad para la salud colectiva.

Las sociedades que mejor resisten una situación como esta son aquellas que tienen un entramado institucional fuerte, que son capaces de interlocutar con la sociedad civil y con los agentes generadores de conocimiento, que son capaces de invertir recursos en lo importante y aprovechar el conocimiento generado para establecer protocolos que funcionen y proporcionen confianza y tranquilidad a los colectivos a los que se les aplican.

Ahora, las sociedades musicales necesitan protocolos de actuación que garanticen la seguridad sanitaria en todas sus instalaciones y actividades: sociales, educativas y artísticas. El primer paso es la reivindicación, cierto, pero todavía queda la proactividad, unir fuerzas y recursos con un mismo propósito. Alguien tiene que liderar para crear sinergias, cohesión grupal y gestión del conocimiento, en este sentido, y alguien tiene que poner los recursos necesarios para desarrollar este conocimiento, con generosidad, y sin rivalidades miserables que no aportan nada en el momento actual.   Y hay que ponerse a trabajar ya.

Josep Francesc Almeria.

*Psicólogo del trabajo y de las organizaciones. Universitat de València. Master por Middlesex University London y Universitat de Barcelona. Presidente de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana 2006-2014. Diputado de Cortes Valencianas por Podem 2015-2019