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Textos de Miguel Delibes, en el centenario de su nacimiento, y música de capilla conviven en esta novedosa propuesta que se emite este Miércoles Santo desde la Iglesia de Santiago, en Valladolid.

Néstor Prieto, clarinete, Noel Prieto, clarinete, e Irene Sanz, fagot

Las restricciones tampoco serán este año un impedimento para que la Banda Sinfónica de Arroyo participe de las celebraciones de Semana Santa de la capital vallisoletana. 31 de marzo, fecha en la que la BSA habría comenzado las procesiones que realiza habitualmente, se estrena “SILENCIO. Elogio a la Semana Santa de Valladolid”. La propuesta mezcla textos de Miguel Delibes, con motivo del centenario del nacimiento del autor vallisoletano, y música a través del conocido ciclo de piezas para grupo de cámara Saetas del silencio, compuesto en el siglo XVIII por Francisco de Paula Solís. La narración correrá a cargo de Luis Amo, responsable del espacio informativo “El llamador” de Onda Cero, y la música la pondrán Néstor Prieto, clarinete, Noel Prieto, clarinete, e Irene Sanz, fagot, integrantes de la BSA. La parte visual mezclará conocidos enclaves exteriores de la ciudad, como la Plaza Mayor o el Campo Grande —estrechamente unido a la figura del escritor vallisoletano— con la penumbra de la céntrica Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol, que acogerá vacía a los músicos que interpretarán el ciclo de piezas.

El estreno se podrá seguir desde las redes sociales

El audiovisual, que se estrenará el próximo Miércoles Santo, 31 de marzo, en el canal oficial de YouTube de la formación, “Es un homenaje a diversos aspectos estrechamente relacionados con la Pasión vallisoletana, y se estructura a través de diferentes movimientos que van centrando su atención en los mismos, de modo que los textos de Delibes ejercen como interludios que van dando forma a un discurso que repasa lo más destacado de la Semana Santa”, comenta Pablo Nicolás, quien se ha encargado de seleccionar los textos del escritor; “además, se ha usado el ciclo Saetas del silencio puesto que, a pesar de estar compuesto para una hermandad sevillana, guarda una estrecha relación con varias citas procesionales de la Semana Santa de Valladolid, como el Vía Crucis Procesional que realiza precisamente el Miércoles Santo la Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno”.

A las piezas, preparadas por su director, Diego Cebrián, se suma la voz de Luis Amo, encargado aquí de poner voz a los textos de Miguel Delibes, y que ha colaborado con la formación en otras importantes citas como la presentación del disco de marchas Processionare. Todo ello se ve respaldado por imágenes inéditas que “tratan de plasmar el nuevo tiempo que nos está tocando vivir, en el que no caben todavía actos multitudinarios, pero que nos permite ver la realidad de otro modo. Hemos intentado mostrar la ciudad desde un punto de vista poético que creemos que va a gustar”, según menciona Héctor Varela, encargado de la parte visual.

A pesar de las dificultades que supone para esta formación carecer de la programación estable que llevaba a cabo de forma habitual, un aspecto que se ha agravado a tenor del escaso apoyo institucional con el que están contando este tipo de agrupaciones, la BSA responde así a su cita anual con estas fechas, que llevan cada año a la banda a participar de la Semana Santa con cofradías como la Hermandad Universitaria del Santísimo Cristo de la Luz o la Cofradía de las Siete Palabras de Valladolid, de la que además fueron nombrados Miembro de Honor en el año 2017. La propuesta que presentan en este año se suma así a toda una serie de iniciativas que pusieron en marcha durante la Semana Santa del año pasado bajo el nombre #SemanaSantaBSA, con gran aceptación.

Próximos compromisos

No obstante, la formación tiene previsto retomar los conciertos presenciales lo antes posible, y ha vuelto a ensayar en las últimas semanas —aunque con numerosas restricciones— para preparar diversos compromisos y estrenos que previsiblemente tendrán lugar en los próximos meses. La formación arroyana es una de las últimas bandas de nuestro entorno en retomar la actividad presencial, en pequeños grupos y atendiendo a los protocolos sanitarios vigentes. Por otro lado, la BSA sigue adaptándose así a los nuevos formatos, al apostar de nuevo por las redes sociales para continuar acercando la música a todos los vecinos de dentro y fuera de Arroyo de la Encomienda. Como atestigua el gran incremento de seguidores que han experimentado los canales de comunicación de la formación en los últimos meses, sus perfiles son considerados ya como una referencia dentro de su ámbito, y en ellos han llevado a cabo durante el último año diversas iniciativas relacionadas con la solidaridad, música en los balcones, versiones de piezas conocidas desde casa, estrenos de obras inéditas, o un ciclo con motivo del Día Internacional de la Mujer.

La nueva imagen corporativa de la formación está inspirada en el vanguardista alzado de su nueva sede, la Casa de la Música y el Teatro

Arroyo, 21 de junio de 2020

Dinamismo, elegancia e innovación son algunas de las claves que han guiado el largo proceso de creación de una nueva imagen que ve hoy la luz. Tras meses de trabajo y casi veinte años sobre los escenarios, la BSA se reinventa aunando pasado, presente y futuro en una novedosa imagen corporativa perfectamente reconocible y pionera en su ámbito.

El nuevo logotipo, pensado para su desarrollo en formato digital, está compuesto por el nombre de la formación bajo un novedoso acrónimo que ejerce como protagonista de un conjunto cuyo objetivo es transmitir dinamismo y energía.

La limpieza y sobriedad presentes en el diseño y en los tres colores empleados propicia un estilizado y moderno resultado que bebe directamente del vanguardista alzado que caracteriza a la Casa de la Música y el Teatro, nueva sede de la formación. Además, para su implementación en soportes tan diversos como programas de mano, catálogos, cartelería, redes sociales o en formato electrónico, la banda ha querido contar con las #impresiones de más de un centenar de músicos que han pasado por la misma desde los inicios de su andadura.

La Banda Sinfónica de Arroyo da así el paso más importante de un largo proceso de renovación en el que se enmarcan otras acciones como la supresión de los programas de mano en formato físico durante sus conciertos —en los que se facilitará un código QR para consultar el mismo, como la propia formación expuso el pasado 22 de abril, Día Mundial de la Tierra— o el uso de botellas de aluminio personalizadas por parte de todos los músicos, con el objetivo de eliminar el uso de plástico en sus actuaciones.

Una nueva imagen que podrá verse ya en varias de las iniciativas que la formación ha puesto en marcha para los próximos meses, entre las que destacan “Estival”, la primera edición de un festival digital a través del que la banda hará llegar obras de forma semanal a todo el público interesado, directos desde los propios ensayos, o un nuevo proyecto que comprende entrevistas que acercarán la realidad de la sinfónica al público: entrevistas a grandes músicos salidos de la formación, directores invitados, integrantes, compositores, etc.

La Banda Sinfónica de Arroyo pone así también punto y final a un confinamiento que les ha permitido realizar un gran número de actividades que comprenden desde actuaciones en casa hasta la implementación de podcasts, además de iniciativas solidarias que han mostrado el lado más humano de sus músicos. Tras hacer uso de vídeos explicativos y de otras acciones para seguir ensayando online, la sinfónica arroyana volverá a la presencialidad en los próximos días cumpliendo los protocolos y para preparar sus próximos compromisos.

Tras el aplazamiento de los festivales de Benavente y Cullera, dos importantes citas a nivel nacional e internacional en las que la banda tenía previsto participar en los meses de julio y agosto, la formación se prepara para afrontar un año con importantes citas.

A compromisos como los anteriormente citados se suman otras fechas señaladas como el coincierto inaugural de la Casa de la Música y el Teatro, nueva sede de la formación. El moderno edificio, muy próximo a Valladolid y cuyas obras están próximas a la finalización en el entorno del Pisuerga a la altura del municipio, cuenta con escuela de música, salas de ensayo, así como con un moderno auditorio que será la nueva sede de la formación.