Ya se puede recordar los newsletter de las noticias publicadas en la web de la CESM del mes de agosto de 2024

Noticias de la CESM, Federaciones, Sociedades Musicales, artículos de opinión todas éstas en las últimas noticias publicadas

CESM, 05 de septiembre de 2024

En 2021, la Confederación Española de Sociedades Musicales (CESM), creó un newsletter para dar a conocer las noticias generadas por la CESM, las que están nombradas o implicadas.

Por el tiempo fue ampliando las secciones de noticias de las distintas Federaciones, noticias de las Sociedades musicales, artículos de opinión, colaboraciones y/o otra índole relacionada con la música y la Cultura.

Ahora todas las últimas noticias publicadas en la web

Ver online 15/08/2024 Ver online 31/08/2024

Sobre la CESM 

La Confederación Española de Sociedades Musicales (CESM) es una entidad asociativa, sin ánimo de lucro, formada por diferentes federaciones que representan a las sociedades musicales de las comunidades autónomas del estado español, aglutinando y representando a más de 1.300 sociedades musicales, el 86% de España, con más de 110.000 músicos (amateurs en su mayor parte), 120.000 alumnos en su red de escuelas de música y danza y una masa social de más de 1.000.000 de personas. Estas entidades están gestionadas por más de 12.000 directivos voluntarios que realizan su labor de forma totalmente altruista y desinteresada, lo que hace posible que varios millones de personas, en todo el territorio nacional, conozcan de cerca a este gran colectivo, por tener un familiar o algún conocido cercano en una sociedad musical, en su escuela o en alguna de sus agrupaciones artísticas: banda de música, orquesta, coro, etc.

Desde 1993, la CESM persigue el objetivo de aunar todos los esfuerzos en favor del desarrollo del colectivo de las bandas de música, desde el asociacionismo civil, con el propósito de unir las federaciones que la integran para promover, difundir y dignificar la afición, enseñanza y práctica de la Música, potenciar el asociacionismo y proporcionar a la sociedad civil un medio de desarrollo y articulación cultural.

Como interlocutor institucional, la CESM lidera la representación nacional del mundo bandístico y es miembro del pleno del Consejo Estatal del INAEM desde el 2010, lo que le confiere el carácter de interlocutor válido para abordar todas aquellas cuestiones relacionadas con este enorme colectivo a nivel estatal e internacional.

También es miembro de la Sociedad Española de Musicología, Mesa Mercartes-Plataforma Profesional de las Artes Escénicas y la Música, de la Unión Europea de Músicos Aficionados y de la World Association for Symphonic Bands and Ensembles (WASBE).

Desde 1995, la Confederación Española de Sociedades Musicales es miembro de la International Confederation of Music Societies (CISM) y, a través de ella, de la UNESCO.

En la actualidad la CESM está compuesta por:

  • Federación de Bandas de Música de Andalucía.
  • Federación Aragonesa de Sociedades Musicales y Escuelas de Música Amateurs.
  • Federación Balear de Bandas de Música y Asociaciones Musicales.
  • Federación Castellano-Leonesa Asociaciones Musicales, Bandas y Escuelas Música
  • Federación Castellano-Manchega de Sociedades Musicales.
  • Federación Catalana de Sociedades Musicales.
  • Federación Extremeña de Bandas de Música.
  • Federación Gran Canaria de Bandas de Música.
  • Federación Regional de Sociedades Musicales de la Comunidad de Madrid.
  • Federación de Bandas de Música de la Región de Murcia.
  • Federación Tinerfeña de Bandas de Música.
  • Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana.

Fuente: Revista Diapasón. 16 mayo, 2024

En este año 2024 se conmemora el 50º aniversario de la Fundación de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, cincuenta años desde aquel 17 de octubre de 1974, donde un grupo de soñadores, amantes de la música, emprendedores, tenaces, pero sobre todo amigos, decidieron que era necesario que Yecla contara con una institución que fomentara el conocimiento y disfrute de la Música.

Como ya todos sabrán, lo primero que hizo esta nueva Asociación fue poner en marcha una Escuela de Música, donde se fueran formando los jóvenes yeclanos que lo desearan, y donde en un principio impartían clases, de una forma totalmente altruista, varios músicos veteranos, y fue el germen para que años después su recién creada Banda de Música, dirigida por el maestro D. José Ortuño, participara por primera vez en un acto oficial, concretamente en la inauguración de la Feria de Septiembre de Yecla, el 24 de septiembre de 1976.

Concierto Banda AAMY, Feria de Yecla 1977.

Los pasodobles son un género musical que siempre ha estado muy unido a las bandas de música, siendo una parte importante de su repertorio, puesto que son las obras interpretadas en los pasacalles, toros, desfiles, dianas, etc… pero además, han formado parte de los programas preparados por sus directores para ser interpretados en conciertos, festivales, certámenes…

Como es normal, la Banda de Música de la AAMY, no es una excepción, y ha interpretado desde su creación multitud de pasodobles de todo tipo: de concierto, taurinos, festeros, dianeros…, y donde además se puede estudiar la evolución de la misma, puesto que la agrupación también lo ha hecho a lo largo de su historia. No son iguales las obras, incluidos los pasodobles, de la primera etapa donde la Banda estaba formada por no más de 30 ó 35 músicos, y una instrumentación muy simple, a los que se pueden interpretar actualmente con una formación integrada por cerca de 100 músicos, y una amplia y variada plantilla instrumental.

Conciertos Escolares Banda AAMY, año 1986.

Asimismo contamos con pasodobles que ya forman parte tanto del patrimonio musical como sentimental de nuestra Asociación: desde el que nos legó el maestro D. José Ortuño “SUMY” (Sociedad Unión Musical Yeclana), y al que ya hemos dedicado un artículo en esta sección; “Antonio Gonzálvez” compuesto por Manuel Carrascosa, y estrenado en el homenaje a D. José Ortuño en el año 1983; varios dedicados a nuestra entidad como “El Hospitalico” y “La Recogida” del yeclano Pedro Navarro Ruano o “Yakka” que fue dedicado por el murense José Rafael Pascual-Vilapana, con motivo de nuestra primera participación el Certamen Internacional de Valencia, el año 2007, y que ha sido interpretado por multitud de bandas de música, no solo en España, sino en los cinco continentes.

Solo centrándonos en los que han sido interpretados en conciertos, y por supuesto haciendo una pequeña selección, no podríamos nombrarlos todos, puesto que hemos realizado multitud de conciertos: escolares, extraordinarios, San Pedro, Santa Cecilia, Navidad, Festivales tanto en Yecla como en otras poblaciones, certámenes nacionales e internacionales, etc… De los primeros años recordamos: “Puenteareas” de Reveriano Soutullo, “Pepita Greus” de Pascual Pérez Chovi, “Antañona” y “Luchando” de Fernando Tormo Ibáñez, “Santander” de Ernesto Pérez Rosillo, “Barcelona” de Fausto Turell, “De Andalucía a Aragón” de Teixidor, “La Alegría de la Huerta” de Federico Chueca; y ya en tiempos más cercanos: “La Primitiva” de Jef Penders, “Certamen Levantino” de Pascual Marquina, “Suspiros de España” de Antonio Álvarez, “A mi madre” de Roque Baños, “El Tío Caniyitas” de Ricardo Dorado, ”Entornos” de Amando Blanquer, “Arte” de Juan Bautista Francés, “Los dos Adolfos” de Martín Domingo o “Música y vinos” y “Soñar el Mar” de Manuel Morales “

Concierto WMC Kerkrade 2017, Banda Sinfónica de la AAMY.

Hoy vamos a dedicar nuestra sección, tras esta amplia introducción, a “Luchando” de Fernando Tormo Ibáñez, que para mi tiene muchos y agradables recuerdos, porque era interpretado en los conciertos durante los años 1976 al 1983, bajo la batuta de nuestro añorado D. José Ortuño Ortuño, época en la que la banda no llegó a contar con más de 40 músicos, haciendo los ensayos en las antiguas dependencias de la torre del Reloj. Recuerdo que todo era muy familiar, muy cercano, los medios eran escasos, el frío se combatía en invierno gracias a una antigua estufa de leña, eran tiempos de pocos recursos pero mucha ilusión, y este pasodoble además de que siempre me ha parecido muy bonito y elegante, guarda para mí unos gratos recuerdos.

Partitura de “Luchando” pasodoble de Fernando Tormo Ibáñez.

Esta obra fue compuesta por Fernando Tormo Ibáñez, natural de Albaida (Valencia) con el título original de “Luchando por la vida”. El músico albaidense escribió esta obra durante una época difícil, muy triste, donde vivir el día a día era muy duro, características que se trasmiten en esta obra que contienen cierto carácter melancólico en la mayoría de sus melodías.

Al maestro Tormo le gustaba bautizar muchos de sus pasodobles como “pasodobles filosóficos” por la complejidad en su concepción, y puede que “Luchando”, compuesto en una época compleja en España, sea uno de los modelos de este tipo de música tan expresiva y majestuosa.

Fernando Tormo Ibáñez (Albaida 1882 – Tavernes de la Valldigna 1964).

Fernando Tormo Ibáñez, nace en Albaida (Valencia) en el año 1882. En dicha localidad inició los estudios musicales de la mano de su padre, que por aquellos años era el director de la Banda Nueva de Albaida, agrupación en la que ingresaría muy joven.

Posteriormente se trasladaría a Valencia para ampliar estudios con el maestro Palanca en el Conservatorio de Música.

Finalizados sus estudios dirigió una de las bandas de su localidad natal, pasando posteriormente a dirigir la Banda Primitiva de Liria, y con posterioridad las de Massanasa y Beniganin, regresando de nuevo a su ciudad para hacerse cargo de la Banda Municipal de Albaida, agrupación que con el tiempo se acabaría dividiendo en dos, y finalmente la Banda Municipal de Tavernes.

Entre sus obras, destacan los pasodobles: “Luchando”, “Sacul”,  “Antañona”, “Octubre en fiestas”, El artístico”, “Estival”, “Frontón de Mora”, “Ladi Vasile”, “Calomarde”, “Zeluán”, “Amor de un artista”, “Perfumes de Azahar”, “Unión Musical”, las marchas moras: “El moro nefando” y “Moro judío”, o la marcha de procesión: “Christus”.

Fallece en Tavernes de la Valldigna en 1964.

A continuación vamos a escuchar el pasodoble “Luchando” del maestro Fernando Tormo Ibáñez, que lo disfruten.

Autor: José Miguel Ibáñez Lax

Pd: Dedicado a mi compañero y amigo Vicente Ibáñez Martínez.


Bibliografía:

https://acordesfesteros.es/compositores/tormo-ibanez-fernando/, consulta en línea el 23 de febrero de 2024.

Diccionario de la Música Española e Iberoamericana. Volumen 10. ISBN 84-8048-313-X. Sociedad General de Autores de España 2022.pag. 369

Archivo Asociación de Amigos de la Música de Yecla.

Corría el año 1993 cuando, después de cruzar muchas cartas, se reúnen en Altea los responsables de las distintas Federaciones.

Definida en los Estatutos como:

Artículo 4º.-

La Confederación Española de Sociedades Musicales es una Entidad de ámbito estatal, que reúne a las Federaciones de las Comunidades Autónomas, regionales o provinciales, de carácter amateur. Tiene personalidad jurídica propia, gozando de plena capacidad para actuar, contratar y obligarse, de conformidad con la legislación vigente, para el desarrollo de las funciones y cumplimiento de sus fines.

Tiene el carácter de unión entre las federaciones independientes que la integran, y por su naturaleza cultural y prioritariamente musical, no persigue ningún fin lucrativo.”

10 junio, 2021 Escrito en diapason

 

 

 

 

 

 

Pero no fue en este año la primera vez que se hablaba de la creación de una organización nacional de sociedades musicales. Para concretar este hecho nos remontaremos a 1967.

Llíria el municipio escogido para celebrar los Festivales de España. Éstos estaban patrocinados por el Ministerio de Información y Turismo y la Unión Musical de Llíria fue la anfitriona y organizadora del programa de actos.

En este contexto, se estableció una ponencia el 10 de septiembre de 1967 bajo el nombre “Las bandas de música y sus problemas” con el objetivo de tratar las cuestiones que preocupaban a las sociedades musicales en aquel momento.

Una de las conclusiones fue:

“La creación de una Federación Nacional de Sociedades Musicales Amateurs”

De estas reuniones salió la decisión de formalizar la fundación de la Federación Regional Valenciana de Sociedades Musicales en 1968.

Sigamos, 25 años después se consumó la fundación de la Confederación Española de Sociedades Musicales (CESM).

En aquel 1993, durante los días 13 y 14 de noviembre, se reunieron el Presidente de la Federación Castellano Manchega, Don Alfonso Rodríguez; Presidente de la Federación Guipuzcoana, Don Juan Antonio Lecuona; Presidente de la Federación Balear, Don Josep Clement; Presidente de la Federación Catalana, Don Joaquín Urquizu; Presidente de la Federación Andaluza, Don Andrés Valero; Presidente de la Federación Gallega, Don Emilio Vázquez; Presidente de la Banda de Música de Teruel, Don José Martínez; Presidente de la Federación de Murcia, Don Isidoro Jesús Martínez; Presidente de la Federación de Asturias, Don José Antonio González y Presidente de la Federación de Valencia, Don Ángel Asunción.

“Tras varias reuniones maratonianas” según palabras que me confesó Ángel Asunción, se firmó el acta constitucional y redactaron los primeros Estatutos, con las siguientes Federaciones fundadoras:

De estas federaciones se disolvieron:

  • Federación de Bandas Civiles del Principado de Asturias
  • Federación Guipuzcoana de Bandas de Música/Guipuzkuako Banden Biltzarra

Con el paso del tiempo se formarían las Federaciones:

 

 

Los datos se acercan a los que pública el Ministerio de Cultura en su anuario 2019, donde dice que hay 1.485 bandas y que se reparten por comunidades de la siguiente manera:

Esto no quiere decir que todas las Federaciones están en la Confederación, ya que, aparte de las que se disolvieron, algunas la abandonaron, ya sea por motivos económicos, ya sea por otros motivos, aunque no se pierde la esperanza de que algún día estemos todos juntos otra vez.

En los primeros años de andadura de la Confederación, sus esfuerzos se centraron en dar a conocer la organización e intentar tener una línea de ayuda del Ministerio para poder cumplir con mayor facilidad sus fines, objetivo que se cumplió, con el paso de los años esa línea directa pasó a ser una ayuda del INAEM para realizar proyectos.

Y en una frase hecha que he adaptado: “Las Instituciones están por encima de las personas, pero son las personas las que dirigen las instituciones y con sus decisiones hacen que una institución sea buena o mala, esto que parece un trabalenguas, es la cruda realidad.”

Han habido muchos años que la Confederación se ha limitado hacer su Asamblea General, de 3 y 4 días, con sus respectivos Festivales de Bandas y hasta el año que siguiente, con las celebres y buenas frases de “se debería hacer”, “se habría que hacer”, “se tendría que hacer” y así pasaron demasiados años.

Recomendable la lectura del libro “XX Años de Historia” editado por la CESM, para entender de dónde venimos, si es que se quiere entender, claro.

Cuando una organización no ocupa el espacio que le corresponde, ese lugar es ocupado por otros y cuesta tiempo y recursos volver a recuperar el espacio perdido.

En el año 2016 me presenté a Presidente con un programa electoral concreto y con acciones concretas, como la reactivación de relaciones institucionales, crear un gabinete de comunicación, una web operativa, una base de datos nacional de Sociedades Musicales (SSMM), una mejora del marco normativo para SSMM, así hasta 14 puntos, en el primer año se habían cumplido 12 de ellos.

En el 2018 a raíz de una nota de prensa sobre la bajada del IVA a los instrumentos musicales, nos llevó a reunirnos con todos los grupos parlamentarios del Congreso de Diputados en Madrid y en 2020 que se apruebe en el Senado una Moción que Insta al Gobierno que revise el tramo de IVA aplicado a los instrumentos musicales. En el expediente presentado había una declaración institucional de una Diputación y el acuerdo de 10 ayuntamientos, que triste.

Pero la Confederación, ¿para qué sirve?

Para estar asociados y dar representación ante las instituciones estatales, donde se reivindica y pone en valor los tres apartados que más nos identifican al colectivo como son el educativo, el cultural y el social, porque en ocasiones, la respuesta que dan nuestros gobernantes a nuestras demandas es:

Insuficiente, Incorrecta, Injusta o lo que es peor, Inexistente

Frente a estas 4 I nosotros debemos ofrecer  Las 5 C.

  • La C de Confiabilidad: Desarrollo de la cultura del cumplimiento de nuestras obligaciones (pienso que solo quien cumple sus obligaciones está legitimado para exigir a los demás que cumplan las suyas).
  • La C de ser Creativos, explorando las escasas opciones que ofrece el actual marco normativo (Ej. declaración BIC, ley del Voluntariado, convenio colectivo, utilidad pública, ley de Propiedad Intelectual).
  • C de Comunicación: lo que no se comunica no se conoce.
  • La C de No Conformarse, reivindicando que el marco normativo mejore y reconozca nuestra aportación a la sociedad.

Y por encima de todas la C de CONVICCIÓN:

Debemos convencer a los nuestros, a nuestro entorno, al resto de la sociedad y a los políticos de la importancia de tratar como se merece lo que hacemos. Sin que se cree ese estado de opinión favorable no será fácil conseguir ni cambios normativos ni casi nada.

Las 4 I y las 5 C, son de mi amigo Luis Vidal, que se han convertido en una frase mantra de nuestras acciones.

De la 5 C, las que más hay que reforzar son No Conformarnos y estar Convencidos de lo que hacemos. Aquí dos ejemplos.

No Conformarnos

El año y pico de pandemia que estamos viviendo, ha desnudado por completo a muchas organizaciones y sistemas de gobierno, pero también ha puesto en valor otras.

Mientras duró el Estado de Alarma en 2020, solo había una voz, acertada o desacertada no es mi intención juzgarla, pero solo una voz y un solo interlocutor. Cuando empezó la desescalada, pasamos de una sola voz a 20, las 17 Comunidades Autónomas, las 2 Ciudades Autónomas y el Ministerio de turno, esto llevó a que cada Comunidad haya aplicado las mismas normas marcadas por el Ministerio, pero en diferentes tiempos y a diferentes colectivos.

Pero esto también ha ocurrido con las federaciones, donde cada una ha ido a su ritmo y a la voluntad de su Comunidad Autónoma.

Estar Convencidos.

Un ejemplo fue la solicitud que hizo la CESM al Ministerio de Sanidad para que se actualizara la Estrategia de vacunación frente a la covid-19 en España, con la inclusión de un subgrupo adicional (Grupo 6D) para los docentes y personal de las Escuelas de Música y Escuelas de Música y Danza dependientes de corporaciones locales o de entidades privadas sin ánimo de lucro y al mismo tiempo se instaba a las Federaciones que lo hicieran en su propia Comunidad.

Resultado, algunas lo habían hecho antes y no dijeron nada, otras lo hicieron como si fueran ellas las que lo pedian, otras nada y otras en su escrito ponían “como lo ha hecho la CESM al Ministerio”, juzguen ustedes mismos las diferencias de actuación.

La pandemia nos ha enseñado que juntos somos más fuertes y se pueden conseguir más cosas, si no siempre ganan los más famosos o los que más padrinos tienen.

Así y todo es una responsabilidad y un reto, si en los 5 primeros años de la Confederación se pudieron hacer muchas cosas, simplemente aplicando la frase de “Quien no conoce la historia está condenado a repetirla”, en mi presidencia ni chupipandi ni olvidar la historia, con unos pocos menos palos en las ruedas y estar más convencidos, se podrían conseguir los objetivos, ahora que cada cual analice sus acciones.

Si no estuviera la Confederación, se tendría que crear, pues como la tenemos, aprovechémosla.

Yo no me Conformo y estoy Convencido y ¿Tú?

Vicente Cerdá García
Presidente de la CESM

La vida sol donar-te moments crucials pel teu desenvolupament personal i professional dels quals no n’eres conscient fins que passa el temps. Potser eixa siga una essència vital que fa aturar-nos de vegades en coses banals i deixem passar allò realment important. O potser estic fent-me major, doncs d’ací uns dies farà vint-i-cinc anys que tinc vint-i-cinc anys, i la perspectiva amb la qual analitze tot el que m’envolta, ha canviat substancialment el seu calibre.

PROLEGÒMENS

Seria allà pels inicis de 1995 quan un dia em va parar al meu carrer de Muro un xicot que es va presentar com a Miguel Ángel i que estava interessat en parlar amb mi sobre la composició d’una marxa mora. En aquella època érem veïns de carrer, tot i que Miguel Ángel Alcaraz és alcoià. Em digué que anava a ostentar el càrrec d’Alfereç Moro per la Filà Realistes de les Festes de Moros i Cristians d’Alcoi de l’any següent. Un dia va vindre a casa els meus pares i al quarto del piano xarrarem força estona sobre el projecte. Mitjançant amics comuns, em deia conèixer algunes de les meues obres escrites per a la festa: els pasdobles Sara i El ti Salvador, les marxes mores Als Xaparros i Rafel Casaca, …Em va comentar tot el que tenia pensat per a la representació de l’alferecia, qui seria el dissenyador de tot el boato (José Moiña) i com li faria il·lusió que jo li escriguera la marxa que l’acompanyara per tancar l’Entrada Mora d’Alcoi del 22 d’abril de 1996. Aquella proposta em va omplir d’emoció doncs seria la primera vegada que anava a escriure una peça per a les Festes de Moros i Cristians d’un poble que no fóra el meu. A més a més, com a músic, coneixia ben be les festes alcoianes, i n’era conscient del caire d’auditori que és el carrer Sant Nicolau, l’atapeïda Plaça de la “Bandeja”, el carrer Sant Llorenç….

Passats uns dies Miguel Ángel em va portar uns dibuixos sobre el disseny de tot el seguici de l’entrada així com uns esborranys sobre la seua carrossa. A més, el protagonista de tota la desfilada seria el símbol de la Filà Realistes: un cavall articulat de més cinc metres d’alçada que aniria darrere del seguici.

LA MARXA MORA

Però si hi ha una cosa que em va marcar molt va ser, precisament, el viure com Miguel Ángel i la seua família, Mercedes, Denise i Uriel, així com amics i filà preparaven tot. Aquell viatge d’una sola vesprada, portava darrere tot un mon de nervis, preparatius, idees, complicitats, emocions, … em va fer veure amb claredat, que potser l’entrada era l’excusa: allò important era tot el procés per arribar-hi. El mite de l’Odissea d’Homer em va venir al cap i sabia que a la marxa havia d’haver un Ulisses melòdic i/o motívic que anara vivint tota l’experiència per arribar finalment a la Ítaca anhelada, com diu el poeta Kavafis: “… savi, com bé t’has fet, sabràs el que volen dir les Itaques”. Ja tenia la idea inicial per començar el treball i els nervis començaven amb pessigolles al cap i al cor. És una mena de sensació difícil d’explicar: el cor et demana escriure i la ment no està amb altra cosa que no siga cercar els materials. Ara calia buscar eixe Ulisses. I com moltes vegades ocorre, Ulisses em va trobar a mi.

Una vesprada, com tantes altres, estava donant classe de solfeig a la Unió Musical Contestana on hi estava treballant com a professor per aquells anys. Al moment de fer un dels dictats als alumnes des del vell piano de l’aula, dues tecles engroguides pel temps es varen enganxar la qual cosa provocà que sonaren a l’hora les tres primeres notes d’aquell dictat: DO, RE, SOL… Aquella sonoritat acordal sense la típica tercera sinó amb la quarta sospesa (sé que és una terminologia molt específica, però segur que ho entén molta gent) em va colpir l’atenció. Ja havia trobat la cèl·lula melòdica que hi cercava. L’atzar, com al llibre d’Homer, també havia entrat al joc de la marxa. El mateix procés de creació era un altre viatge a Ítaca particular: havia de deixar-me portar per tot el que em podia passar. A l’endemà començava l’escriptura de la marxa sobre una plantilla de banda impresa que comprava sempre que anava a Holanda per fer exercicis d’instrumentació. En ella vaig reservar un pentagrama per a les dolçaines, doncs a l’original de la plantilla aquestes no hi figuraven, clar. Segut al piano vaig repetir aquelles notes: DO, RE, SOL, … DO, RE… Tot s’obria, tot cobrava sentit. Les notes em suggerien melodia i em parlaven d’una consonància harmònica. Ara calia buscar la forma de l’obra. Tot i saber que les marxes mores, en general, solen presentar les estructures típiques de les marxes militars i pasdobles, basades en el minuet francès, havia estudiat a fons les diferències estructurals que presentaven obres com les de José Mª Ferrero, José Pérez Vilaplana, Paco Esteve i, especialment, Amando Blanquer. Cadascú planteja una estructura diferent a les seues marxes mores i jo m’havia remullat amb aquella llibertat creadora que portava al darrere un clar coneixement del que es feia. I amb la idea del viatge d’Homer, vaig pensar en quin era el recorregut de l’Entrada d’Alcoi per que hi estigués present a l’estructura: la marxa començaria amb el protagonista que des de dalt la seua carrossa a Sant Nicolauet, observa com va passant el seguici; després recorre un primer carrer llarg i estret (Sant Nicolau) en forma de dansa que va acumulant tensió amb la superposició de melodies i amb el contrapunt dels metalls. En acabar, un ostinato rítmic basat en la cèl·lula primària aniria creixent en tensió, doncs des de Sant Nicolau es divisa la Plaça de la Bandeja i el seu campanar va creixent en la perspectiva visual. De fons unes campanes toquen el motiu melòdic d’Ulisses…. Es prepara l’entrada a la Plaça i ens endinsem en ella amb un coral polifònic, el primer fort de la marxa, on els valors rítmics s’allarguen i les harmonies simbolitzen un cant del poble que rep al protagonista sota el so de les campanes festívoles. Aquest coral es repeteix, doncs l’entrada pega la volta a la plaça. Hi ha una mena de final al Cantó Pinyó, després del qual es torna a un altra dansa que recorre l’estret carrer Sant Llorenç. Quan aquest esdevé avinguda i s’obri, la música torna a emular un moment de tensió acumulada doncs el viatge està a punt de concloure. Els arbres del Parterre fan de caixa acústica a l’últim fort, on el protagonista de l’inici apareix majestuós tot envoltat d’elements que han sortit al mig de la partitura. Ulisses arriba a destí ric en experiències i ple de coneixences. Aquesta és la Ítaca festera, la que ens dona la força per iniciar el viatge any rere any.

Realment aquest plantejament em va motivar a escriure i, al viatge creatiu, anava descobrint coses noves. Hi havia temor, doncs pensava que allò no anava a agradar a ningú més que a mi. Però hi havia alguna cosa que no em permetia sortir-me de la ruta. Havia d’acabar el viatge. En octubre de 1995, quan la partitura estava acabada va vindre a ma casa l’Alfereç, Miguel Àngel. Li vaig explicar tot, em vaig seure al piano i vaig començar a tocar tot aquell seguit d’idees… Els seus ulls s’obrien com a plats i endevinava que no sabia molt be que estava escoltant. De sobte em diu: “I això amb la banda sonarà be...”. Jo li vaig dir que sí. Però la seua cara sols va canviar quan en l’entrada va escoltar el resultat final. Encara el recorde dalt la carrossa amb ulls remullats de veritat festera.

L’ENTRADA

El dia 22 d’abril de 1996 seria la Banda de l’Associació Unió Musical de Bocairent i La Xafigà, institucions de les quals n’era jo el director titular per aquella època, qui anirien acompanyant la carrossa de l’Alfereç tot fent l’estrena oficial de Cavall de Foc. La carrossa de la Favorita aniria acompanyada de la meua banda, la Unió Musical de Muro que va interpretar una segona marxa extreta de Cavall de Foc, la “Fanfarria per a la Favorita”. Fins i tot un ballet, el d’Ana Calvo, ballaria la meua primera marxa mora Als Xaparros interpretada per la Banda de “L’Avanç” d’El Campello. L’altra banda de la qual n’era director titular, l’A.A.M. “El Trabajo” de Xixona, acompanyaria l’esquadra especial a ritme de la bellíssima Moros del Rif, del meu mestre, Rafael Alcaraz Ramis. Diversos músics de La Xafigà, interpretarien danses i ritmes d’acompanyament al seguici, extrets de també del motiu principal de Cavall de Foc. Aquestes darreres peces foren utilitzades per escriure el Ballet de Cavall de Foc estrenat a l’Alferecia de la Filà Realistes d’Alcoi de l’any 2010. Diguem-ne que tot estava previst amb una mena de coherència sonora i vital, com una mena de lligam auditiu, per poder viure un moment únic i compartir-lo amb els que ens esperaven a peu de carrer i als balcons alcoians.

Aquell dilluns d’abril de fa, avui mateix, vint-i-cinc anys, estava ben nerviós doncs no volia trair la confiança que Miguel Àngel havia dipositat en mi. Tenia molts aliats: els músics de Bocairent, Xixona, i Muro que havien emprés aquell projecte de forma molt entusiasta. Des que començarem a interpretar Cavall de Foc a Sant Nicolauet, el públic que ens envoltava va començar a aplaudir, sobre tot quan enmig de la marxa començà a caure una pluja que, de forma intermitent i generosa, ens acompanyaria tota la desfilada. Quan anava cara al meu amic Peris (qui des d’on estiga, se’n recordarà avui d’aquella vesprada) i li deia: “Quina pena, no podia ploure un altre dia?”. Em contestava amb el seu somriure ple de felicitat i aprofitava per buidar l’aigua que s’acumulava a la campana de la tuba. No calia dir res més: hi estàvem gaudint i tot el demés, no importava. Em resulta molt difícil descriure tot allò però cada vegada que ressonen dins de mi les notes de Cavall de Foc rebotades sobre les belles façanes de les cases de Sant Nicolau, una tremolor em recorre el cos. Aquesta sensació no me la furtaran mai, és el bo que té ser músic i viure moments únics. Jo anava dirigint Cavall de Foc davant la banda i al fons del seguici veia volar les potes del Cavall Real tot presidint la perspectiva mentre la pluja mullava partitures i rostres. Recorde una imatge molt particular, quan una vegada havíem passat la Plaça de la Bandeja i encaràrem el Carrer Sant Llorenç, la meua cosina Pepi que estava a un balcó de l’Ajuntament (on ella treballa des de fa molts anys) encarava un telèfon a la banda i em llançava una besada a l’aire. A l’altra banda d’aquell fil telefònic, (ho vaig saber més tard), estava ma mare. “Tia, escolta al teu fill” diu que li va dir. La gent que presenciava la desfilada ens acaronava amb un entusiasme molt especial, els músics ens miràvem amb una emoció compartida. La catarsi estava naixent de forma natural i espontània, amb la llibertat que sols el conreu honest de l’art provoca. El cel ens regalava de quan en quan uns moments de respir davant la pluja primaveral que no va poder apagar el foc d’aquella vesprada ni d’aquell cavall…

 

 

PER LA MEMÒRIA

Passada aquella experiència, Cavall de Foc formaria part d’un projecte de gravació ben especial. Sols un any més tard, apareixia enregistrat per la Banda de l’A.A.M. “El Trabajo” de Xixona i “La Xafigà” de Muro en dos CD’s: el meu primer CD amb la banda xixonenca anomenat “Música i Festa” i el meu segon CD amb el grup murer que volgué titular-lo, precisament, “Cavall de Foc”.

 

L’any 2000, la Banda de la Unió Musical de Muro, dirigida per mi mateix, gravaria el meu primer disc monogràfic on s’inclouria Cavall de Foc. Aquest CD, fou reeditat i re masteritzat en 2015 amb el títol D’ANHELS.

Gravar una obra és deixar una petjada sonora d’un moment. Però després, cada vegada que escolte els CD’s, em venen a la memòria no tant les obres, sinó més be els moments viscuts als assajos i al propi enregistrament. Quantes experiències i quanta vida gaudida amb la vehemència de la joventut i amb el goig de l’amistat!

ANECDOTARI

La història d’aquesta marxa mora està plena d’anècdotes i curiositats de les quals voldria compartir-ne algunes ara que el temps me les fa avaluar de forma diferent. La primera d’elles ocorregué en la sala d’assajos de la UM de Muro. M’havien convidat a dirigir Cavall de Foc al Concert de Música Festera de 1996 a Muro. En un assaig previ, i mentre dirigia, va entrar a la sala el meu mestre Rafael Alcaraz Ramis, el compositor murer que havia estat el meu primer professor d’harmonia i composició. En aquell moment me’n vaig adonar que no li havia mostrat encara la partitura d’aquella marxa, costum que havia consolidat amb les meues obres anteriors. El mestre venia a assajar una de les seues obres que també s’interpretaven al concert. En acabar l’assaig vaig anar a saludar-lo. “Això és teu?”, em digué. Jo li vaig mostrar la partitura i passada una estona em digué: “A partir d’ara ja et puc considerar compositor”. Aquella frase em va caure com un gran regal, doncs l’admiració i el respecte que li tenia al mestre Alcaraz, feia de les seues opinions un regal de gran vàlua per a mi.

En 1999 vaig rebre una telefonada molt sorprenent. Quan conteste a un número que no coneixia, una veu em diu: “Bona tarda. Eres Pascual Vilaplana? Em diuen Maria del Mar Bonet i soc cantat…”. No m’ho podia creure, estava parlant amb una de les veus més importants de la cançó en català del segle XX. El motiu de la seua trucada era disculpar-se doncs havia posat de títol al seu últim CD, Cavall de Foc. I sols una vegada publicat, se’n havia donat de la coincidència amb la meua marxa i amb el CD de La Xafigà. Em va dir que havia estat tota una casualitat i que no coneixia el nostre treball abans. Jo li vaig agrair la trucada i amablement em va convidar a la presentació del seu CD (concert al qual no vaig poder anar i això ha fet que encara no haja tingut el plaer de coincidir amb ella).

Quan pense en aquella època en la qual escrivíem a ma les partitures, no puc deixar de recordar que cadascuna de les particel·les de la banda em podia costar quasi una hora de feina. Encara sento el caliu del tendur de casa els meus pares, en el qual em quedava quan toca casa se n’anava a dormir i jo aprofitava aquelles hores per copiar papers.

EPÍLEG

Cavall de Foc s’ha interpretat arreu la geografia espanyola i en diversos països europeus i americans per bandes tant professionals com amateurs. Una obra pensada per ser tocada al carrer, ha estat molt interpretada en diferents sales de concerts i en molts festivals de música. Al final, aquesta marxa, com moltes altres, pot esdevindre una al·legoria de l’autèntic significat de la Festa de Moros i Cristians com a manifestació que defineix la nostra cultura. I és que la Festa no és record de cap guerra, no parla de vencedors ni de vençuts. Per mi la Nostra Festa és generositat quan es comparteixen il·lusions i en fas partícips als que tens al voltant. Parlar de Festa és parlar de respecte per allò heretat i compromís per continuar-ho i deixar-ho com herència a les futures generacions. Festa és renovar emocions any rere any esperant allò que ja coneixes però que en cada edició festera cobra vida i sembla tot un món nou. Festa és l’aroma de les pastes damunt la taula del menjador esperant que vinguin forasters. Festa és emblanquinar les façanes per que venen dies grans. La Nostra Festa és recordar qui estava l’any passat i aquest any ja no hi és amb nosaltres. I tota aquest viatge sempre acompanyat amb música, el bagatge indissociable i eficaç per excel·lència.

Gràcies a Miguel Ángel Alcaraz, a la seua família, a la Filà Realistes d’Alcoi, als amics de Bocairent, Xixona i Muro per emprendre el viatge amb mi. Sense tots ells no hagués estat possible aquest Cavall de Foc. És més que evident que sóc un artista dependent, doncs depenc dels demés per fer el que faig. I em sento afortunat per que siga així. Avui, després de vint-i-cinc anys d’aquella vesprada d’un 22 d’abril a Alcoi, reivindico les paraules del poeta: “Penso que he tingut sort de poder obrir els meus ulls ací…”.

 

José R. Pascual-Vilaplana

Barcelona, 22 d’abril de 2021

Fuente: https://www.pascualvilaplana.com/

Artículo original

Fuente: blogs.laverdad.es, por José Miguel Ibáñez Lax

En primer lugar, quisiera presentarme. Tengo 50 y algunos años; soy administrativo; trabajo en la Escuela de Música de mi Asociación; estoy casado; tengo un niño de 12 años que estudia Tuba; soy músico aficionado en mi Banda de Música desde el año 1976, además de estar ligado a la Asociación de Amigos de la Música de Yecla desde el año 1974, prácticamente toda mi vida.

En el año 1988 tuve mi primer contacto con la Junta Directiva de dicha Asociación, de la que he sido miembro durante varios años. Y desde entonces hasta la actualidad, siempre he escuchado una pregunta muy curiosa ¿Para qué sirve ser socio de una Sociedad musical? Imagino que, en gran medida, esa duda generalizada de la población la hemos creado nosotros mismos al no saber transmitir con claridad para qué sirve apoyar como socio a estas asociaciones culturales.

Las Sociedades musicales son entidades privadas, compuestas por socios, que realizan una actividad cultural sin ánimo de lucro, y que han sido creadas básicamente para fomentar el conocimiento y disfrute de la música.

Los socios, al ingresar en las mismas, se comprometen a abonar una cuota, con la que se ayuda a cubrir en parte los gastos originados por el funcionamiento de la Asociación, y que a su vez son complementados con otros ingresos obtenidos por otros cauces: subvenciones de Organismos Públicos, convenios, actuaciones, conciertos, donativos, patrocinios, etc.

Es verdad que, en la actualidad, en la mayoría de las Asociaciones, la parte que aportan los socios no es la mayor aportación económica obtenida por la entidad, como sucedía en el pasado, aunque toda ayuda es bienvenida para poder sufragar los numerosos gastos que conllevan estas sociedades culturales; pero a veces es mucho más importante para el colectivo de personas que integran y trabajan por la misma, siempre de una forma totalmente altruista, el sentirse arropados por una masa social que los apoye y anime, haciéndoles sentir que su duro esfuerzo del día a día tiene un reconocimiento por parte de nuestros asociados.

No obstante, y volviendo a la pregunta del principio ¿para qué sirve ser socio de una Sociedad musical? Tras todos estos años de experiencia, y en mi humilde opinión, pienso que ser Socio sirve para:

Apoyar a una entidad cultural sin ánimo de lucro, dedicada a fomentar el amor por la música, y que en muchos lugares ha sido y es la única manera de poder acceder a este bello arte.

Ayudar al mantenimiento de sus Escuelas de Música, en las que se suelen matricular personas de cualquier edad, desde niños que inician aquí su formación, llegando muchos de ellos a dar el salto a un Conservatorio donde finalizan con un Título Profesional de Música, así como a personas que simplemente desean formarse de una forma amateur, como afición y disfrute de la misma.

Alentar a las Bandas de Música, y otras agrupaciones, surgidas en el seno de las Sociedades Musicales, colectivos donde un gran número de músicos/as de todas las edades, y esta es otra de las particularidades de estas formaciones, puesto que se funden en ellas varias generaciones que trabajan unidas por un mismo objetivo.

Respaldar las actividades de dichas Bandas, acompañándoles y animándoles, sobre todo cuando participan en algún Festival o Certamen, a nivel Regional, Nacional e incluso Internacional, ejerciendo como grandes Embajadoras de cada uno de nuestros pueblos, Región y País.

Ayudar en la adquisición de instrumentos, trajes, partituras, material, etc.

Asimismo con su contribución, se pueden realizar muchas más actividades culturales: Ciclos de Conciertos, Cursos de Formación y Perfeccionamiento, Conferencias, Edición de libros, Partituras, Grabación de discos compactos, etc.

En definitiva, ser socio de una Sociedad Musical es algo más que pagar una cuota sin saber muchas veces por qué; es sentirse orgulloso de que con ello se apoya la cultura musical de un pueblo, consiguiendo que, a través de sus escuelas, niños, jóvenes y adultos reciban una formación adecuada que a muchos de ellos, con el tiempo, les suele incluso proporcionar una salida profesional; es estar junto a los miembros de la Banda de Música, para que nuestros músicos/as sientan nuestro ánimo cada vez que participan en un desfile, concierto, Festival, Certamen…; es ayudar al desarrollo de todas las actividades enfocadas hacia la Sociedad que, como ya apunté antes, en pequeñas poblaciones muchas veces son las únicas que se realizan; y sobre todo es apoyar a este colectivo de personas, de cualquier condición, sexo y edad, a seguir FOMENTANDO LA MÚSICA EN NUESTRA REGIÓN.