Artículos de opinión personal

El pasado 6 de julio, en el marco del 19 Festival Internacional de Bandas de Música de Lleida Fem Banda que la Banda Municipal de Lleida organiza año tras año desde 2004, se celebraba por primera vez una mesa redonda sobre el tema El oficio de director de banda.

La mesa se celebró en el Espai Sunka, una sala ideal que los responsables de Plusfresc del Grupo Supermercats Pujol, patrocinadores del festival, tuvieron la amabilidad de poner a nuestra disposición.

Asistieron los directores/as de la mayor parte de las bandas participantes al festival: Simona Paola Senesi (JF Band, Italia), Humberto Joao Oliveira Damas (Filharmónica Do Crato, Portugal), José Fernando da Silva Cardoso (Banda Filharmónica 1º de Janeiro, Portugal), José Vicente Algado Climent (Societat Unió Musical de Polop de la Marina, Alicante), Francís Durà Costa (Societat Artístic Musical d’Alcàntera de Xúquer, Valencia) y el anfitrión, al tiempo que director del festival, Amadeu Urrea Pérez (Banda Municipal de Lleida). La Banda de Música de Valga (Pontevedra) dirigida por Manuel Villas Touceda, a pesar de participar en el festival, no pudo participar en la mesa redonda por estar actuando fuera de Lleida en aquellos momentos.

El objetivo de la mesa redonda no era otro que poner en contacto los directores/as de las bandas participantes al festival y conocer los proyectos y realidades de cada uno de ellos en un entorno distendido a la vez que estructurado, siguiendo un guion previamente establecido. El tema de debate fue la reflexión y puesta en común de los distintos puntos de vista sobre algunos aspectos del oficio de los directores/as de bandas.

Exponemos a continuación un resumen de los temas tratados en el debate.

Preguntados inicialmente por su trayectoria personal y formación recibida que les había dado acceso a la dirección de una banda, se constató la inexistencia de una formación unificada, estructurada y homologada que aún hoy no contemplan los distintos planes de estudio de conservatorios y escuelas de música. En la mayoría de los casos, los directores/as tienen una formación exclusiva como instrumentistas (casi siempre de viento), aunque cada vez están más presentes los jóvenes directores/as pertenecientes a generaciones que ya han tenido acceso a estudios superiores de Dirección de Orquesta o Dirección Coral.

En relación con el perfil de los músicos que conforman actualmente las bandas, todos coincidieron en señalar que son jóvenes, chicos y chicas, que sólo con algunas excepciones tienen edades comprendidas entre los 20 y los 25 años, que mayoritariamente proceden de las escuelas de música de las propias bandas y que han superado la fase elemental de los estudios musicales, generalmente los primeros cuatro cursos. Este modelo, mayoritario en tantas bandas valencianas, catalanas y en este caso, también portuguesas, no resultó ser el mismo para la Banda Municipal de Lleida ni para la banda JF Band dirigida por Simona Paola Senesi. En el caso de la banda leridana, a pesar de que predominan los jóvenes, hay también un significativo grupo de músicos con edades que ultrapasan el umbral de los 25-30 años y, aunque en su mayoría son alumnos del Conservatorio de Lleida, también los hay que proceden de otras entidades. Por lo que a la JF Band se refiere, la creación de la banda respondía a un proyecto personal de base social inspirado en el proyecto ideado por José Antonio Abreu en Venezuela y llevado a la práctica por la Fundación Simón Bolívar, una propuesta que ha dado lugar al reconocido Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles que ha recuperado de las calles y entornos conflictivos a tantos niños y niñas con un severo riesgo de exclusión social y siempre expuestos a la violencia y a la delincuencia.

Tal como explica Simona Paola, con estudios de flauta travesera y a la vez licenciada en psicología, creadora de esta propuesta musical, los jóvenes de la ciudad de Velletri, una población integrada en el área metropolitana de la ciudad de Roma, acceden a la banda sin tener formación musical alguna. Asisten por propia voluntad e interés a las clases y participan en las actividades y conciertos propuestos por su directora, practican la coeducación con sus propios compañeros y asumen la responsabilidad de participar en un proyecto común. En este sentido, fue pertinente la aportación de Amadeu Urrea según la cual el gasto en formación musical debería ser considerado una inversión social a largo plazo y no un coste en términos puramente económicos que asumen instituciones, administraciones y entidades.

En un segundo turno de intervenciones, en la mesa redonda se debatió sobre las principales dificultades que deben afrontarse en el día a día de una banda. Los directores/as coincidieron en la poca motivación de los músicos por asistir a los ensayos y también en la falta de estrategias de que disponen como gestores de recursos humanos que son en realidad.

Una buena estrategia aplicable para luchar contra el absentismo en los ensayos es sin duda hacer pedagogía entre los músicos en el convencimiento de que su asistencia es un acto de respeto hacia los compañeros, y a la vez el convencimiento de estar contribuyendo a un objetivo común en el que todos, sin excepciones, son necesarios. Relativo a los conflictos que inevitablemente surgen en todo colectivo humano -no olvidemos que una banda puede estar formada fácilmente por unas 40-50 personas- se coincidió de manera unánime en la falta de preparación por parte de los directores/as. A pesar de la buena voluntad, los directores/as de banda -a diferencia de otros ámbitos como la empresa o la educación- no tienen una formación específica en este sentido, una formación que sería deseable en los estudios superiores de dirección de coros o dirección de orquesta. En los planes de estudios de todas aquellas especialidades que implican la gestión de grupos humanos, más allá de los conocimientos técnicos y específicos se debería incluir una formación en psicología básica que aporte recursos prácticos y estrategias en la resolución de conflictos, una formación que sin duda ayudaría a los futuros directores/as a gestionar más eficazmente sus grupos. En este sentido, resulta oportuno recordar el consejo que el conocido pianista leridano establecido en París Ricardo Viñes daba a sus discípulos cuando los animaba a “tocar menos y leer más”, un consejo con el que pretendía estimular a los futuros pianistas a ambicionar una profunda formación global y humana más allá de la estrictamente musical. Una formación que ciertamente acabaría influyendo de manera decisiva en una previsible futura carrera musical. No olvidemos tampoco que el director/a de una banda, des del momento en que lidera una formación, se convierte en un modelo para todos sus miembros tanto en el aspecto musical como también en el aspecto humano. Sus opiniones, actitud, modos y comportamiento son una poderosa herramienta educadora para el colectivo.

Preguntados sobre el dilema Concierto versus Espectáculo, el debate entre los directores /as se centró ahora en el modelo de actuaciones que habitualmente las bandas ofrecen a sus públicos. Mientras el concierto en el sentido estricto era percibido como un modelo más elitista -pero no por ello menos necesario- que implica la existencia de un público con una cultura musical consolidada sólo factible en grandes ciudades, el espectáculo -entendido como la combinación de distintas disciplinas artísticas o la inclusión de elementos extramusicales- resulta asequible a públicos más amplios y diversos. Justamente, las bandas, por su propia esencia, ya se dirigen a un público amplio y popular.

Si tenemos en cuenta, además, que cada vez resulta más difícil llenar auditorios, salas o espacios de conciertos, tener en consideración los gustos y preferencias del público resulta un factor clave que los directores/as deberían tener siempre presente en la selección de repertorios y en la implementación de estrategias encaminadas a implicar y atraer el público. Sin embargo, Concierto y Espectáculo no deben ser vistos como modelos que se excluyen sino complementarios que necesariamente deben convivir.

A modo de conclusión, todos los directores/as coincidieron en que -a pesar de todas las dificultades existentes- las bandas de música tienen todavía un largo recorrido, su futuro hoy por hoy no está cuestionado, aunque cada vez más será necesario adaptarse a las nuevas realidades y a los cambios sociales y estéticos que inevitablemente se producirán en el futuro. Un futuro que depende en gran parte de la capacidad creativa, de previsión y de adaptación a los cambios que muestren los mismos directores/as en el desarrollo de su labor.

Dr. Lluís Marc Herrera

Fuente: Revista Diapasón. 16 mayo, 2024

En este año 2024 se conmemora el 50º aniversario de la Fundación de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, cincuenta años desde aquel 17 de octubre de 1974, donde un grupo de soñadores, amantes de la música, emprendedores, tenaces, pero sobre todo amigos, decidieron que era necesario que Yecla contara con una institución que fomentara el conocimiento y disfrute de la Música.

Como ya todos sabrán, lo primero que hizo esta nueva Asociación fue poner en marcha una Escuela de Música, donde se fueran formando los jóvenes yeclanos que lo desearan, y donde en un principio impartían clases, de una forma totalmente altruista, varios músicos veteranos, y fue el germen para que años después su recién creada Banda de Música, dirigida por el maestro D. José Ortuño, participara por primera vez en un acto oficial, concretamente en la inauguración de la Feria de Septiembre de Yecla, el 24 de septiembre de 1976.

Concierto Banda AAMY, Feria de Yecla 1977.

Los pasodobles son un género musical que siempre ha estado muy unido a las bandas de música, siendo una parte importante de su repertorio, puesto que son las obras interpretadas en los pasacalles, toros, desfiles, dianas, etc… pero además, han formado parte de los programas preparados por sus directores para ser interpretados en conciertos, festivales, certámenes…

Como es normal, la Banda de Música de la AAMY, no es una excepción, y ha interpretado desde su creación multitud de pasodobles de todo tipo: de concierto, taurinos, festeros, dianeros…, y donde además se puede estudiar la evolución de la misma, puesto que la agrupación también lo ha hecho a lo largo de su historia. No son iguales las obras, incluidos los pasodobles, de la primera etapa donde la Banda estaba formada por no más de 30 ó 35 músicos, y una instrumentación muy simple, a los que se pueden interpretar actualmente con una formación integrada por cerca de 100 músicos, y una amplia y variada plantilla instrumental.

Conciertos Escolares Banda AAMY, año 1986.

Asimismo contamos con pasodobles que ya forman parte tanto del patrimonio musical como sentimental de nuestra Asociación: desde el que nos legó el maestro D. José Ortuño “SUMY” (Sociedad Unión Musical Yeclana), y al que ya hemos dedicado un artículo en esta sección; “Antonio Gonzálvez” compuesto por Manuel Carrascosa, y estrenado en el homenaje a D. José Ortuño en el año 1983; varios dedicados a nuestra entidad como “El Hospitalico” y “La Recogida” del yeclano Pedro Navarro Ruano o “Yakka” que fue dedicado por el murense José Rafael Pascual-Vilapana, con motivo de nuestra primera participación el Certamen Internacional de Valencia, el año 2007, y que ha sido interpretado por multitud de bandas de música, no solo en España, sino en los cinco continentes.

Solo centrándonos en los que han sido interpretados en conciertos, y por supuesto haciendo una pequeña selección, no podríamos nombrarlos todos, puesto que hemos realizado multitud de conciertos: escolares, extraordinarios, San Pedro, Santa Cecilia, Navidad, Festivales tanto en Yecla como en otras poblaciones, certámenes nacionales e internacionales, etc… De los primeros años recordamos: “Puenteareas” de Reveriano Soutullo, “Pepita Greus” de Pascual Pérez Chovi, “Antañona” y “Luchando” de Fernando Tormo Ibáñez, “Santander” de Ernesto Pérez Rosillo, “Barcelona” de Fausto Turell, “De Andalucía a Aragón” de Teixidor, “La Alegría de la Huerta” de Federico Chueca; y ya en tiempos más cercanos: “La Primitiva” de Jef Penders, “Certamen Levantino” de Pascual Marquina, “Suspiros de España” de Antonio Álvarez, “A mi madre” de Roque Baños, “El Tío Caniyitas” de Ricardo Dorado, ”Entornos” de Amando Blanquer, “Arte” de Juan Bautista Francés, “Los dos Adolfos” de Martín Domingo o “Música y vinos” y “Soñar el Mar” de Manuel Morales “

Concierto WMC Kerkrade 2017, Banda Sinfónica de la AAMY.

Hoy vamos a dedicar nuestra sección, tras esta amplia introducción, a “Luchando” de Fernando Tormo Ibáñez, que para mi tiene muchos y agradables recuerdos, porque era interpretado en los conciertos durante los años 1976 al 1983, bajo la batuta de nuestro añorado D. José Ortuño Ortuño, época en la que la banda no llegó a contar con más de 40 músicos, haciendo los ensayos en las antiguas dependencias de la torre del Reloj. Recuerdo que todo era muy familiar, muy cercano, los medios eran escasos, el frío se combatía en invierno gracias a una antigua estufa de leña, eran tiempos de pocos recursos pero mucha ilusión, y este pasodoble además de que siempre me ha parecido muy bonito y elegante, guarda para mí unos gratos recuerdos.

Partitura de “Luchando” pasodoble de Fernando Tormo Ibáñez.

Esta obra fue compuesta por Fernando Tormo Ibáñez, natural de Albaida (Valencia) con el título original de “Luchando por la vida”. El músico albaidense escribió esta obra durante una época difícil, muy triste, donde vivir el día a día era muy duro, características que se trasmiten en esta obra que contienen cierto carácter melancólico en la mayoría de sus melodías.

Al maestro Tormo le gustaba bautizar muchos de sus pasodobles como “pasodobles filosóficos” por la complejidad en su concepción, y puede que “Luchando”, compuesto en una época compleja en España, sea uno de los modelos de este tipo de música tan expresiva y majestuosa.

Fernando Tormo Ibáñez (Albaida 1882 – Tavernes de la Valldigna 1964).

Fernando Tormo Ibáñez, nace en Albaida (Valencia) en el año 1882. En dicha localidad inició los estudios musicales de la mano de su padre, que por aquellos años era el director de la Banda Nueva de Albaida, agrupación en la que ingresaría muy joven.

Posteriormente se trasladaría a Valencia para ampliar estudios con el maestro Palanca en el Conservatorio de Música.

Finalizados sus estudios dirigió una de las bandas de su localidad natal, pasando posteriormente a dirigir la Banda Primitiva de Liria, y con posterioridad las de Massanasa y Beniganin, regresando de nuevo a su ciudad para hacerse cargo de la Banda Municipal de Albaida, agrupación que con el tiempo se acabaría dividiendo en dos, y finalmente la Banda Municipal de Tavernes.

Entre sus obras, destacan los pasodobles: “Luchando”, “Sacul”,  “Antañona”, “Octubre en fiestas”, El artístico”, “Estival”, “Frontón de Mora”, “Ladi Vasile”, “Calomarde”, “Zeluán”, “Amor de un artista”, “Perfumes de Azahar”, “Unión Musical”, las marchas moras: “El moro nefando” y “Moro judío”, o la marcha de procesión: “Christus”.

Fallece en Tavernes de la Valldigna en 1964.

A continuación vamos a escuchar el pasodoble “Luchando” del maestro Fernando Tormo Ibáñez, que lo disfruten.

Autor: José Miguel Ibáñez Lax

Pd: Dedicado a mi compañero y amigo Vicente Ibáñez Martínez.


Bibliografía:

https://acordesfesteros.es/compositores/tormo-ibanez-fernando/, consulta en línea el 23 de febrero de 2024.

Diccionario de la Música Española e Iberoamericana. Volumen 10. ISBN 84-8048-313-X. Sociedad General de Autores de España 2022.pag. 369

Archivo Asociación de Amigos de la Música de Yecla.

Amb el següent treball que tracte amb diverses metàfores i que desenvolupe lliurement, rendisc el meu petit homenatge a JOAN FUSTER I ORTELLS amb motiu del Centenari del seu naixement i el 30é. Aniversari de la seua mort ocorreguda el dia 21 de juny de 1992.

El treball estructurat com un pasdoble i amb diverses metàfores de Joan Fuster, tracte de la Música Celestial amb una Còmplice Ironia.

Amb aquest treball pose fi a la Trilogia Irònica que abasta els següents articles:

Aquesta Música em posa la pell de Gallina  –  Periòdic «Ciudad» d’Alcoi el 23 d’abril de 2010 i el 2 de gener de 2011

«Açò és Música Celestial o la Ironia necessita Còmplices»   –   Pàgina66  d’Alcoi 3 de maig de 2015 i en la Revista MÚSICA I POBLE nº 179 (maig de 2015, pàg. 66 i 67) que edita la Federació de Societats Musicals de la Comunitat Valenciana.

«Qualsevol soroll premeditat ja pot considerar-se que és música«.

Rememorat el Centenari del naixement i el 30é Aniversari de la mort de Joan Fuster i Ortells, vull retre el meu petit homenatge a aquest excepcional personatge amb el següent treball, relat què amb l’estructura musical d’un pasdoble i amb diverses metàfores seues, tracte de la música celestial amb una còmplice ironia.

Introducció:

«Les metàfores – les bones metàfores – no són sinó definicions imprevistes: dir la mateixa cosa, però per sorpresa. És una manera de dissimular-ne la trivialitat, i per això els poetes (i els que no ho són) l’usen copiosament».

Si el lector m’ho permet i aprofitant-me de les seues metàfores i no «cal dir que les presento sense demanar condescendència ni complicitat«, vull fer-vos partícips d’algunes singularitats solfístiques i de diverses essències populars que es reviuen en les festes de la nostra geografia, (Festes patronals, Falles, Moros i Cristians, …).

«La veritat és que mai no he pensat, de debò, escriure, les circumstàncies m’han adreçat, fins i tot, es probable que m’equivoqui. De tota manera, he de córrer aquest risc».

Acord dominant:

La música es el arte de bien combinar los sonidos en el tiempo”.

  Aquesta clara i breu definició sobre la música, la vaig rebre del mestre de solfeig quan vaig iniciar els meus estudis musicals.

Efectivament, aquest art que combina els sons de la veu humana o dels instruments i dels uns amb els altres d’acord amb les lleis de la melodia, de la harmonia i del ritme, habitualment ens produeixen dins del nostre ser, unes sensacions agradables, suggestives, racionals i lògiques. No obstant això, també percebem que en diverses ocasions, aquests sons produeixen en la nostra ànima unes sensacions molestes, irritants i fins i tot desagradables, és a dir, sentim música trastornada.

Melodia o to principal:

La Festa d’un poble i la seua Música.- Són en aquestes celebracions, alegres i bullicioses, quan una població recorda al seu patró o/i commemora un fet important de la seua història o tradició, tanmateix, al formar part d’un mateix sentiment col·lectiu, serveix per a enriquir l’esperit del ciutadà, manifestant clarament la capacitat d’assimilació social i cultural de tot un poble.

«Les veritats cal exagerar-les perquè resultin creïbles».

Veritablement i al formar part de les nostres arrels, els sentiments els mostrem clarament a través de la música, la mímica i la paraula, i reafirmant les qualitats i els defectes del nostre lloc de naixement i d’educació generacional, els utilitzem com un signe d’identificació cultural i com no, musical i festera.

Introducció al trio (piano):

«La ironia necessita còmplices».

Sabem que la ironia com a forma d’humor, consisteix en dir el contrari d’allò que volem expressar, per això musicalment i “festivament” matisem: la ironia necessita còmplices.

Trio (subdominant?) – piano:

Siga com siga, resulta inseparable el lligam de les festes amb la música. Així doncs, com «tots els versos estan ja fets«, i per donar-li un caràcter jocós i sarcàstic però assossegat, parlarem de poesia, és a dir, de música, de mímica i naturalment de festa.

«Les lliçons més útils són aquelles que decidim no aprofitar, i precisament perquè no les aprofitem».

Sabem que la festa ens duu a l’alegria i la diversió i que la clau de tota festa és la fer-nos partícips, i ho podem fer de dues maneres, activa i/o contemplativa, entenent que la primera, esmenta a tots aquells que organitzen i intervenen en la festa, mentre que la segon, al·ludeix als que si gaudeixen d’ella, però mostrant una actitud observadora i/o curiosa, en definitiva menys participativa.

«L’artista mai no està obligat a justificar la seva obra. Per principi, ell sempre té raó«.

Simultàniament és fonamental saber, què quan parlem i “sentim” les diverses composicions que interpreten els musics, no només tenim que valorar-les per la seues qualitats musicals i artístiques, sinó també per la seua idiosincràsia pròpia i pels seus referents històrics.

Introducció al trio (fort):

«Les aparences no enganyen, són aparences».

Però amb tot i musicalment parlant, contemplem que any rere any es propaguen en aquests esdeveniments, diverses discrepàncies solfístiques en les quals s’imposa una brillant? deformació interpretativa i sempre, allunyada a la creació original de l’obra. A més trobem colles d’artistes musicòmans? què amb la perfecta complicitat d’altres colles, parodien aquestes creacions musicals.

Trio (dominant?) – fort:

«Rarament es pot formular una veritat, cert tipus de veritat en tot cas sense que sembli una insolència«.

Moltes vegades escoltem expressions com «Açò és música celestial«, referint-se naturalment, al concert que ofereixen els executants de les fustes (xirimites incloses) amb una obstinació salvatge de tocar sempre en octaves super agudes i a més, desafinades, com també altres indòmits tocadors, amb la sana intenció de desdoblegar els saxòfons, les trompetes o els trombons o fins i tot les tubes, i emprenyats molts d’ells en bufar més fort que els companys que toquen al costat, és a dir, confonen la grandiositat d’un fort amb el so esgarrifós que produeixen.

«En art, la forma més justa de realisme és la caricatura«.

Tanmateix és significatiu el realisme personificat per alguns timbalers, què metrallant les partitures i amb les seues carasses i cabrioles, deixen bocabadats a un bon nombre de concurrència i condimentat amb els aporregadors de bombo, aconsegueixen espantar les mosques dels pobles més llunyans.

Si per una banda, descobrim a l’expert què amb tota l’aparença de músic, executa sense (o amb) “pudor” diverses solfes, per l’altra, es quedem sense paraules amb la comunicació sonora produïda pels instruments que empren les colles de batucades quan fan les seues tronadores demostracions i fins i tot, gaudim amb l’enginyós efecte melòdic aconseguit barrejant el pasdoble Valencia amb Cuando salí de Cuba.

«En art, la forma més justa de realisme és la caricatura«.

Efectivament, concebent que el so embriagador dels timbals duu a molts festers a aquest món celestial, és summament harmoniós veure a un cabo què amb un pet de sabre, es mou als aires del molinet1.

Així mateix aprovem amb mamballetes quan sona el tros mogudet: la pujà de … em posa la pell de gallina o vull sentir els timbals en els ronyons, potser per què només els agrada la música pel soroll que provoca i sense qüestionar-se què per a pujar, primerament hi ha que tocar baixet, és a dir suau o piano.

Quan diem les següents simpàtiques sentències: Açò ho pague jo. Pareixes una trompa marinera, o quina “marxeta” tocareu ara?, tots fem vots per a guanyar-se el cel. No obstant és més dolent que una pedregada quan escoltem aforismes com: Portat, menjat, begut i tornat, o poc tocar i molt cobrar, … en lo que cobreu, o aquest què em va deixar bocabadat: els músics teniu un mèrit impagable, mentre nosaltres ens fem el vermudet, vosaltres no pareu de bufar.

Així mateix, contemplem l’espontània complicitat d’alguns miróns o companys de correries, participant en aquests tipus de manifestacions o la situació molesta i inoportuna que pateix el públic que roman a la vorera del carrer, bé dempeus o bé assegut, quan alguns elements humans es “claven” pel mig i d’eixa manera inapropiada, no ens deixen gaudir de l’acte que esdevé en eixe instant.

«Fins i tot en els plaers més sensuals, hi ha una manera intel·ligent de gaudir-los».

Com he dit adés, els humans necessitem treure a l’exterior tots els sentiments que tenim arrelats en el lloc més profund del nostre ésser, sensacions que algunes vegades s’enfronten a la lògica i al raonament, i de la mateixa manera que descobrim que «en general no són els perjudicis que ens obliguen a obrar d’una manera o d’altra: sinó que ens hi obliguen, ben mirat, els perjudicis dels altres, trobem que la paraula (en aquest cas la mímica, la música i la festa) li fou donada a l’home, no per a revelar, ni per a ocultar els seus pensaments, sinó per justificar-los».

Da capo:

«Quan alguna vegada sembla que esteu d’acord amb altri, no em dubteu pas: és que hi ha un malentès«. 

Si tots sabem que els músics coneixen el seu meravellós art i que els festers són tots ells, fervorosos defensors d’aquestes tradicions fins i tot mil·lenàries, per què algunes d’aquestes demostracions es repeteixen regularment en el desenvolupament de les festes, sabent bé que hi ha una gran quantitat d’humans que discrepen dels comportaments anteriorment referits?.

Un llarg calderó . . . . o pausa . . . .

Coda:

«En art, la memòria és un error«.

Vull manifestar que aquest treball no pretén en cap moment tindre un caràcter ofensiu, ni tampoc procura donar cap discurs moralitzador ni als músics, ni als festers, ni als espectadors, ni molt menys pretén interferir verbalment en el desenvolupament tradicional de les festes, sinó que he volgut més bé, donar-li un caràcter jocós i sarcàstic a tot el seu contingut.

Si ho he aconseguit, benvingut siga, en cas contrari només jo passaré la pena.

Final:

«El poble diu “fer com fan n´és pecat. O sigui: “Com més serem, més riurem«.

Salut, Festa i Música.

Vicent Agulló

Postil·les; 1.- Pegar voltes i voltes sense para ni deixar de moure’s.

Pd. Els textos redactats amb lletra negreta i “cometes” pertanyen a l’assaig INDAGACIONS I PROPOSTES de Joan Fuster i Ortells – Edicions 62 i La Caixa – 1981.

Fuente: valenciaplaza.com

30/12/2023 – VALÈNCIA.

En 1886 l’Ajuntament de València organizó por primera vez el Certamen de Bandas de Música. Una innovación cultural que, con el transcurrir de los años, cambió para siempre el ecosistema musical en la Comunitat Valenciana y consiguió unas transformaciones culturales, sociales y económicas profundas y relevantes. 

El Certamen ha venido desarrollándose durante los últimos  135 años, y solo se ha visto afectado por pandemias, dificultades económicas extremas y, por supuesto, por la Guerra Civil Española. Fundado antes que la propia Banda Municipal de València (1903) y pocos años después del Conservatorio de Música de València (1879), se convirtió en catalizador del movimiento asociativo valenciano que se fue gestando y consolidando durante todo el siglo XIX.

Por suerte, disponemos de investigaciones y estudios que relatan la historia del certamen y de sus protagonistas y que describen con exactitud el desarrollo del mismo. Poco se puede añadir al respecto. No obstante, queremos reflexionar y poner el enfásis sobre los beneficios que el citado certamen ha aportado al conjunto de la sociedad valenciana y mucho más ahora que el Ajuntament de València, presidido por María José Catalá, ha anunciado importantes mejoras para la próxima edición.

No es fácil innovar en el terreno cultural. Las políticas que se desarrollan en este ámbito siempre son bienvenidas y cada vez se valoran más. De todos son conocidos sus beneficios para mejorar nuestra sociedad y para garantizar los derechos culturales de la ciudadanía. Un modelo económico basado en la cultura proporciona unos beneficios integrales difíciles de superar. Los estudiosos de la economía de la cultura pueden dar más argumentos.

València es tierra de músicos, sus agrupaciones musicales civiles son conocidas desde muchos años en todo el mundo. Es más, la práctica musical forma parte de la identidad del pueblo valenciano y desde hace décadas exportamos talento al resto del mundo. Todo ello, gracias a nuestras valiosas sociedades musicales, que han proliferado por la totalidad de la geografía valenciana. Muy conocido, no hace falta insistir

Esto no hubiera sido posible sin  el Certamen de Bandas de València. Esta es la idea que queremos proclamar aquí. Proporcionó un  escenario en el cap i casal para que las bandas de las poblaciones valencianas pudieran actuar y mostrarse más allá de sus ámbitos locales, estimuló económicamente estas asociaciones y, sobre todo, insufló la pasión por mejorar y por aumentar la calidad de las mismas. Sin el Certamen, jamás se hubiera conseguido incrementar la excelencia de nuestras agrupaciones hasta las cotas inimaginables que llegarían despúes. Un nivel de excelencia que incentivó, además, la calidad de nuestros intépretes, directores y compositores que encontraron en el Certamen el estímulo necesario para mejorar y competir. Muchas de las figuras valencianas indiscutibles del panorama musical mundial saben lo que es participar en el certamen de Valencia. Hablamos de Gustavo Gimeno, Francisco Coll, Álvaro Albiach, Vicente Zarzo, Francisco Salanova, etc.

Además, la historia reciente y la singularidad de poblaciones como Llíria, Cullera y Buñol tampoco se entenderían sin el Certamen de Valencia. En estas poblaciones encontramos dos bandas de música que históricamente han concurrido juntas a estes Certamen originándose una sana rivalidad que ha propiciado y estimulado la calidad de las mismas. Es lo que la investigadora Josefa Cucó califica como dualismo sociológico donde dos grupos humanos se reafirman uno contra otro mediante un mecanismo de rivalidad y emulación. El Certamen de Valencia fue el marco adecuado para el desarrollo de esta rivalidad.

En el terreno cultural los beneficios también son indiscutibles. En una edición del Certamen de Valencia participan más de veinte agrupaciones que aglutinan alrededor de mil músicos. Se organizan cuatro conciertos a los que asisten más de seis mil personas y generan un movimiento de participación en las respectivas poblaciones de un impacto difícil de cuantificar pero de gran magnitud. Preparar un certamen exige muchas horas de ensayo. Por encima de todo, la pasión y la ilusión por ganar y mejorar, y se crea un círculo virtuoso que moviliza a miles de personas cada año en la Comunitat Valenciana. Se trata de un gran espectáculo de la música para Banda.

También es verdad que los Certámenes generan ganadores y perdedores, algunos puristas de salón dirán que se trata de algo arcaico y cargado de atavismos, pero funciona y ha funcionado durante ya más de un siglo. Ahí están los resultados. El Certamen ha generado la creatividad necesaria de los compositores valencianos que han encontrado en él el escenario para escribir magníficas obras para Banda. También ha mejorado la calidad en el ejercicio de la dirección musical y ha consolidado el crecimiento económico de las sociedades musicales que han necesitado la obtención de recursos extraordinarios para concurrir con todas las garantías al Certamen. ¡Casi nada!

Y no digamos los beneficios intangibles de colocar a Valencia en el centro de la música de viento en el mundo. Al Certamen, desde los primeros años, han asistido las mejores bandas de música del panorama internacional y ha generado un turismo musical parecido al que se puede encontrar, salvando las distancias, en Bayreuth o Viena. Sin embargo, no hemos sacado pecho de todo ello.

Tenemos la suerte de contar en la actualidad con una alcaldesa que sabe lo que es el Certamen, concurrió de joven con su Banda y experimentó la pasión y la ilusión que miles de jóvenes músicos han vivido en sus años de juventud. Nadie tiene que explicarle nada. Una de sus primeras medidas ha sido encargar a sus colaboradores un gran impulso a este proyecto. En ello estamos.

Para finalizar, queremos concienciar a las sociedades musicales valencianas para que participen en este y otros certámenes, todos los músicos valencianos estaremos siempre en deuda con él. Pongamos a València en el panorama musical mundial exibiendo esta gran fortaleza y conociendo en profundidad los beneficios obtenidos durante estos ultimos años. Es de justicia.

Manuel Tomás Ludeña
Coordinador de Estrategias, Estudios y Proyectos del Ayuntamiento de València

Se acaba de publicar el nuevo Decreto que regulará las escuelas de música y de las artes escénicas en la Comunitat Valenciana.

Un texto de importancia capital para el ecosistema musical valenciano y en particular para nuestras queridas sociedades musicales, titulares de la mayoría de ellas.

Manuel Tomás · 14 febrero, 2022 

Hay mucho en juego: Un modelo educativo acertado, la propia subsistencia de las citadas sociedades musicales y sobre todo, atender a las necesidades formativas y culturales de miles de músicos valencianos. Este Decreto afectará en menor o mayor medida a un colectivo que aglutina alrededor de un millón de personas.

Y no solo eso, debido a la incardinación de “lo musical” aquí, también está en juego aspectos tan importantes como la empleabilidad de miles de jóvenes músicos, el desarrollo económico de  nuestro territorio y algunas políticas de carácter social muy relevantes como la despoblación y la cohesión social.

Cuestiones generales

En términos generales, hay que aplaudir el esfuerzo en el terreno de la ordenación académica realizado por la administración educativa. El último Decreto, ahora derogado, fue publicado en el 2013. Es una buena política mantener actualizado permanentemente el marco normativo a las transformaciones, cada vez más rápidas, que experimentan las sociedades actuales. Primer cuestión positiva.

La segunda. No es un texto sectario ni “de parte”. Los argumentos expuestos en la exposición de motivos se agradecen, sobre todo para alguien como el que suscribe, que ha tenido responsabilidades en anteriores administraciones. Miremos lo expresado en la exposición de motivos:

“El Decreto 91/2013, de 5 de julio, del Consell, por el que se regulan las escuelas de música de la Comunitat Valenciana, supuso, en su momento, un avance a la hora de formular un modelo educativo propio,
singular y de calidad para la enseñanza no formal de la música. En este sentido, la regulación que propugna el presente decreto, en consonancia con lo propuesto por el Decreto 91/2013…….”

Nada de sectarismos, el nuevo Decreto entiende la importancia de lo que pasó en el 2013 y pretende profundizar en el camino que se abrió entonces. Un Decreto que para “más inri” fue trabajado y pactado en ua comisión paritaria administración/FSMCV que se reunió muchas veces y  negoció con intensidad.

Como es de bien nacidos ser agradecidos y en justa correspondencia, nos gustaría poner en valor el esfuerzo técnico del Servicio de Enseñanzas de Régimen Especial y de sus profesionales, un servicio creado en el 2012 y que despúes de casi diez años de actividad cuenta con personal formado y con conocimientos suficientes. Lo han demostrado en la redacción de este Decreto. Enhorabuena.

Pero vayamos a realizar un análisis más detallado. Hay mucho que decir, dejaremos algunos aspectos para otros artículos y nos centraremos en lo más relevante. Porque el Decreto es profundamente transformador, innovador y si me permiten arriegado y valiente. Puro “Rock and Roll”. Algo que puede generar polémica pues incluye algunas cargas de profundidad de bastantes megatones.

Escuelas de Artes Escénicas

En general, se incluye en la regulación la posibilidad de configurar escuelas de artes escénicas, es decir se puede avanzar hacia un modelo más integrado y abierto donde se combinen las enseñanzas del teatro y el circo, además de la música y la danza (estas últimas siempre juntas de la mano desde 1990).

Nos parece positivo, se abren posibilidades para muchas escuelas que quieran adentrarse en este terreno. Y quienes quieran quedarse solo en música lo pueden hacer. Solo alguna pega, si proliferan las escuelas de artes escénicas se deberá aumentar la cantidad en subvenciones y ayudas, de lo contrario “saldremos a menos” en el reparto. Y ya anunciamos el verdadero talón de Aquiles del nuevo Decreto, la pasta gansa.

Avances en el terreno pedagógico y organizativo

En el terreno pedagógico, como muy bien expresa el Decreto, felizmente se profundiza en un tipo de centro diferente al modelo “conservatorio” con una clara finalidad de atender a la formación del aficionado y normalizar la relación entre sociedad y educación musical. El nuevo Decreto esto lo hace de maravilla. Y me explico.

El primer obstáculo era sortear la restringida regulación de la Ley Valenciana de la Música que, al incluir las asignaturas de Instrumento y Lenguaje musical como enseñanzas mínimas, obliga a las escuelas de música a organizarse (e identificarse) como un conservatorio elemental. Un lastre que nos acompaña siempre. El decreto del 2013 lo sorteó, pero “la pirueta” del actual es antológica, de las que marcan época. Comprueben ustedes:

“En relación con el concepto de enseñanzas mínimas que se menciona en los apartados anteriores, se refiere al conjunto de conocimientos y habilidades que se tienen que adquirir en estas escuelas con carácter general. Dentro de su autonomía, las escuelas estructurarán las enseñanzas mínimas teniendo en cuenta que la oferta formativa debe favorecer la globalización de los aprendizajes para facilitar así que los procesos de enseñanza resulten efectivos en el contexto de lo que es una enseñanza de tipo no formal.”

¡Las enseñanzas mínimas no se entienden como asignaturas sino como conocimientos y habilidades! Aquí, como diría Maquiavelo, el fin justifica los medios. Todo sea por la autonomía de las escuelas de música. Totalmente de acuerdo.

Y lo mejor del Decreto en el terreno organizativo, el artículo 15 que establece el Programa de Aprendizaje como la forma básica de organizar la enseñanza en las escuelas de música. Un gran avance que posibilita huir de los esquemas tradicionales de las enseñanzas formales, organizadas historicamente en cursos y asignaturas. No obstante será necesario formar al profesorado y los directores a qué organicen las escuelas mediante Programas de Aprendizaje.

Además, cuando habla de la evaluación, remata la cuestión:

“El concepto de promoción y permanencia no será aplicable a estas  enseñanzas.”

Normal y lógico. Fuera ya las calificaciones en unas enseñanzas que no expiden titulaciones ni existe un curriculo oficial básico que integrar y cumplir.

Prosigue el Decreto más adelante hablando de Evaluación abriendo la posibilidad de evaluaciones externas con consecuencias para obtener ayudas y subvenciones:

“Esta evaluación se entiende como una rendición de cuentas de las escuelas en relación con la calidad de las
enseñanzas que ofrecen y podrá tener efectos directos en su financiación”.

Otra bomba según mi juicio. Y no podemos estar más de acuerdo. Cuando se obtienen recursos públicos una exigencia democrática elemental es someterse a evaluación y control. Ahora bien, si me permiten la maldad, sorprende que lo que ahora se pretende hacer con los centros de titularidad privada, la propia administración no quiera hacerlo en sus propios centros públicos, donde la palabra evaluación externa genera urticaria. Pero claro, las sociedades musicales y  el profesorado de las escuelas de música no tienen sindicatos potentes que rechacen con fuerza las “veleidades neoliberales”. No tienen a ningún “primo de zumosol” que salga en su defensa. Ni siquiera los centros concertados de enseñanza general que reciben muchos más recursos públicos soportan tal evaluación externa. O todos tirios o todos troyanos, pero no seamos nosotros las hermanitas pobres de la caridad pues duele la desconfianza.  Juzguen ustedes

Y siguen las innovaciones, la pandemia ha dejado su huella también en el Decreto. Aquí lo tienen:

Las escuelas de enseñanza artística no formal de música y de artes escénicas podrán implementar estrategias de formación híbrida presencial o semipresencial con apoyo telemático”.

Muy bueno y oportuno, pasando por la izquierda a las enseñanzas de los conservatorios, incluidos los conservatorios superiores que no tienen autonomía, por muy superiores que sean, para impartir enseñanzas en formato telemático a diferencia de las Universidades. Con esta medida, las escuelas de música tienen una oportunidad de crecimiento y de innovación muy grande, ahora solo falta que aprendamos a explotarla. Más necesidades de formación y más inversión en equipamiento, pues el Decreto sube el nivel de las plataformas digitales aplicables. Piticlín, piticlín..

Las titulaciones y requisitos del profesorado

Sigamos viendo más aspectos. Respecto a las titulaciones y a la formación y capacitación del profesorado, se sigue permitiendo la docencia en estos centros con el Título Profesional de Música. No hay más remedio, lo dice la Ley Valenciana de la Música. Pero hay avances. Ahora se necesita el título  expedido en la especialidad instrumental correspondiente  para impartir la propia especialidad. Es decir que un profesor con el título de Clarinete no puede dar clase de Trombón. Es de perogrullo pero necesario. Aunque no cerremos todas las puertas, una escuela de música en una zona rural despoblada con pocos recursos y poco alumnado puede necesitar que se flexibilice esta medida.

Aunque hay un aspecto que los redactores del Decreto no han tenido en cuenta: En el plan LOE, los títulos de música de las enseñanzas superiores son genéricamente de Interpretación ( u otra especialidad como Pedagógía), no hay un título diferenciado para cada itinerario instrumental. Un error de la LOE que ahora deberá ser tenido en cuenta para aplicar lo que establece el Decreto. Es decir, un trombonista y un clarinetista tienen el mismo título de Interpretación, a secas.

Y ahora viene otra bomba nuclear del Decreto: El profesorado debe disponer de formación pedagógica y didáctica que acredite sus competencias docentes, con una duración mínima equivalente 60 créditos. Es decir, si se toma como referencia de medida los créditos ECTS serian necesarios un total de 1.500 horas de formación. Si se toma como medida la formación acreditada en los CEFIRE’s, serían necesario un total de 600 horas de formación. Prácticamente un Máster. Brutal

Piensen ustedes que, hoy en día, no se exige este requisito para impartir la docencia en los conservatorios de música profesionales. Ya estamos otra vez cargando las tintas sobre los más modestos.

Ningún inconveniente cuando de mejorar la formación inicial del profesorado de escuelas de música se trata, siempre lo hemos propugnado. Pero se debería concretar más y establecer medidas transitorias y de acompañamiento para que no se distorsione el sistema ni los derechos adquiridos del profesorado. Pues según lo establecido en el decreto, es  un requisito obligado  a partir de ya para todo el profesorado actual y son casi 5.000. A falta de ver la concreción del Decreto, lanzamos las siguientes reflexiones:

  1. Lo lógico hubiera sido establecer un periodo transitorio para que el actual profesorado lo obtenga
  2. Se debería convalidar este requisito a aquellos que tengan una dilatada experiencia docente en escuelas y conservatorios de música. Por ejemplo, si acreditan 600 horas de experiencia docente.
  3. La organización de esta formación, desde el Servicio del Profesorado de la Conselleria no será tarea fácil. Aunque es verdad que la propia FSMCV y algunas entidades privadas pueden contribuir a ello, como pasa con el resto de enseñanzas.

Bravo por la exención de este requisito a los titulados de  las especialidad de Pedagogía de las enseñanzas superiores de música. Era de justicia. Aunque depués lo descafeinamos:

“Así mismo, estarán exentas (de la formación pedagógica) las personas que disponen del Título Profesional de Música o de Danza que puedan acreditar haber cursado asignaturas optativas de perfil pedagógico”.

Una oportunidad para los conservatorios porofesionales que se van a prestar a organizar asignaturas optativas con estos contenidos. Pero claro, equiparar una optativa de las enseñanzas profesionales a una formación de 60 créditos no parece muy equilibrado, la verdad.

El ejercicio del liderazgo educativo

Respecto al ejercicio del liderazgo, el nuevo Decreto avanza. Y está muy bien. La calidad educativa de cualquier sistema, centro o proyecto, reside, en primer lugar en el profesorado. En segundo lugar en la calidad en el ejercicio de la función directiva.

El Decreto obliga a incorporar la figura del director (ya lo hacía el anterior) y a exigirle una formación específica de 130 horas. No está mal. Es un curso superior. A estos sí se les da un periodo transitorio  para la obtención de este requisito.

Necesitamos buenos líderes que organicen correctamente la escuela, que impulsen las innovaciones necesarias y transformen estos centros en la línea establecida por el Decreto. No será fácil. Sin la formación adecuada de un cuerpo de élite, el Decreto no se aplicará. Aquí se debe insistir y mucho, es un aspecto clave. Más trabajo para el Servicio de Formación del Profesorado y la FSMCV. Como verán ustedes, la factura sigue subiendo, ya veremos al final lo que cuesta.

Además, nos parece muy acertado que el director tenga el título superior de música y forme parte del Claustro. De esta manera se asegura que los directores sean profesionales de la educación musical capaces de liderar un proyecto de carácter educativo y no como ha ocurrido en otros lugares de España donde se eligieron gestores culturales para dirigir las escuelas de música municipales con resultados muy pobres.

Y ahora un detalle muy bonito: Las escuelas de música se verán representadas en los Consejos Escolares Municipales. Muy bien, más normalidad educativa, nada de sentirse especiales.

Condiciones laborales del profesorado

Y ahora viene otra bomba nuclear. A cuenta del horario del profesorado en lo que respecta a las horas complementarias.

“Las horas complementarias del personal docente serán determinadas proporcionalmente a partir de las horas de docencia directa que tiene cada docente.

  1. La distribución de horas del personal docente se realizará respetando a lo largo del curso la planificación inicial y teniendo como referencia el calendario escolar y la proporcionalidad de horas establecida en la normativa aplicable a las enseñanzas artísticas de tipo formal”.

Madre del amor hermoso. También tenemos la esperanza que la concreción del Decreto aclare las incertidumbres que esto genera.

Para que me sigan, en las enseñanzas formales de los conservatorios públicos, la jornada laboral de un profesor es de 37,5 semanales, distribuidas de la siguiente manera: 18 horas lectivas de docencia directa con el alumnado, 12 complementarias (tutorías, guardias, asistencia a reuniones, etc..) y 7,5 de estudio y preparación de clases.

En las escuelas de música, debido a la escasez de recursos, en la mayor parte de ellas se contratan y pagan solo las horas de docencia. La cosa no da para más. Si no interpeto mal, ahora, un profesor que tenga el horario completo debe trabajar unas doce horas complementarias más.

Imagino que esta medida no estará en contradicción con los Convenios Laborales aplicables y la Abogacia de la Generalitat y el Consell Jurídic Consultiu habrán asegurado su legalidad. El profesorado de las escuelas de música ni son funcionarios ni personal al servicio de las administraciones públicas, son trabajadores cuya actividad está regulada por la legislación laboral y no la administrativa. Posiblemente todo va a quedar en una declaración de intenciones. Los especialistas en derecho laboral dirán.

Pero más allá de estas dudas,  se trata de una mejora laboral que agradecerá el profesorado pero que nuestras sociedades musicales a duras penas podrán asumir a no ser que reciban más ayudas para ello. De  lo contrario deberán repèrcutir  el gasto extraordinario sobre las cuotas que paga el alumnado.  A ver que dicen las sociedades musicales y la propia FSMCV al respecto, la que mejor actúa defendiendo a las sociedades musicales; la organización más parecida a la patronal del sector. Como pueden observar, la cuenta sigue subiendo…

Sobre la financiación

Para finalizar, la gran decepción. Ningún avance en la financiación, una simple remisión a la Ley Valenciana de la Música que en este terreno sigue durmiento el sueño de los justos y la habitual regla de no incremento de gasto; la Conselleria de Educación debe con sus propios medios atender lo nuevo.  Y eso que la cuenta va subiendo conforme se lee el Decreto. En definitiva: ¡Aquí le regalo un Ferrari pero usted  se lo debe pagar!

Un reforma de este enorme calado debe ser sustentada con más recursos. Los 11.300.000 euros de la Orden de subvenciones deben ser incrementados sustancialmente, de lo contrario, el decreto quedará en papel mojado.  Somos conscientes que la cantidad destinada actualmente cubre una buena parte de los gastos y déficits de las escuelas de música pero perpetúa el modelo actual. Si se pretende avanzar en un modelo de mucha más calidad y exigencia, van a ser necesarios compromisos más firmes de financiación y no solo confiarlo a la línea de subvención que tiene una capacidad limitada para generar transformaciones profundas. Pues las sociedades de música no tienen la seguridad que la linea de subvención se mantendrá estable y no se minorará en función de los ciclos económicos y por ello, no se animan a mejorar las condiciones del profesorado ni a realizar inversiones importantes.

Ni siquiera las escuelas de música en territorios con problemas de despoblamiento obtienen un guiño especial en este sentido. No hubiera costado nada poner que estas gozarán de especial tratamiento para su financiación y abrir la posibilidad a que la Agència Valenciana Antidespoblament  pudiera echar una mano.

¡Qué lástima! Con la gran cantidad de fondos europeos que estamos recibiendo, destinar unos pocos al desarrollo de este proyecto, sacaría de la precariedad laboral a más de cinco mil profesores/as, ayudaria a sostener y mantener a nuestras sociedades musicales y por encima de todo, mejoraría la calidad educativa para atender las necesidades formativas del conjunto de la población.

En conclusión, un gran avance en el terreno educativo y la mejora integral de las escuelas de música.  Un innovación en la línea correcta. Pero al mismo tiempo, una precio elevado para su implementación sobre las espaldas de las sociedades musicales. Bastante cargadas ya y con las fuerzas muy justas. Esperemos que se tomen las medidas adecuadas para la financiación. Seguro que así será, más tarde o temprano.

Manuel Tomás Ludeña

Socio fundador de LIMES3

La publicación en noviembre del Real Decreto 984/2021, de 16 de noviembre, por el que se regulan la evaluación y la promoción en la Educación Primaria, así como la evaluación, la promoción y la titulación en la Educación Secundaria Obligatoria, el Bachillerato y la Formación Profesional ha causado una honda preocupación en los conservatorios profesionales de todo el país, y también una perturbación para muchos alumnos y sus familias.

Fuente:  ·  

El motivo: El citado Real Decreto complica, y mucho, el llamado comúnmente Bachillerato Musical, que se obtiene si superas las asignaturas comunes del Bachillerato en cualquier instituto español y los cursos 5º y 6º en cualquier conservatorio o centro autorizado de nuestro territorio.

Esta potente acción, impulsada por primera vez en 1992 por la famosa LOGSE, era una medida muy efectiva para facilitar la simultaneidad de las enseñanzas de Música y las enseñanzas de bachillerato y aligerar las elevadas cargas lectivas que padece nuestro alumnado. Iba dirigido mayoritariamente a aquellos que quisieran cursar las enseñanzas superiores de Música y dedicarse profesionalmente a la Música.

Para este perfil de alumnado, la solución era ideal porque les evitaba una carga lectiva de doce horas semanales que podían dedicar al estudio individual y autónomo que requiere la práctica musical de carácter profesional.

Para los conservatorios también era una acción de enorme prestigio, según mi opinión, ya que equiparaba en cierta manera nuestras enseñanzas y titulaciones con una modalidad de Bachillerato. Compárese con la utilidad y el prestigio del Título de Enseñanzas Profesionales de Música y se verá. Pero esto es otro tema.

Gracias a ello, durante los últimos treinta años han sido muchos los/las alumnos/as  que finalmente han optado por este tipo de Bachillerato ya que, como todos sabemos, les ahorra muchos esfuerzos innecesarios.

También es verdad que este Bachillerato ha tenido, además de sus luces, alguna que otra sombra. La primera de ellas, imputable a nosotros, al profesorado de los conservatorios, que jamás fuimos capaces de orientar adecuadamente al alumnado y mostrar claramente sus ventajas. Añadimos, además, el desconocimiento que, en muchos institutos, se tenía y se sigue teniendo al respecto. ¡Cuántas veces, como director de conservatorio, tuve que dar a conocer a mis compañeros directores de instituto este Bachillerato vigente desde 1992! Ni sabían que existía.

La segunda de estas limitaciones es las restricciones para acceder a la Universidad si finalmente el alumnado desiste de ir a los conservatorios superiores. El mismo alumnado y sus progenitores han dudado en escogerlo por no cerrarse opciones para ingresar en la Universidad en caso de no tener plaza en un conservatorio superior,  o bien por un cambio de idea a última hora. Una vez me dijo un padre: “Si mi hijo pierde el dedo en un accidente, entonces qué hace con este Bachillerato…” No comment.

Evidentemente, este Bachillerato está pensado para aquellos convencidos en cursar enseñanzas superiores de Música y dedicarse profesionalmente a la Música. Pero, como en la vida todo puede pasar, las dudas, a mi entender exageradas, le restaban prestigio. Así y todo, con las limitaciones descritas, cumplió su función  y ayudó a mucho alumnado.

Con la LOMLOE nos las prometíamos felices. En otro artículo en este mismo blog, celebramos la redacción de este Bachillerato en el texto de la Ley Orgánica. Aún a riesgo de quedar como ingenuo, transcribo lo que dije hace algunos meses. Maldita hemeroteca.

“Otra medida que nos ha gustado mucho ha sido la nueva regulación del Título de Bachiller para el alumnado que cursa simultáneamente las enseñanzas de Música y las materias comunes del Bachillerato. Ahora se dice claramente que los alumnos que obtengan este Bachiller lo harán en la modalidad del Bachillerato en Artes. Ésta es la mejora. Simple y efectiva.

Este tipo de Bachillerato ya se implantó en 1990 con la LOGSE, pero tenía un problema por su indefinición. Era una especie de “pegote”, no era una modalidad propiamente dicha y planteaba problemas para aquellos que lo tenían y decidían no cursar las enseñanzas superiores o ir a la Universidad. De hecho, solo lo cursaban aquellos alumnos que estaban muy convencidos de seguir los estudios superiores de Música en un conservatorio superior. A la mínima duda, el alumnado se decantaba por otra modalidad de Bachillerato con el consiguiente exceso de carga lectiva, doce horas más. Para salir corriendo.

Ahora ya no es así. Esta medida provocará directamente una mayor confianza del alumnado y de sus familias, facilitará también la comprensión de esta modalidad dentro del sistema educativo. Y sobre todo facilitará a nuestro alumnado el acceso a otros itinerarios formativos superiores. Y no solo eso, también se incrementa el prestigio de nuestros conservatorios profesionales cuyas enseñanzas son homologables ahora a las del Bachillerato, algo que puede ser poco comprendido entre el sector, siempre proclive a sentirse “diferente”.

¡Qué inocencia la mía! Desconocíamos las pretensiones del Ministerio de Educación al respecto. Pero vayamos a ver “el cuerpo del delito. Aquí lo tenemos. El citado Real Decreto que desarrolla la LOMLOE, en su artículo 21.3,  nos dice:

“3. También podrán obtener el título de Bachiller en la modalidad de Artes quienes hayan superado las Enseñanzas Profesionales de Música o de Danza, y las materias (comunes) establecidas en el apartado 1 de este artículo, que son:

  1. Filosofía.
  2. Historia de España.
  3. Lengua Castellana y Literatura I y II y, en su caso, Lengua Cooficial y Literatura I y II.
  4. Primera Lengua Extranjera I y II.”

Y las correspondientes a la citada modalidad conforme al apartado 2:

“Modalidad de Artes: Fundamentos del Arte I y II.”

Aquí tenemos el origen de nuestros males. La bomba de relojería reside en incluir dos asignaturas de la modalidad de Artes. Y lo explicaremos. Vaya por delante que la intención ha sido buena pero, por lo visto, los responsables no conocen con profundidad nuestras enseñanzas. Vamos por partes:

Creo sinceramente que la intención era buena. Sin duda, con esta regulación eliminan dos asignaturas comunes, la Historia de la Filosofía y la Educación Fisica y las sustituyen por Fundamentos del Arte I y II. Una decisión más adecuada desde el punto de vista  curricular. Sin ánimo de molestar al profesorado de Educación Físca e Historia de la Filosofía, parece más adecuado para formar músicos que estos aprendan  Fundamentos del Arte. Pero ahí no está peligro.

Este Bachillerato ya no se podrá cursar en todos los institutos. La inclusión de una asignatura de la Modalidad de Artes obliga al alumnado a elegir un instituto que imparta esta modalidad. Y como son muy pocos, muchos no podrán hacerlo. Esta es la diferencia. Antes nuestro Bachillerato se podía cursar en cualquier instituto español. Ahora solo en aquellos que tengan autorizada la modalidad de Artes. ¡Descubierta la puntilla!

Por poner un ejemplo, en la Comunitat Valenciana tenemos un total de 472 institutos públicos y privados (según los datos del Registro de Centros). Y de estos, solo 69 imparten la modalidad de Artes. Las cifras hablan por sí solas. Además, encontramos comarcas enteras y áreas geográficas extensas sin un instituto con esta modalidad.

Evidentemente, el alumnado de nuestros conservatorios que no tenga a su alcance un instituto con la modalidad de Artes directamente ni se planteará elegir esta opción con el perjuicio que esto supone. ¡Nada más y nada menos que volver a la década de los 80 con el anterior Plan 66! Un retroceso en toda regla.

Nos consta que son muchos los que han intentado sin éxito que el Ministerio rectificara. Por lo que nos comentan, en la Comunitat Valenciana se propone una solución parcial (mejor dicho, un parche) como es permitir que se curse la asignatura de Modalidad (Fundamentos del Arte I y II) a distancia. Bueno, algo es algo.

A mode de ejemplo, tengo un sobrino en esta situación estudiando primer curso de Bachillerato en Madrid, en su instituto de siempre. Pues bien, la dirección ya le obliga en cumplimiento de la legalidad una vez iniciado el curso, a que cambie de modalidad o de instituto, a uno que imparta la modalidad de Artes. ¡Menuda agresión en toda regla y, para más inri, una vez iniciado el curso! Aquí lo tenemos… Más claro, agua.

Además, hay aspectos que chirrían desde el punto de vista jurídico. No sé hasta qué punto el Real Decreto se está excediendo, los expertos en legislación dirán.

La LOMLOE dice claramente en su artículo 37.4:

También podrán obtener el título de Bachiller en la modalidad de Artes quienes hayan superado las Enseñanzas Profesionales de Música o de Danza y las materias comunes del bachillerato.

Y el artículo 50.2 establece:

El alumnado que finalice las enseñanzas profesionales de Música o de
danza podrá obtener el título de Bachiller en su modalidad de Artes en las
condiciones establecidas en el apartado 4 del artículo 37 de esta Ley.

Y nada más, la Ley Orgánica (LOMLOE) es taxativa, las asignaturas comunes y punto. ¿Cómo un Real Decreto puede enmendar la Ley, contradecirla e incluir asignaturas de Modalidad? ¡Que alguien nos lo explique, por favor!

En la Comunitat Valenciana, la Conselleria d’Educació está trabajando en una nueva normativa que simplifique el currículo oficial de las enseñanzas profesionales de Música. Una medida muy lógica y aceptada por el sector.  ¡Maldita la gracia que se nos libere de carga lectiva de nuestro propio currículo y que se incremente por el Bachillerato! Lo que ganamos por un lado lo perdemos por el otro.

Esperemos que se encuentre una solución. Mientras tanto, el alumnado que sueña con ser músico profesional tendrá un obstáculo importante en su trayectoria. O lo que es peor, como el título de enseñanzas profesionales no es necesario para concurrir a las pruebas de acceso a las enseñanzas superiores, a ver si el alumnado que quiere ser músico profesional abandona las enseñanzas profesionales y se prepara por su cuenta para acceder a las enseñanzas superiores sin pasar por las enseñanzas profesionales. Una opción cada vez más habitual. Llegado a este punto, el prestigio de las enseñanzas profesionales de Música estaría bastante afectado.

Esperemos que, de una manero u otra, se pueda resolver esta cuestión. Seguro que sí.

Sin ninguna duda, el trabajo que desarrollan las sociedades musicales en la actualidad es amplio, diverso y de gran repercusión en la cultura de nuestra Región

Escrito en https://blogs.laverdad.es/febandasrmurcia/ el Martes, 14 diciembre 2021

Se mantienen sus escuelas de música, su pilar fundamental, siendo como ya hemos dicho en multitud de ocasiones, la única posibilidad que los ciudadanos tienen para poder acercarse e iniciarse en el mundo de la música; se sustentan sus agrupaciones musicales (Bandas, Coros, Grupos de Cámara, etc.); se realizan actos culturales, conciertos de diversos estilos, festivales, certámenes, ciclos de conciertos, publicación de libros, edición de discos compactos, cursos de formación, encuentros sociales, etc.

Aparte de la implicación de sus miembros en los actos lúdicos, festivos y culturales de sus localidades, participando en actividades organizadas tanto por los organismos públicos como por entidades privadas: Semana Santa, Moros y Cristianos, Carnavales, Ciclos culturales, Fiestas Patronales, de barrios, etc.

Esto está muy bien, y es una realidad innegable, lo que sucede es que a veces por diversos motivos, somos incapaces de DIFUNDIR todo lo que estamos haciendo, llegar al gran público, estar TODOS unidos en la divulgación de lo que generamos, crear expectación en los medios de comunicación, y sobre todo y es algo que siempre que se me ha pedido mi opinión he remarcado mucho: CREER FIRMEMENTE EN LO QUE HACEMOS.

Esta gran labor social y cultural lo lleva a cabo, (según fuentes del informe sobre el impacto económico y sociocultural de las bandas asociadas a la Federación de Bandas de Música de la Región de Murcia -FBMRM- realizado por investigadores de la Universidad Politécnica de Cartagena -UPCT-) un colectivo social. No olvidemos que nuestras cerca de 50 sociedades se componen de socios, de más de 29.000 personas; cerca de 5.000 músicos entre miembros de las bandas titulares, juveniles e infantiles; escuelas de música con cerca de 8.000 alumnos/as, con sus respectivas familias, y más de 320 profesores.

Por eso es necesario el ir implicando cada vez más, a los medios de comunicación de nuestras localidades, a los regionales, y porque no, a los nacionales. Con su ayuda, conseguiremos que poco a poco el ingente trabajo que desarrollamos desde las Asociaciones Musicales llegue a más y más personas. Es una tarea compleja, pero a nosotros eso no debe de asustarnos, acostumbrados como estamos a superar retos más complicados.

Soy consciente de que en cada localidad se está empezando ya a trabajar con los medios locales, siempre que existan; como ejemplo pondré el de mi ciudad, que es el que más conozco, y donde tenemos presencia actualmente en el semanario Siete Días Yecla, con una doble página al mes; Teleyecla Radio con el programa semanal “Diapasón Radio”; con el espacio mensual “Damos la nota”; elperiodicodeyecla.com, con una entrada en su zona de blogs a nuestra revista digital, y con el resto de medios que cubren cualquier noticia generada desde nuestra Asociación.

Pero necesitamos llegar a muchas más personas, introducirnos dentro de la sociedad, que sepan que existimos, que conozcan todo lo que hacemos y lo que generamos. Por eso es tan importante que se estén realizando colaboraciones como las que, desde la Federación de Bandas de Música de la Región de Murcia, se han puesto en marcha a través de espacios en diversos medios de la Región, o simplemente porque ya se estén empezando a preguntar quiénes somos, y de los que subrayamos:

En Onda Regional de Murcia, se emite dentro del programa “La Gramola”, que dirige el periodista Miguel Massotti, el espacio semanal “A bombo y platillo”, donde se van descubriendo todas la Sociedades Musicales de Murcia, y se habla de las noticias más importantes que generan las mismas o la propia Federación.

La televisión autonómica 7 Región de Murcia, dentro de su espacio “Clásica en la 7” lleva ya varios años grabando y emitiendo desde el Auditorio y Centro de Congresos Víctor Villegas de Murcia, la mayoría de los conciertos del ciclo “Bandas en el Auditorio”.

Existen varios portales en internet como Murcia.com, donde suelen insertar todas las noticias generadas desde las bandas de música.

La revista digital Diapasón que edita la AAM Yecla, inserta una entrada semanal donde se incluyen colaboraciones de cualquier tipo relacionadas con la música y sobre todo con el mundo de las bandas, con participación de músicos, compositores, directores, gestores, padres, socios, etc.

Y como no, destacar la labor que se desarrolla desde este blog incluido en La Verdad digital, uno de los grandes medios informativos de nuestra Comunidad Autónoma.

Yo no soy ningún especialista, sólo soy un apasionado de la música y miembro desde hace más de 45 años de una de las asociaciones que componen la Federación murciana, pero desde hace más de 30 años estoy implicado en la promoción de dicha entidad.

Por eso, y después de esta experiencia, creo que es tan importante lo que les he remarcado antes sobre la difusión y la unidad de todo el colectivo en la promoción de nuestro trabajo, e insisto mucho en lo de TODOS, puesto que aunque cada sociedad, cada alumno, cada músico, cada directivo, cada socio, pertenezcamos a una localidad diferente, luchamos por lo mismo, no somos adversarios, no somos rivales, puesto que la banda de cada pueblo, siempre será la banda de cada pueblo, aunque luego exista la lógica y sana competencia, pero que al final siempre peleamos por lo mismo, la MÚSICA.

Por eso a veces es muy importante, y más ahora en este mundo globalizado, y donde las redes sociales tiene tanta repercusión, que cuando aparezca en cualquier medio de comunicación o en internet, alguna noticia o evento relacionado con una de las bandas federadas todos marquemos el famoso “like” del me gusta, que compartamos, que comentemos, que entre todos creemos y creamos en nuestras BANDAS.

Y como conclusión, y siempre bajo mi humilde opinión, me gustaría recalcar porqué estas dos actitudes: DIFUNDIR y estar TODOS unidos, son tan necesarias, puesto que si logramos despertar el interés entre los medios de comunicación, suscitar expectación entre los ciudadanos de nuestra Región, trasmitir lo que hacemos y generamos correctamente, conseguiremos que poco a poco seamos un referente para toda la sociedad Murciana y sobre todo para los gobernantes de nuestra Comunidad.

Todos sumamos, todos somos Música, todos hacemos Banda, todos somos Federación.

José Miguel Ibáñez Lax.

El próximo domingo 14 de noviembre en Camarena (Toledo) tendrá lugar la Asamblea Extraordinaria de la Federación Regional Castellano-Manchega de Sociedades de Música para la renovación de cargos de la Junta Directiva.

11/11/2021 Alcázar de San Juan (CR)

Asamblea que llega tarde, ya que fue solicitada por quien firma éste artículo y varios representantes de Bandas asociadas por Burofax, Correo Certificado y finalmente por e-mail a la atención del Presidente de la Federación, según marcan los Estatutos hace meses. No recibiendo otra respuesta más que “en el momento en el cual las pautas de vacunación de la Covid19 estén por encima del 70% de vacunados y la Asamblea pueda realizarse presencialmente se realizaría”, todo ello sin ajustarse a los propios plazos que marcan los Estatutos de la Federación.

De un total de 198 Bandas que figuraban en la web de la Federación hace unos meses, sorprendentemente en la convocatoria SOLO figuran 27 y algunas de ellas de reciente creación, afiliación o alguna que aun estando al corriente del pago de las cuotas no aparece en el listado de la convocatoria. Al restante numero de Bandas se las han dado de BAJA supuestamente por no estar al corriente con el pago de las cuotas de la Federación, pero… ¿Se les ha notificado correctamente dicha situación a éstas Bandas y se les ha preguntado por qué han llegado a éste descontento?

El domingo tenemos la oportunidad de VOTAR POR EL CAMBIO, de poder RENOVAR una Institución que lo único que hace es emitir certificados a las Bandas que se presentan a Certámenes de Bandas y poco más.

La Candidatura que represento y que pide el voto al resto de Bandas que tienen derecho a ejercer su voto en la Asamblea, está dispuesta a renovar, actualizar, mejorar y dar visibilidad a una Federación que tanto por el numero de Bandas de la Región como por la calidad de sus músicos necesita de una Junta Directiva dispuesta a velar por los intereses de las Bandas, ilusionar de nuevo a las que se han marchado de la Federación e invitar a las que aun no han formado parte de ella para conformar una Federación fuerte, unida y que realmente se interese por las necesidades de las Bandas, ya sean grandes o pequeñas, de una punta o de otra.

La ilusión por poder ejercer un voto se multiplica aún más cuando ese voto es para poder realizar un cambio tan necesario como la responsabilidad que asumimos los miembros de la candidatura en representar los intereses de todas las Bandas de la Región.

Los que me conocéis sabéis bien mi forma de trabajar y la involucración con todos los proyectos en los que formo parte, éste PPROYECTO, la RENOVACIÓN DE LA FEDERACIÓN es tanto para mí como para todas las Bandas que estamos esperando éste cambio un punto de inflexión para CAMBIAR lo que hay o “seguir como estamos”. NOSOTROS VOTAMOS POR EL CAMBIO, Y TU?

Jorge Román Bustamante, Candidato a presidir la Federación Regional Castellano-Manchega de Sociedades de Música. Presidente de la Asociación Banda de Música de Alcázar de San Juan (CR).

Hay varios pasos que nuestras entidades y por tanto sus directivos deben dar para intentar que los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) puedan llegar a formar parte de su vida asociativa en un futuro no lejano (el 2030 está más cerca de lo que parece).

El primer paso: la formación. Conocer el origen y el contenido de la Agenda 2030 o analizar el estado actual de cada ODS y sus metas facilita la posterior apropiación e integración. Es necesaria una formación adaptada a los intereses de los participantes, de tal forma que se exploren las conexiones entre los distintos ODS.

Una segunda parte ha de ser la apropiación. Apropiación significa “hacer una cosa suya” y para hacer una cosa nuestra antes debemos conectar con ella, creer en ella y que nos motive de tal manera que queramos incorporar-la en nuestra vida profesional pero también personal.

Finalmente, la integración. Entender los principios generales involucrados miso de incorporar los principios y va-lores de los ODS, no hace falta seguir adelante. Y ese compromiso debe contar con el respaldo expreso de los dirigentes de la entidad.

Diagnóstico

Tenemos que pararnos a pensar un poco y ver dónde estamos y hacia dónde vamos en relación con los ODS, viendo cuales son más cercanos a nuestras actividades. Y seguro que nos damos cuenta de que algún camino llevamos ya andado.

Integración en la gestión

Es necesario integrar los ODS en la gestión de nuestras entidades fijan do objetivos que contribuyan al cumplimiento de aquellos que hemos identificado en los pasos anteriores. Y para acercarnos a esos objetivos tendremos que hacer lo que tantas veces hemos hecho: ver que acciones ponemos en marcha para lograrlos. Y ejecutarlas, claro está.

Evaluación

Si asumimos la expresión “lo que no se mide no se gestiona” pues sencillamente la tenemos que aplicar también en todo esto. Y evaluar nos servirá, entre otras cosas para analizar el esfuerzo y ponerlo en relación con los logros, contrastar el antes y el después, corregir errores, motivar para futuros logros y también para rendir cuentas a nuestros asociados sobre lo que hemos hecho.

Comunicar las acciones realizadas

El aforismo, Lo que no se comunica, no existe, atribuido a Marshall McLu-han (profesor de literatura inglesa, crítica literaria y teoría de la comunicación) resume a la perfección este punto.

En concreto, sería bueno elaborar una memoria sobre lo realiza-do y conseguido, y por supuesto deberemos darlo a conocer a los medios de comunicación para lograr su difusión entre el público. Con ello a lo mejor hasta ayudamos a otras entidades a seguir este camino.

No podemos finalizar este resumen apresurado sin hacer una somera mención a las metas (los 17 ODS se desglosan en 169 metas) de los ODS más directamente relacionados con la cultura (que desgraciadamente son pocas).

La meta 4.7 destaca la necesidad de que la educación promueva una cultura de paz y no violencia y la valoración de la diversidad cultural y de la contribución de la cultura al desarrollo sostenible.

La meta 8.2 aborda la diversificación de la economía, que debería incluir la estimulación de las industrias creativas.

La 8.9, tiene como objetivo “Diseñar e implementar políticas para promover un turismo sostenible que cree empleos y promueva la cultura y los productos locales”.

La 11.4 llama explícitamente a la acción del sector cultural, y es la meta que la mayoría de nosotros conocemos: “Redoblar los esfuerzos para proteger y salva-guardar el patrimonio cultural y natural del mundo”

Por su parte las metas 8.9 y 12.b buscan “Elaborar y aplicar instrumentos para vigilar los efectos en el desarrollo sostenible, a fin de lograr un turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva la cultura y los productos locales”.

El análisis que cada uno de nosotros hagamos de la relación entre estas u otras metas y el fin social de nuestras entidades nos ayudará a darnos cuenta de que efectivamente las sociedades musicales ya estamos contribuyendo (en la mayoría de los casos me atrevo a decir que de manera espontánea y no consciente) al cumplimiento de los objetivos de des-arrollo sostenible de la Agenda 2030.

Ahora se trata de ser conscientes de ello para así poder jugar un papel relevante. Pero obviamente este recorrido no lo podemos hacer solos. Si definimos la gobernanza participativa como compartir la responsabilidad, entonces debemos concluir que esta responsabilidad se puede compartir en muchos niveles diferentes y de muchas formas diferentes.

Convoco desde aquí a todos los actores implicados para que cada uno desde el lugar que ocupamos trabajemos en común con el fin de acercarnos y contribuir al cumplimiento de estos objetivos.

Con ello contribuiremos a que la cultura sea de verdad un motor de desarrollo social y económico. 

Luis Vidal Domínguez es tesorero de la CESM, músico y economista.

Artículo publicado en versión papel de Las Bandas

⇒ Ir a Cultura, sociedades musicales y agenda 2030 (I)

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L’empresa “Consolat de Mar”, fundada i impulsada per Carles Subiela, ha rebut la distinció al Mèrit Empresarial i Social de la Generalitat Valenciana. Un premi, sense dubte, molt merescut després d’una dilatada trajectòria aportant valor i ajudant als músics i a les societats musicals de la Comunitat Valenciana.

Són moltes les persones que hui celebren este Premi: Joves que han pogut comprar un instrument musical per complir els seus somnis de ser músics, agrupacions musicals de tot el mon que, gràcies a Carles, han adquirit un equipament per iniciar un projecte social i musical a les seus poblacions, etc… Es pot dir que Consolat de Mar ha inundat de música moltes parts del món on regnava el silenci i la foscor.

Carles va vendre un tractor per viatjar a la Xina començant una vida de pel·lícula. Ara diguem a esta gent emprenedors. Carles ho va ser quan encara no s’estilava. La seua visió va  aconseguir que els instruments musicals, eines molt cares des de sempre, pogueren estar a l’abast de qualsevol economia. Amb la seua llavor, la pràctica musical es va democratitzar i superar barreres insalvables.

Tots sabem que la música a la Comunitat Valenciana, mitjançant les societats musicals, és una manifestació de caràcter rural, popular i en mans dels sectors socials més desfavorits. Des de sempre, la pràctica musical ací ha representat una possibilitat de promoció social per a molts músics humils. Consolat de Mar va marcar una fita en esta tasca al resoldre un gran problema: El preu excessiu dels instruments musicals. La peça que faltava fins aleshores.

També de la seua mà, els músics i les agrupacions valencianes han visitat la Xina exportant el seu talent, sent encara més conegudes i contribuint a la projecció de la Comunitat Valenciana per terres orientals. Com ell sol repetir: “Sempre fent país”.

Però encara hi ha més. Amb tot açò podria haver-se aconformat. Però Carles sempre va més enllà i Consolat de Mar està contínuament desenvolupant una gran tasca solidària regalant instruments i col·laborant en qualsevol concert i festival musical; la seua presència és obligada en tots els actes musicals que se celebren pel conjunt de la geografia valenciana. Consolat de Mar i Carles són els amics dels més necessitats. A més d’emprenedor, un “mecenes” sense ser poderós econòmicament però amb molta, molta generositat i il·lusió. Quasi res!

Per açò i molt més, els amics i amigues de Carles es compten per milers perquè és una bona persona, sensible, culta i tolerant. Conversar amb ell és sempre un plaer. Els teus problemes i les teues alegries són seus també. Molt ferm en les seus pròpies conviccions però al mateix temps molt respectuós amb les conviccions dels altres, un cas difícil de trobar hui en dia on imperen sectarismes de tot tipus i actituds intolerants.

Sempre disposat a convidar a una paella a tot el mon, reparteix somriures i bon humor. Molt orgullós del seu poble (Benaguasil) i de la comarca del Camp de Túria, pot este dissabte, el dia de la festa de tots els valencians, replegar eixa distinció amb l’orgull del treball ben fet i amb l’admiració de la família, els amics i de tots el músics de tot el món.

Enhorabona Carles, tens moltes paelles a pagar i a celebrar durant els pròxims mesos!

Manuel Tomás Ludeña