La música tiene efectos directos sobre nuestro estado anímico. Entre ellos, destaca su capacidad de aportarnos calma, ya que reduce nuestros niveles de cortisol, la hormona relacionada con el estrés y la ansiedad.
Mitiga el dolor.
La capacidad de la música de reducir el dolor crónico que provocan dolencias es un hecho demostrado. De acuerdo con estos estudios, la música ayuda a liberar endorfinas, que actúan como analgésicos naturales y que contribuyen a paliar el dolor. Asimismo, las melodías lentas enlentecen la frecuencia cardíaca y respiratoria, lo que atenúa la sensación de angustia.
Combate las cefaleas.
Ayuda a luchar contra los dolores de cabeza, atenuando su duración, frecuencia e intensidad. El motivo es que algunas canciones incrementan la presencia de ciertos neurotransmisores en el cerebro, como la dopamina, lo que es ideal para disminuir el dolor.
Reduce la presión arterial.
Oír música relajante mínimo media hora diaria provoca que nuestra presión arterial se reduzca, lo que contribuye a mejorar la circulación sanguínea y la salud cardíaca. Por otro lado, los efectos beneficiosos sobre la respiración también favorecen el sistema cardiovascular.
Incrementa el rendimiento intelectual y estimula el cerebro.
Diversos estudios médicos aseguran que escuchar música o tocar un instrumento provoca que se activen áreas del cerebro que ayudan a mejorar el aprendizaje y la memoria. Además, también nos hace más creativos.
Es eficaz para luchar contra la depresión.
Aumenta nuestra autoestima y autoconfianza, disminuye la sensación de fatiga y nos ayuda a sentirnos más activos.
Mejora la coordinación y el rendimiento deportivo.
Favorece el sueño.
Escuchar música relajante ayuda a conciliar el sueño y conseguir un descanso reparador, gracias a sus propiedades relajantes.
Aun así, se sigue entendiendo la música como si fuera un mero ornamento, cuando debería ser una asignatura troncal dentro del Sistema Educativo y un estilo de vida saludable.
En su momento José Ignacio Wert (ministro de educación del gobierno de Mariano Rajoy) aseguró que distraían al alumnado del conocimiento importante. Según plantea la nueva ley LOMLOE, parece que va a recuperar parte de la importancia con la que contaba anteriormente.
Como docente me preocupa que desde la administración no se proteja lo suficiente esta asignatura, que en muchas ocasiones ha sido minusvalorada.
Desde hace ya varios años soy socia colaboradora de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla. Me parece que realizan una labor extraordinaria. También quería felicitar al Ayuntamiento de Yecla por su apoyo, aunque me gustaría que promoviera más actuaciones culturales en el teatro, auditorio o Feria del Mueble, etc.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/8303-Revista-Diapason-La-musica-estilo-de-vida.jpeg7341024Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-19 20:23:142022-05-19 20:24:28La Música como estilo de vida
La Asociación de Amigos de la Música de Yecla informa, que el próximo viernes 20 de mayo, en el Auditorio Municipal “Juan Miguel Benedito Rodríguez”, dentro del marco del Festival Internacional de Música de Cámara de Yecla, tendrá lugar un concierto de guitarra a cargo de Ana María Iordache en el que se estrenará la obra Canción Primera del compositor y guitarrista yeclano, Diego Corraliza.
Yecla, 18 de mayo de 2022
Esta obra fue galardonada con el primer premio de composición en el Certamen Internacional Miquel Llobet de Barcelona. Posteriormente, se creó el Premio Especial Canción Primera Ciudad de Yecla en dicho certamen, que se entregaría al guitarrista que mejor interpretase la obra de Diego.
La guitarrista rumana afincada en Tucson (Arizona), ganadora de este premio especial, será la encargada del estreno de esta pieza que ha integrado dentro de un programa muy variado.
Diego Corraliza, profesor de nuestra Escuela de Música, nos cuenta que “se siente muy emocionado, no solo por el reconocimiento recibido en Barcelona, sino también porque gracias a este hecho, se ha puesto el nombre de Yecla a un premio que viajará hasta EEUU”.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2019/10/DIEGO-CORRALIZA-PREMIO-540X225.jpg225540Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-18 19:14:352022-05-18 19:14:51"Canción Primera" de Diego Corraliza. Premio Especial Ciudad de Yecla
El día 6 de julio de 2020, el Pleno ordinario del Ayuntamiento de Yecla aprobó, por unanimidad de todos los miembros de los Grupos Municipales, la entrega de la Medalla de Oro de la Ciudad de Yecla a la Asociación de Amigos de la Música de Yecla
La resolución del expediente de la concesión de la Medalla de Oro, aprobado en Pleno ordinario el 1 de abril de 2019, recibió un total de 450 adhesiones, tanto de nuestra localidad como de fuera de la misma, incluso algunas de fuera de nuestro país, de asociaciones y entidades del ámbito de la cultura, deportes, social, festiva, sindical, educativa, así como a título individual de numerosos profesionales relacionados con el mundo de la cultura y especialmente de la música, y de ciudadanos que han querido mostrar su apoyo a la iniciativa.
La entrega oficial de esta distinción a la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, se realizará el próximo sábado 25 de junio, en un acto que se efectuará en la Plaza de Toros de Yecla, en horario por confirmar y que consistirá, además del acto institucional de la Entrega de la Medalla de Oro, en un concierto a cargo de los alumnos/as de Coro de la Escuela de Música y la Banda Sinfónica de la AAMY.
La Asociación de Amigos de la Música comenzó su andadura en 1974 con el entusiasmo de su primer presidente y la colaboración de un pequeño grupo de músicos y amigos, con la finalidad de fomentar el conocimiento de la Música en nuestra ciudad. Desde su fundación esta sociedad ha sido presidida por D. Luis Chirlaque Milla, D. Romualdo Manuel García Pérez, D. José Marco Ortega, D. José Saurín Gil, Dña. Efigenia Sánchez Ibáñez, D. Amadeo García Pérez y D. Francisco Muñoz Castaño.
La Asociación Amigos de la Música creó su propia Escuela de Música en 1974. En el curso escolar 95-96 se fusiona con la Escuela Municipal de Música pasando a gestionar la nueva escuela la Asociación de Amigos de la Música y patrocinarla el Excmo. Ayuntamiento de Yecla. A partir de 1995, la Escuela de Música experimentó un desarrollo espectacular: actualmente, cuenta con una treintena de docentes y a ella asisten una media de más de 700 alumnos anuales matriculados en más de veinte asignaturas. En sus aulas se han formado musicalmente varios miles de yeclanos a lo largo de sus más de 40 años de existencia.
Como resultado del trabajo realizado en la Escuela, la Banda de Música, hizo su presentación oficial en el mes de septiembre de 1976, durante el acto de inauguración oficial de la Feria de Yecla, bajo la batuta del maestro Ortuño. Desde su fundación, han dirigido la Banda: D. José Ortuño, D. Jesús Rodríguez Azorín, D. Francisco Rodríguez Azorín, D. Pedro Francisco Rubio Olivares, D. José Miguel Azorín Marco, y desde julio de 1996, está al frente D. Ángel Hernández Azorín.
Actualmente la Banda de Música está compuesta por un centenar de músicos de forma totalmente altruista, formados en la gran mayoría en la Escuela de Música.
Además de numerosos premios obtenidos a lo largo de su historia, en el año 2017 obtenían la Medalla de Oro, Mención de Honor y Timbal de Oro en el World Music Contest (WMC) Kerkrade 2017 (Holanda). Se proclamaban campeones del mundo en la segunda sección y terceros en el ranking general y mejor banda española del WMC Kerkrade 2017.
La Asociación Amigos de la Música de Yecla, aparte del mantenimiento de la Escuela y su Banda Titular, realiza diferentes actividades destinadas a la divulgación y promoción de la música, entre las que destacan: conciertos didácticos en la ciudad, actos en honor a Santa Cecilia, la colección “Aires de Yecla”, la programación anual del Ciclo Aula de Conciertos, la Revista Diapasón y programas de divulgación en distintos medios de comunicación.
El día 4 de diciembre de 2021 fue declarada de Utilidad Pública por Orden del Ministerio del Interior.
Por dicho motivo el próximo día 25 de junio será un gran día para todo el colectivo que formamos la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, y del que queremos hacer partícipes a todos los ciudadanos, a los que agradecemos de antemano su apoyo.
Para nosotros es un honor recibir la máxima distinción de la ciudad de Yecla, algo que sin duda nos anima todavía más a seguir trabajando por y para nuestra localidad en el ámbito de formación y educación musical, promoción y difusión de eventos musicales, y continuar promocionado fuera de nuestra ciudad a través de nuestra banda de música el nombre de Yecla.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/403-2022-AAMY-MEDALLA-DE-ORO.jpg225540Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-17 18:13:262022-05-17 18:13:44El Próximo sábado 25 de junio la Asociación de Amigos de la Música de Yecla recibirá la Medalla de Oro de la Ciudad de Yecla
El próximo sábado 21 de mayo de 2022, se podrá asistir al octavo de los conciertos programados este año en la XX edición del Ciclo “Aula de Conciertos”, organizada por la Escuela de Música de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla y la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de nuestra ciudad
Yecla, 16 de mayo de 2022
Esta vigésima edición cuenta con la colaboración de Dúo-Graph, Familia Castaño, Dígicol, Iberpiano, Juan Palao Peña, Autobuses Pelotón, Daemon 4, YeclaGrafic, Davó, Frutas y verduras Hermanos Juan Ortuño, Suministros Lomar, Spumaytel, Xti y Audiotec, y como en otras ediciones anteriores también cuenta con el apoyo de los medios de comunicación locales: Onda Regional de Murcia, elperiodicodeyecla.com, TeleYecla, Onda Cero Yecla, Cope Yecla, Siete Días Yecla y Ser Arco Norte.
Este nuevo concierto del Ciclo se llevará a cabo en la Sala de Audiciones de la Escuela de Música a las 19:30 h., con aforo limitado para 80 personas y previa reserva de sillas contactando con la Escuela de Música. Consistirá en un recital interpretado por dos jóvenes músicos yeclanos, y miembros de la Bandas Sinfónica de la AAMY, José Manuel Atienza, saxofón, acompañado al piano por Pilar Sánchez y David Soriano, flauta, con el acompañamiento al piano de María Francisca Sáez.
El mismo será emitido en directo a través del Canal YouTube de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
Comienza sus estudios musicales a la edad de 8 años en la Escuela de Música de la AAMY situada por entonces en el edificio del Hospitalico, con el profesor Ángel Hernández Azorín, más tarde, con el cambio de edificio al Casino Primitivo, pasa a dar clase de saxofón con el profesor Francisco Soriano Guillén, con quién finalizó los estudios elementales de música.
En el año 2016 entra a formar parte de la Banda Titular de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
Realiza las pruebas de acceso a 2º curso en el Conservatorio profesional de Villena, donde continúa su formación con el profesor Rafael Martínez Esteve, con quien actualmente estudia 6º curso de enseñanzas profesionales.
Ha tenido la oportunidad de tocar como solista en el concierto de Año Nuevo de 2019 celebrado en el Teatro Chapí de Villena con la orquesta del mismo.
Ha realizado numerosas masterclass con distintos saxofonistas de renombre nacional e internacional, tales como Tomás Jerez Munera, Antonio Felipe Belijar, David Pons Grau, David Alonso, Mariano García y Arno Borkamp, entre otros. Destacar que este próximo mes de julio, tendrá la oportunidad de dar clase con el reconocido saxofonista internacional Simon Diriq. Actualmente se encuentra preparando las pruebas de acceso al Grado Superior.
David Soriano, flauta:
Nacido en Yecla en 1998, David Soriano comienza sus estudios musicales a la edad de 8 años en la escuela de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
A pesar de que comenzó estudiando bombardino, rápidamente se sintió atraído por la flauta travesera, y a los 9 años comenzó a estudiar dicho instrumento bajo la tutela de su profesor Pedro Ángel López Sánchez.
A día de hoy, David se encuentra finalizando el sexto curso de Enseñanzas Profesionales Musicales en la especialidad de flauta travesera en el Conservatorio “Julián Santos” de Jumilla, centro donde también realiza el cuarto curso de la especialidad de piano.
Desde 2014 forma parte de la Banda de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
Para poder realizar estos conciertos vamos a seguir todas las pautas que nos indican las autoridades sanitarias:
1º. Aforo limitado a 80 personas.
2º. Reserva de localidad con cita previa.
3º. Itinerario diferente de entrada y de salida.
4º. Se dispondrá de material de higiene y protección tanto a la entrada del edificio como en la propia Sala de Audiciones.
5º. Uso recomendado de mascarilla durante toda la estancia en las instalaciones de la Escuela de Música, incluido en dicha sala durante el desarrollo del concierto.
Debido a la limitación de 80 personas de la ocupación de la sala, que como ya hemos dicho, estará sujeta a las indicaciones de las autoridades sanitarias, se deberá de reservar, hasta completar el aforo, en la Conserjería de la Escuela de Música, llamando al teléfono 968752485 o a través del correo: administracion@amigosmusica.com; en horario de lunes a viernes de 16:30 a 20:30 h. el día del concierto, si quedan sillas libres, se asignarán por riguroso orden de llegada hasta completar la capacidad permitida.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/401-2022-Aula-Conciertos-AAMY-CARTEL-05_21.jpg19201357Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-16 20:42:512022-05-16 20:43:05XX Ciclo “Aula de Conciertos” José Manuel Atienza, saxofón y Pilar Sánchez, pianista acompañante. David Soriano, flauta y María Francisca Sáez, pianista acompañante
Dentro de los diversos estilos de pasodobles, hay uno muy especial, los Pasodobles-Himnos, composiciones musicales dedicadas a algún colectivo social, religioso, lúdico, festivo, deportivo, etc.
La palabra himno, tiene diversas definiciones dentro del Diccionario de la RAE, de las que nosotros nos vamos a quedar con la siguiente:
Composición musical emblemática de una colectividad, que la identifica y que une entre sí a quienes la interpretan.
Asimismo en su primigenia, un Himno es un canto o un texto lírico que expresa sentimientos positivos, de alegría y de celebración. En la antigüedad era una composición coral dedicada a una divinidad, y que fue retomada durante la Edad Media con pleno valor litúrgico en la literatura latina cristiana, como por ejemplo con el “Pange lingua” de Tomás de Aquino para la conmemoración del Corpus Cristhie.
Puede estar dedicado a dioses, un santo, un héroe o a una persona célebre, también puede estar destinado a celebrar una victoria u otro suceso memorable o a expresar júbilo o entusiasmo, aunque en este caso estaría mejor llamarlo oda.
Igualmente puede ser una composición musical que identifica a una colectividad, una región, un pueblo o una nación y que une a quienes la interpretan (como hemos dicho según la RAE), y a estos últimos pertenece la obra de la que vamos a hablar hoy.
Los Labradores es el Himno de la Federación de Peñas de San Isidro de Yecla, entidad encargada de la organización de las tradicionales y populares fiestas que durante el mes de mayo se celebran en la ciudad de Yecla, en honor de San Isidro Labrador.
Este pasodoble-himno está compuesto por el músico yeclano Pedro Navarro Ruano y tiene letra escrita por Inmaculada Navarro Ruano.
Portada “Los Labradores” Pasodoble Himno de la Federación de Peñas de San Isidro de Yecla.
La devoción en Yecla por San Isidro Labrador, patrón de los agricultores, se remonta a los inicios del siglo XIX, cuanto entre los años 1816 y 1818 se constituyó la Real Empresa de Iluminación de Aguas de San Isidro, empresa fundada con el objetivo del alumbramiento de aguas en las inmediaciones del paraje del Cerrico de la Fuente, y que poco después fructificarían al conseguir alumbrar el nacimiento de un importante caudal, siendo el éxito de esta empresa el motivo para que se iniciase a celebrar el culto a San Isidro en Yecla, encargándose una imagen que fue puesta al culto en una capilla de la Ermita de Santa Bárbara. A partir de esta fecha se empezó a celebrar la onomástica del Santo, con hogueras la tarde noche de la víspera el 14 de mayo, a las puertas de la Ermita de Santa Bárbara, donde se disparaban cohetes y tracas y repicaban las campanas y el día 15 de mayo, procesión por la mañana seguida de una Misa Solemne.
En el año 1941 se fundaron en nuestro país las “Hermandades Sindicales de Labradores y Ganaderos” las cuales se constituyeron bajo el patronazgo del santo madrileño, siendo las promotoras de las Fiestas en honor de San Isidro en toda España, entre ellas la de Yecla; Junto al Arcipreste Esteban Díaz, la Sección Femenina y las gentes del campo. En el año 1943, la Hermandad tomó el acuerdo de adquirir una talla de San Isidro al escultor alcoyano Miguel Torregrosa Alonso. La imagen llegó a Yecla el día 14 de mayo de 1945, celebrándose al día siguiente, 15 de mayo, la primera procesión en su honor y que sería el origen de las actuales Fiestas de San Isidro en Yecla.
Hasta 1948, los festejos eran fundamentalmente de carácter religioso. A partir de 1949 se empiezan a incluir otros actos como el desfile, la ofrenda y una exhibición de folclore local. En 1950 se incorporan carros engalanados, origen de las actuales carrozas, aunque la técnica de los “papelicos” aún tardaría otro año en llegar. Las Fiestas de San Isidro vivieron durante la década de los años 50 un periodo de gran consolidación y esplendor.
A partir de 1952 comenzó a realizarse la conocida como Batalla de Flores y el Concurso de carrozas. Durante la misma eran arrojadas desde las carrozas y balcones de las casas gran cantidad de flores, dulces, confetis y serpentinas y se estableció la primera entrega de premios a los mejores vehículos y animales engalanados, así como a los labradores y labradoras ataviados con el traje típico local. A partir de entonces han aumentado los premios, donados tanto por organismos oficiales como por empresas particulares. Los temas de las carrozas antiguamente iban relacionados con el campo y los títulos eran críticas en forma de verso. Hoy en día el tema ha variado, en la categoría de adulta son temas relacionados con el campo, Yecla y costumbres populares; mientras que en la categoría infantil, son más temas de fantasía.
Actualmente la Federación de Peñas está formada por más de 50 peñas federadas, lo que supone un total de más de 2000 peñeros/as que hacen que durante los días de fiesta la ciudad de Yecla sea un bullicio de color, música y alegría. La Federación organiza, junto con la Concejalía de Festejos una gran cantidad de actos, centrados en los dos fines de semanas más cercanos al día 15 de mayo.
El 14 de mayo de 2021, las Fiestas de San Isidro Labrador de Yecla, obtuvieron por parte de la Secretaría de Estado de Turismo la declaración de Interés Turístico Nacional, en reconocimiento a los valores culturales y de larga tradición cultural que representan. “La elaboración artesanal por parte de las peñas de las más de 60 carrozas que suelen participar en la Gran Cabalgata, representando aspectos relacionados con la labranza, convierten estas fiestas en unas celebraciones repletas de originalidad y de atractivo turístico para todos los visitantes que acuden a Yecla en esas fechas”.
Pedro Navarro Ruano:
Nace en Yecla (Murcia) en 1974. Comienza sus estudios musicales en la Escuela de música de la Asociación de Amigos de la Música de su ciudad natal. Continúa sus estudios en el Conservatorio Profesional de Música de Villena en la especialidad de trombón, en el que obtiene el Título de Profesor en 1998, perfeccionando sus estudios en dicha especialidad con los profesores Raúl García, Mario Calvo Ponce, Indalecio Bonet y Baltasar Perelló. Realiza cursos de dirección de Banda con José R. Pascual Vilaplana, Ricardo Correa y Jan Cober.
En su faceta como compositor ha estudiado con profesores como Ramón Ramos, César Cano, Andrés Valero y Emilio Calandín, Francisco Tamarit, Gregorio Jiménez entre otros, con los que obtiene en 2006 el Título Superior de Composición en el Conservatorio Superior “Joaquín Rodrigo” de Valencia. Asiste a los cursos de Análisis Musical que Organiza el Festival de Música de Granada con los profesores Ivan Nommick, Francesc Cortés, Benet Casablanca, así como otros cursos impartidos por el compositor Sergio Blardony, Tomás Gilabert o la compositora y pedagoga húngara Katalin Szekely. Tiene en su haber distintas composiciones para banda, grupos de cámara, coro, así como obras electroacústicas. Su música ha sido interpretada tanto en nuestro país, como en otros países, Italia, Reino Unido, China, Japón, Corea del Norte, E.E.U.U.
Pedro Navarro Ruano.
En su labor como director de Coro, ha realizado cursos y seminarios con los directores Javier Busto, Albert Alcaraz, Esteban Sanz Vélez, Alonso Gómez Gallego, Marco Antonio García de Paz, Basilio Astulez, Julio Domínguez, César Alejandro Carillo, Tamara Brooks, Vytautas Miskinis, Rupert Damerell y Peter Phillips. Perfecciona su técnica vocal con los profesores José Ramírez, Carmen Lorenzo, Ricardo Castelló y Vincenzo Scarafile.
A lo largo de su carrera ha dirigido la Banda Juvenil de la Escuela de Música y el Coro Polifónico “La Purísima” de la A.A.M. de Yecla. En enero de 2008 se hace cargo de la dirección del Coro de la Unión Musical de Almansa (Albacete) y en 2009 del coro Voces de Hécula de Yecla (Murcia).
En julio de 2009 colabora con miembros de la Deustche Oper Berlin y su director de coro William Spaulding en la realización de la Ópera “La Flauta Mágica” en el I Festival Internacional de Música de Almansa.
En noviembre de este mismo año consigue el 1º Premio junto a la Coral Unión Musical de Almansa, en el V Certamen de Canción Castellana “Villa de Fuensalida” (Toledo).
En 2012 obtiene el Título Superior de Dirección de Coro bajo la tutela del profesor Ángel Martín Matute, en el Conservatorio Superior de Música de Murcia. Ha sido profesor de diversos Conservatorios de Música en la especialidad de Fundamentos de Composición, entre los que destacan Toledo, Almansa, Albacete, Alcázar de San Juan, Cieza, Jumilla y Pilar de la Horadada, así como el Conservatorio Superior de Castilla la Mancha.
Desde 2016 es socio fundador de Aedcoro, Asociación Española de Directores de Coro. En 2017 obtiene el título de Máster en Investigación Musical por la Universidad Internacional de la Rioja elaborando un trabajo de investigación sobre el análisis de la música de Tomás Luis de Victoria.
Actualmente compagina su labor de director de coro y compositor con la de docente como profesor en la especialidad de Fundamentos de Composición.
“Los Labradores” pasodoble-himno de la Federación de Peñas de San Isidro fue compuesto en el año 2004 por Pedro e Inmaculada Navarro Ruano, como autores de la música y la letra respectivamente, para representar el sentir de un pueblo en sus fiestas más populares.
Letra “Los Labradores”.
Según explican en la editorial GTE Música, donde se puede adquirir esta partitura: “La obra está estructurada en tres grandes secciones, a las que habría que añadir su introducción. Se trata de un Pasodoble que además hace las veces de Himno, ya que contiene un texto para ser cantado. Esta obra pretende poner música a las Fiestas de San Isidro Labrador que se vienen celebrando desde hace muchos años y que destacan por su gran colorido y participación de un pueblo totalmente entregado a ellas. Musicalmente hablando, la obra intenta adentrarse en el folclore y las tradiciones, es por ello que, tras la introducción, que recuerda al pasodoble “España Cañí”, comienza el 1º tema, elaborado con una melodía sencilla y pegadiza junto a su contrapunto, que rememora a los pasodobles clásicos de estilo taurino. Llegada la 2ª sección, el pasodoble se adentra en el folclore local, realizando citas literales de dicho folclore con el que tan ligada está esta fiesta vinculada a las tradiciones y a la agricultura. La obra finaliza con la 3ª sección que se adapta fielmente al texto. Texto que describe cada una de las escenas de la fiesta. Tema que, por otra parte, con el paso de los años, se ha hecho más popular en la ciudad y que recuerda a la música de un género tan nuestro como es la Zarzuela. En definitiva, es una obra pensada para representar a una fiesta multitudinaria, de corte sencillo y popular, que refleja el carácter y el sentir del pueblo yeclano”
En el siguiente vídeo, además de conocer las Fiestas de San Isidro de Yecla, podrán escuchar la grabación del estreno de dicho pasodoble realizada en el Teatro Concha Segura de Yecla, e interpretado por la Banda de Música y el Coro “La Purísima” de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla, dirigidos por Ángel Hernández Azorín.
– Archivo Pedro Navarro Ruano
– Archivo de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla (AAMY).
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/395-2022-Revista-Diapason-Los-Labradores-portada.jpg681463Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-12 20:13:472022-05-12 20:14:06Los Labradores por José Miguel Ibáñez Lax
“Si todas las artes aspiran a ser como la música, todas las ciencias aspiran a ser como las matemáticas” , G. Santayana (1863-1952)
Me enfrento a este primer artículo sobre la música y las matemáticas, definiendo qué es lo que intentaré transmitir con los diferentes textos que vaya teniendo oportunidad de escribir.
En este sentido, procuraré que las lecturas sean amenas, didácticas y próximas a vosotros. Sé que sois amigos de la música, pero… ¿podréis ser también amigos de las matemáticas? Yo creo que sí.
Vamos a empezar por el título de esta revista: Diapasón. Ya sabéis lo que es: un pieza en forma de U construida con un metal elástico que, cuando se le golpea y se le hace vibrar, genera un sonido casi inaudible, que normalmente suele oírse acercándolo al oído. El diapasón más utilizado es el denominado la 440, que genera la nota la que tiene exactamente 440 Hz. (hercios), y con la que se afinan todos los instrumentos de una banda u orquesta.
Vale, pues sin quererlo ni beberlo, ya estamos hablando de matemáticas. ¿Ya? ¿Dónde? Pues concretamente en la palabra ‘sonido’ y en la palabra ‘hercios’. El sonido son oscilaciones de la presión del aire, provocadas por ejemplo por la vibración del parche de un tambor, de los platillos o de una caña en un clarinete.
Estos cambios de presión en el aire son convertidos en ondas mecánicas en nuestro oído, y finalmente percibidas por el cerebro. Y estas variaciones de la presión del aire se transmiten de un modo análogo a cuando tiramos una piedra en un estanque, y tienen –y llegamos aquí a las matemáticas– unas ecuaciones matemáticas que las describen mediante funciones sinusoidales, y que vienen dadas por factores como la distancia, la velocidad o la presión atmosféica existente. Por eso no suenan igual los instrumentos los días soleados que los lluviosos, o una sirena de una ambulancia cuando se nos acerca que cuando se nos aleja.
Por otro lado, los hercios son las unidades que expresan la cantidad de vibraciones que emite una fuente sonora por unidad de tiempo. Así, nuestra nota la con 440 Hz. nos dice que cada segundo se efectúan 440 vibraciones por parte de los brazos del diapasón. Del mismo modo que con nuestro coche vamos a 70 km/h., pudiendo ir más rápido o más lento en función de los metros que recorramos en una hora, con nuestro instrumento musical podremos emitir una vibración que se repetirá más o menos veces por segundo como dicho instrumento nos permita, medición que se efectuará mediante hercios, y que nos generará las notas musicales.
Bueno, pues hay un teorema del año 1822 del matemático francés Joseph Fourier (1768-1830) que afirma, en términos sencillos, que cualquier sonido musical es la combinación de sonidos sencillos.
Es decir, que cualquier sonido puede ser duplicado mediante la combinación de diferentes diapasones: las ondas de cada uno de ellos se agruparán generando una nueva onda mecánica que configurará la nota final. Este teorema es vital para la música, puesto que nos explica el porqué con diferentes instrumentos podemos generar las mismas notas musicales.
Otro punto interesante tiene que ver con la representación de un sonido o de una nota en particular, que puede ser realizada mediante un pentagrama, como todos vosotros sabéis. En dicho pentagrama, podemos ver qué nota musical es. Pero también mediante las fórmulas matemáticas correspondientes podríamos representar dicha nota mediante sus hercios: más hercios, sonido más agudo; menos hercios, sonido más grave.
Hablando de pentagrama, es interesante comentar que muchos de los términos que aplicamos cuando aprendemos solfeo, tienen también una relación con las matemáticas. La altura –término puramente geométrico– o tono de una nota, que nos dice si un sonido es grave (pocos hercios) o agudo (muchos hercios), su duración, su intensidad (un sonido fuerte o débil) son, por ejemplo, factores que son perfectamente medibles y, por ello, matemáticos.
¿Habéis pensado en la relación que existe entre las diferentes figuras musicales? Sí, aquello de 1 redonda = 2 blancas, 1 blanca = 2 negras, 1 negra = 2 corcheas, 1 corchea = 2 semicorcheas, etc. Pues es un ejemplo más de matemáticas en la música.
Estoy seguro que observáis que sumando la duración de dos figuras iguales se obtiene la figura con una duración inmediatamente más larga. Hemos hecho, pues, una suma. O una multiplicación por el número dos. Pura aritmética, ¿verdad?
Pues ahora que tenemos un diapasón, y sabemos cómo representar las notas musicales, musical y matemáticamente, nos falta afinar a la banda, ¿no?. ¿Y que es esto? Pues ni más ni menos que seleccionar unos sonidos que juntos son agradables para el oído humano, y descartar el resto. En términos matemáticos, tenemos que seleccionar las frecuencias de unos sonidos que sirvan para hacer música, y olvidarnos del resto. Debemos, en definitiva, crear una escala musical. ¿Y nos pueden ayudar las matemáticas a ello? ¡Pues claro que sí! ¿Cómo? Seguramente te pienses que harán falta grandes ecuaciones para representar una escala musical, pues… ¿te puedes creer que solamente necesito los primeros números que aprendemos cuando somos niños? Sí: el uno, el dos y el tres.
Pitágoras de Samos (aproximadamente 582 a. C. – 507 a. C.), además de ser famoso por un teorema atribuido a él, pero perteneciente a uno de sus colegas llamado Hipaso de Metaponto, fue un matemático griego que nos dio un sistema para construir una escala musical: es la denominada afinación pitagórica. Dedujo que un sonido musical producido por una cuerda es más agudo cuando más corta es dicha cuerda, y que para generar la octava siguiente más alta de una nota, había que dividir entre dos la longitud de dicha cuerda. Además, generó una fórmula para conocer todas las notas de la escala: partiendo de una nota cualquiera, basta generar seis quintas (un salto que comprende cinco notas de la escala musical) consecutivas por encima y una por debajo, lo que da lugar a las siete notas de la escala.
De este modo, continuando las quintas, obtendríamos toda la escala cromática.
¿Y cómo generamos estas octavas mediante a nivel matemático con las frecuencias, que hemos dicho que representan a las notas musicales mediante las ondulaciones de una cuerda? Pues considerando que si la onda se desplaza por una cuerda de longitud l, y tarda un tiempo t en llegar al final y volver hasta el inicio, lo que nos daría todo un ciclo de onda, pues entonces si la cuerda es la mitad de larga, veremos que la onda volverá justamente en la mitad del tiempo a su principio, lo que provocará que si en un segundo teníamos, con la nota la, 440 ondulaciones por segundo, para su octava tendremos 880 ondulaciones por segundo. O sea, que para conseguir una octava superior, bastará multiplicar por dos la frecuencia –los hercios– de la nota original.
Para visualizar mejor lo que pasa en una cuerda, podemos pensar que si tiramos una pelota a una pared que está de nosotros d metros, y nos llega rebotada después de 2 segundos, bastará acercarse la mitad de la distancia d/2 a la pared, para observar que nos llega en un segundo, es decir, en la mitad de tiempo. De este modo, con la mitad de una cuerda las ondas llegan en la mitad de tiempo a su origen, y vuelven a ser rebotadas, por lo que en el mismo tiempo, hay el doble de vibraciones. De ahí que una nota y su octava tengan un factor múltiplo de 2 entre sus frecuencias.
¿Y cómo encontramos estas quintas consecutivas, que nos generan el conjunto de toda la escala musical? Pues en lugar de multiplicar por 2, lo que tendremos que hacer es multiplicar la frecuencia por 3/2, que, mira por dónde, es la fracción más simple posible, puesto que solamente implica a los números naturales más pequeños que generan un número fraccionario: el 2 y el 3. Así, las diferentes frecuencias de las notas musicales vendrán dadas por una multiplicación iterativa por la razón 3/2.
Así, si partimos del la estándar para la afinación, podemos encontrar el resto de notas multiplicando poco a poco por 3/2 (para encontrar todas las notas de la escala) y por 1/2 (para encontrar la octava correcta). ¿Se puede con menos complicaciones generar algo tan rico como la escala musical.
Bueno, creo que ha sido una buen principio: sabemos lo que es el sonido, lo que produce el tono de una nota, cómo representarla, cómo dar su duración, y cómo generar el conjunto de la escala musical. Y todo ello haciendo solamente sumas y multiplicaciones de los números más elementales respecto a cualquier sonido que queramos coger como nota origen. ¿Véis como trabaja un órgano electrónico? ¿O los politonos de vuestro móvil? ¿O el equipo de música? ¿O el mp3 que escucháis todo el rato? ¡Solamente haciendo sumas en base a un sonido tomado como base!
Para acabar el artículo, me gustaría hablar de las simetrías y la música. En matemáticas, dos objetos son simétricos respecto a unas operaciones, cuando uno puede ser obtenido del otro mediante la aplicación de dichas operaciones. En un papel, por ejemplo, todos podemos realizar traslaciones, rotaciones y reflexiones de cualquier figura que dibujemos. Basta con copiar íntegramente el objeto en otra posición del folio que estemos utilizando, después de haberlo dejado igual que estaba respecto al punto de vista que teníamos antes del cambio, o después de haberlo girado del mismo modo que giran las agujas de un reloj, o haberlo dibujado copiando la imagen que obtenemos de dicho dibujo en un espejo.
Bueno, pues del mismo modo que podemos generar una frase que sea simétrica, como las frases “Dábale arroz a la zorra el abad” y “Anita lava la tina”, que se pueden leer al revés y nos resulta la misma frase (es una frase palíndroma), o de igual manera que existen los números capicúas, como el 77, el 303, o el 11411, pues los compositores musicales han tenido siempre en cuenta las simetrías que podrían obtenerse de las piezas y composiciones que creaban. Así, el siguiente fragmento de partitura es un ejemplo de simetría en una pieza musical. ¿Veis las notas de los primeros compases son las mismas que aparecen en los últimos compases?
Fragmento de «Six unisono melodies» de Bartók
En fin, ¡espero que la lectura del artículo haya sido interesante!
Un saludo cordial,
Juanfran
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Juan Francisco Martínez Cerdá
Matemático, antiguo músico de la Banda de música de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
Artículo aparecido en la Revista Diapasón de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/8304-Revista-Diapason-Musica-y-matematicas-01.jpg313437Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-08 10:27:252024-10-23 15:39:23La música y las matemáticas (I)
Bueno, pues seguimos hablando sobre las matemáticas y la música. ¿Sabías que Johannes Kepler (1571-1630), el astrónomo y matemático que definió las leyes sobre el movimiento de los planetas sobre su órbita alrededor del sol, escribió un libro llamado Harmonices Mundi en el que intentaba explicar los movimientos de los planetas gracias a la proporción de diferentes poliedros, los denominados sólidos platónicos, que relacionaba con las escalas musicales? Lamentablemente, el hombre se equivocaba, puesto que las observaciones no coincidían con la teoría planteada, pero su esfuerzo, dedicación e ilusión son dignas de valorar.
El tema de relacionar los planetas con la música es algo que ya venía desde Pitágoras (582 a.C.-507 a.C.) y su Música de las Esferas, que defendía que las distancias entre los planetas debería tener la misma proporción que la de los sonidos armónicos obtenidos en una cuerda. Se definía el sistema solar como diez esferas circulares, con un fuego central -el Sol-, y en el que cada esfera emitía un sonido: las más cercanas las notas graves, y las más lejanas, las notas agudas. Platón (427 a.C.-347 d.C.) también habló después sobre ello en su República.
Como véis, esta idea ha acompañado a la humanidad durante toda su historia. El año pasado, sin ir más lejos, Mike Oldfield editó un disco denominado Music of The Spheres, y la mismísima NASA grabó los sonidos emitidos por el Sol y por Júpiter.
Cambiando de tema, os comentaré ahora un juego que inventó Mozart. Este fabuloso músico, en 1777, teniendo 21 años, cogió un dado y pensó que sería válido para que cualquier persona pudiese componer un vals, y que sonase bien. Incluso en el caso de que no supiese música. Pues se puso manos a la obra, y en su obra Musikalisches Würfelspiel consiguió crear un auténtico generador de valses.
¿Cuáles son las reglas de este juego? Pues tenemos que ir incorporando notas musicales a los 16 compases que formarán el vals. Empecemos por el primer compás: tiramos dos dados y sumamos los números que obtenemos, que siempre tendrán un valor entre 2 y 12. Después, buscamos en unas tablas las notas musicales que pondremos en dicho compás, mirando el número de la columna del compás en el que estamos -en nuestro caso el compás primero-, y localizando el número de fila de la tabla que se corresponde con el valor de la suma que nos ha salido de los dos dados. En las casillas habremos encontrado uno de los 176 compases que Mozart compuso, que tendremos que copiar en nuestro pentagrama que acogerá la creación musical que estamos haciendo. Después, haremos lo mismo con el segundo compás: volveremos a tirar los dos dados, sumaremos los valores, buscaremos la fila con dicho valor y la casilla de la segunda columna, y copiaremos el valor en nuestro pentagrama. Y así, con el tercer y subsiguientes compases.
Al final, y gracias a este genial músico, que asociaba conceptos matemáticos relacionados con las notas musicales de una forma inconsciente, podremos componer un vals tranquilamente, y sabremos que sonará bien.
Aquí podemos ver estas dos tablas, una para la primera parte del vals, y otra para la segunda, con 8 compases cada una:
Y ahora, ya solamente falta conocer las notas musicales de los 176 compases (la figura siguiente incluye los primeros 24 compases), tener un papel pautado y un lápiz, y empezar a componer vuestro propio vals:
¿La relación con las matemáticas? Pues el hecho de saber que prácticamente nadie podrá componer la misma partitura, puesto que existen 1116 combinaciones posibles. Y eso solamente con 16 compases. Imagínate las posibilidades con 32 ó 64 compases. Venga, anímate a coger el lápiz que utilizabas para la partitura, y ponte a hacer la cuenta. ¿Qué… hay ánimos para hacerlo?
Y eso sin pensar en el hecho de orientar tablas a hacer un minueto, jugando con dos dados, y un trío, jugando con solamente un dado. O uniendo ambas posibilidades:
En este caso, las posibilidades serían 1116 * 616 = 130 * 1027 para 32 compases.
Para acabar, y considerando que hemos acabado hablando de teoría de juegos, comentaros que también podéis jugar al dominó con notas matemáticas, o tener una baraja. Desde los siguientes enlaces podéis imprimiros las plantillas necesarias:
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/8305-Revista-Diapason-Musica-y-matematicas-02.jpg282705Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-08 09:54:022024-10-23 15:04:55La música y las matemáticas (II)
“La música es el placer que experimenta la mente humana al contar sin darse cuenta de que está contando”, Gottfried Leibniz (1646-1716)
¿Qué tal? ¿Cómo va este inicio de año 2011? Espero que podamos seguir compartiendo a lo largo de este año algunas de las conexiones que se dan entre la música y las matemáticas.
Ya que acabamos de empezar un nuevo año, y que este hecho -que tiene que ver con la astronomía- es algo que se repite a lo largo del tiempo, como todos sabéis, podemos hablar del concepto de repetición de determinados sucesos. Por ejemplo, todos somos conscientes de que el día y la noche, las semanas, los meses, las estaciones o los años, son sucesos físicos que se repiten y que pueden ser medidos gracias a determinados instrumentos que el hombre ha ido investando, descubriendo, desarrollando, adaptando y perfeccionando desde el inicio de los tiempos. De alguna manera, para las medidas que el hombre ha ido realizando de todos aquellos sucesos que ha querido observar, y gracias a las matemáticas, se ha ido avanzando en la mejor métrica para dicha medición, en su simplificación y en su belleza: en su armonía, en última instancia. ¿Os suena alguno de estos conceptos: repetición, medida, armonía? Estoy seguro de que sí: cuando hacemos música, tenemos unas medidas (compases, notas, etc.), unas repeticiones (melodías, canons, etc.), y una armonía (relaciones entre sonidos simultáneas).
El origen del término “música” es la palabra griega “musiké” (“de las musas”), y aparecía como una de las siete artes liberales, asociada a los Saberes exactos (Quatrivium o Matemáticas):
Como podéis ver, antiguamente quien decidiese estudiar Matemáticas debía aprender también Música. En mi opinión, es una pena que hoy en día no ocurra así, y que sean disciplinas no comunes.
Respecto al concepto de repetición, que comentaba antes que puede aplicarse a melodías, ¿conocéis alguna de las oberturas de Rossini? La de “Guillermo Tell” o la de “El barbero de Sevilla” son absolutamente brillantes y, básicamente, formadas por repeticiones. Si hace tiempo que no las escucháis, probad a hacerlo bajo este punto de vita matemático.
Si hablamos de medidas, quizás conozcáis la denominada “razón áurea”, que es aquel número obtenido de una figura geométrica en la que la proporción de alguna de sus partes C con respecto a su parte B inmediatamente mayor en tamaño, es igual a la proporción de esta parte mayor B con respecto a su superior C. Por ejemplo:
La proporción entre la longitud del segmento a y el segmento b, es igual a la del segmento a+b y el segmento b:
La proporción entre el rectángulo ADCB y AFEB, dado por las proporciones entre AD y DC, y AB y AF:
Pues resulta que esta razón áurea la encontramos entre algunas de las partes de instrumentos como el violín:
Y no solamente eso. También encontramos que la razón áurea aparece en el primer movimiento de la Sonata Nº 1 de Mozart, que está dividido en 38 y 62 compases, y en su segundo movimiento, con 28 y 46 compases. Las proporciones entre ambos pares de números se corresponden con el número áureo. Incluso se puede encontrar otra aproximación a dicha razón en la Quinta Sinfonía de Beethoven, en la que su famoso lema parece en compases relacionados con dicho número:
Interesante, ¿verdad? Me pregunto si los compases de “Corazón yeclano” tienen también esta proporción, o si el repiqueteo que se oye cuando los pajes de las Fiestas de la Virgen guardan también dicha razón. ¡Qué lástima no tener aquí una partitura para comprobarlo! 🙂
Acabaré el artículo comentando algunos libros relacionados con nuestro tema, para que podáis ir creando una pequeña biblioteca sobre el tema:
“El Armonógrafo”, de Anthony Ashton. Ediciones Orino. Colección: La aventura de la ciencia.
Este libro nos explica la relación entre las notas musicales y los números enteros, y nos presenta diversos gráficos generados por el armonógrafo, un instrumento inventado en el siglo XIX que genera dibujos mediante un péndulo, a partir de los sonidos que recibe.
“La idea del cosmos. Cosmos y música en la antigüedad”, de Radamés Molina Montes y Daniel Ranz Riera. Ediciones Paidós Ibérica. Colección: Paidós studio.
Aquí se nos ofrece una visión de la historia del mundo a través de la interpretación en clave musical y matemáticas de algunos de los sucesos más importantes ocurridos, ya sea en el ámbito de la filosofía, la política, la medicina, la arquitectura, la teología o la técnica.
“El número sonoro: La matemática en las teorías armónicas de Salinas y Zarlino”, de Amaya Sara García Pérez. Editorial: Caja Duero (Salamanca).
Esta publicación nos ilustra las diversas investigaciones de dos teóricos del siglo XVI, que analizaron las teorías existentes hasta la época, en materia de interrelación entre música y matemáticas. El libro nos presenta las diferentes relaciones históricas entre las entonaciones, la armonía y las proporciones existentes entre las notas musicales, desarrolladas y estudiadas a través de las matemáticas. Además, nos ofrece interesantes preguntas de carácter filosófico: ¿siempre tiene que ser percibida la música mediante el sentido del oído, además de por la razón, o podemos denominar música a cualquier estructura válida para la razón, como lo son las matemáticas?
Interesante cuestión, ésta última: ¿qué tiene que ser denominado “música”?
¿Lo sabemos? ¿Puede ésta ser definida de un modo colectivo, o la música siempre será algo subjetivo y personal?
¿Qué nos dice la razón?
¿Qué nos dice el corazón?
Mmmmmmnnnnnnnn…
¡Un saludo cordial!
Juanfran
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Juan Francisco Martínez Cerdá
Matemático, antiguo músico de la Banda de música de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
Artículo aparecido en la Revista Diapasón de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/8306-Revista-Diapason-Musica-y-matematicas-03.jpg300515Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-08 09:30:572024-10-23 15:05:13La música y las matemáticas (III)
En aquellos tiempos en que era estudiante de composición, había un argumento en el aire que se sentía generalizado.
Una dramática pregunta con una, por demasiado fácil, absurda respuesta: “¿Ha habido compositoras en la historia de la música? Si no se conocen será porque no han existido, por algo no están en los libros de historia”.
Hoy en día esto es inasumible, incluso vergonzoso, pero en las generaciones de compositoras ha creado una dura sensación, una pesada mochila que multiplica injustamente los esfuerzos por entrar en un mundo atribuido a los hombres, en el que estaba vetado el acceso a las mujeres. Las consecuencias negativas de esta incompleta historia de la música, de esta falta de referentes, ya fue expresada por Clara Wieck:
Hubo un tiempo en que creía tener talento creativo, pero he renunciado a esa idea; una mujer no debe tener el deseo de componer: si ninguna ha podido hacerlo. ¿Por qué iba a poder yo?[1].
La crítica postmoderna dio un giro en la valoración del hecho artístico, “conceptos como sujeto, razón, clase, género, identidad, arte, verdad, etc. son construidos histórica y socialmente, y que, como tales, no son eternos ni estables”[2]. Este enfoque supuso un radical cambio en la reflexión, la crítica y la redacción de la historia de la música, favoreciendo nuevas vías de análisis de la historia, destituyendo conceptos herméticos que no permitían percibir la realidad más allá de unos arcaicos conceptos estancos, superando las creencias culturales obsoletas. “Para el posmodernismo el conocimiento no es objetivo y neutral como pensaba el positivismo”[3].
Hoy en día se está reescribiendo la historia de la música, Sacando a la luz la presencia de las mujeres en el ámbito de la composición, compositoras que desarrollaron su profesión de uno u otro modo, llegando a codearse, en diferentes épocas, con los grandes compositores de su tiempo. Este rescate de la memoria da constancia de registros de autoras, de sus obras, de sus estrenos, de su presencia en la prensa, y de las circunstancias que favorecieron o complicaron su desarrollo artístico.
La segunda edición del reciente estudio llamado ¿Dónde están las mujeres en la música sinfónica? realizado por las asociaciones Clásicas y modernas y Mujeres en la Música, junto con la SGAE, coordinado por Soraya Sánchez y Pilar Pastor, aporta el lamentable dato de que sólo el 1% de las obras programadas por orquestas sinfónicas españolas es de autoría de mujer, 21 frente a las 1.864 compuestas por hombres. En un tiempo en el que se presupone la igualdad, este tipo de estudios sacan a la luz el desequilibrio que existe entre las leyes en el papel y su ejecución en la sociedad. Es necesario reflexionar sobre las causas que provocan la desigualdad efectiva, dejar atrás el cuestionamiento de la calidad de la producción de las compositoras atribuyéndole una merma creativa por una cuestión de género. La doble vara de medir la calidad de la obra de compositores y compositoras ya fue denunciada por la compositora Elisabeth Lutyens, 1906-1983: “Si Britten escribía una obra mala, decían: ha tenido un mal día. Si yo escribía una, se debía a que era mujer”[4].
Programadores, gerentes, editores, críticos y medios de comunicación tienen el poder y la responsabilidad de crear un panorama musical en el que, bien sesgadamente, predomine el género masculino, o bien, poner sobre la mesa una realidad justa que equilibre la presencia de artistas masculinos y femeninos.
La editorial Monte Victoria ha creado un proyecto cuyo objetivo es la visibilización de composiciones con firma de mujer, que han quedado ocultas por la desmemoria de una historia de la música contada a medias. https://montevictoria.com/compositoras
El primer libro que conforma este gran proyecto, Grandes Compositoras al piano, incluye diecinueve autoras internacionales nacidas entre 1720 y 1893, como Augusta Holmes, Amy Beach, Clara Wieck, Fanny Mendelssohn y Teresa Carreño, entre otras. El siguiente volumen, de ámbito nacional, Grandes Compositoras al piano con acento español, incorpora catorce autoras españolas o con estrecha vinculación con España. En él podemos encontrar autoras como Pauline Viardot, Soledad Bengoechea, Eloísa Galluzo y Eloisa D´Herbil, entre otras.
La editorial Monte Victoria ha continuado editando obras monográficas como la obra de Eugenia Osterberger y ha dado un paso hacia el presente sacando a la luz obras de compositoras actuales como Fragmentos de génesis, de Ana Teruel.
La consecuencia natural del proyecto Compositoras de la editorial, ha sido ubicarse en el presente, con el añadido de centrarse en el panorama andaluz. De este modo, el libro es testimonio de diferentes sensibilidades conectadas con esta tierra, que está absolutamente ligada al arte, dando valor a la producción musical actual, paradójicamente, tan desconocida como viva en los actuales espacios culturales.
Compositoras Andaluzas Contemporáneas, publicado por la editorial Monte Victoria en septiembre de 2021, recoge dieciséis obras de dieciséis compositoras andaluzas o de fuerte arraigo andaluz. De izquierda a derecha y de arriba abajo, en la imagen: Diana Pérez Custodio, Ana Teruel, Dolores Serrano, Pilar Osado, Reyes Oteo, María José Arenas, Cristina Gallego, Dolores Romero, Isabel Royán, Inmaculada Godoy, Iluminada Pérez, Sara Almendros, Inmaculada Almendral, Elena Morínez, Ana Blanco y la abajo firmante, Silvia Olivero.
El editor, Jorge Díaz, confió en mi persona para coordinar esta obra, lo cual me ha permitido conocer a extraordinarias mujeres cuya valía es, sin duda alguna, merecedora de reconocimiento. Este volumen, enmarcado en un presente que abarca diferentes generaciones de compositoras, es testimonio vivo de la evolución del lenguaje pianístico, invalidando otro de los mitos atribuidos a la producción con firma de mujer: Sólo al pasearse por las páginas del libro se percibe la no existencia del llamado “lenguaje femenino”. Cada obra manifiesta un particular carácter, estética, lenguaje y personalidad individual, no como mujer sino como persona, una diversidad manifiesta en la escritura e incluso en las grafías. En las diferentes obras podemos encontrar elementos contrastantes, ya sean expresionistas, minimalistas, impresionistas, experimentales, orientales, así como caracteres pasionales, intimistas, enérgicos, extrovertidos, pedagógicos, estructurales, y hallamos la relación entre la música y otras manifestaciones artísticas como el teatro, el audiovisual, la poesía o la narrativa del cuento.
A fin de subrayar la presencia de las compositoras en los diferentes ámbitos de la música, y de dejar constancia del trabajo constante desarrollado a través de la experiencia de cada una de las autoras, el libro contiene la fotografía y la biografía artística de cada una de ellas donde describe la trayectoria profesional de cada una en heterogéneos ámbitos, como la música experimental, la música electrónica, el ámbito educativo, la música audiovisual, música de cine y videojuegos, la música sinfónica, camerística, el teatro musical, la búsqueda de sonoridades en culturas asiáticas, la performance, la relación con las artes plásticas e incluso la dirección orquestal. Encontramos en estas biografías la proyección nacional e internacional del panorama musical andaluz, representado a través del recorrido de las diferentes artistas.
Este libro pretende mostrar que las compositoras no son una excepcionalidad, sí son una realidad que ejerce su labor dentro y fuera de nuestras fronteras. El proyecto Compositoras, de la editorial Monte Victoria, está haciendo su aportación a la recuperación de la memoria y está sembrando desde el pasado hasta el presente, a fin de crear un futuro más justo.
Como testimonio auditivo, los siguientes enlaces permiten escuchar alguna de las obras publicadas en Compositoras Andaluzas Contemporáneas. Abramos el telón y disfrutemos de ellas.
Senderos, Cristina Gallego. Pianista: Juan Manuel Rodríguez Écija
Susúrrame al oído, Dolores Serrano. Pianista: Sofya Melikyan
…Y sin embargo, gira, Ana Teruel. Pianista: Nieves Romero
El erizo y la liebre, Reyes Oteo. Pianista: Cristina López García
Ucronías, Mª José Arenas. Pianista: Sofya Melikyan
Cosmic Delights, Pilar Osado
Efímero, Elena Morínez. Pianista: Amaya Goicoechea
Pandemia, Silvia Olivero. Pianista: Rafael Ruíz Rodríguez.
Bibliografía
Beer, Anna (2919). Armonías y suaves cantos. Barcelona, Acantilado
Ramos, Pilar (2003). Feminismo y música, Introducción Crítica. Madrid, Narcea.
Turina, Joaquín (1914). “El feminismo y la música”. En Revista Musical Hispano-Americana, nº2, febrero, 8-9. (1982). Escritos de Joaquín Turina. Madrid: Ed. Alpuerto.
El próximo sábado 7 de mayo de 2022, será el séptimo de los conciertos incluidos este año en la programación del XX Ciclo “Aula de Conciertos”, organizada por la Escuela de Música de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla y la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de nuestra ciudad.
Yecla, 3 de mayo de 2022
Esta vigésima edición cuenta con la colaboración de Dúo-Graph, Familia Castaño, Dígicol, Iberpiano, Juan Palao Peña, Autobuses Pelotón, Daemon 4, YeclaGrafic, Davó, Frutas y verduras Hermanos Juan Ortuño, Suministros Lomar, Spumaytel, Xti y Audiotec, y como en otras ediciones anteriores también cuenta con el apoyo de los medios de comunicación locales: Onda Regional de Murcia, elperiodicodeyecla.com, TeleYecla, Onda Cero Yecla, Cope Yecla, Siete Días Yecla y Ser Arco Norte.
Se realizará en la Sala de Audiciones de la Escuela de Música a las 19:30 h., con aforo limitado para 80 personas y previa reserva de sillas contactando con la Escuela de Música. Consistirá en un concierto denominado “Saxofones a la española”, que será interpretado por los saxofonistas yeclanos y miembros de la Banda Sinfónica de la AAMY: Ángel Hernández, Arturo Díaz, José Pascual Fernández, Francisco Soriano y Alejandro Hernández, acompañados al piano por Francisco Martí.
El mismo será grabado y emitido con posterioridad a través del Canal YouTube de la Asociación de Amigos de la Música de Yecla.
Este concierto surge desde la iniciativa del alumno de nuestra escuela, Alejandro Hernández Castillo, el cuál cursa estudios de grado profesional en la especialidad de saxofón en el Conservatorio de la vecina localidad de Almansa; uniéndole un vínculo muy especial con el cuarteto de saxofones Sáxibeb involucra a sus miembros para realizar este recital. Tenemos que añadir y destacar la colaboración del prestigioso aunque joven pianista Fran Martí, implicado con nuestra escuela y asociación en todo momento.
El eje principal de este concierto es el repertorio escrito por compositores españoles o piezas dedicadas a músicos españoles. En este sentido es obvio que el representante principal del saxofón en España ha sido y lo seguirá siendo el Maestro Pedro Iturralde, rendimos así también un merecido homenaje a su figura.
Con distintas posibilidades de asociacionismo vamos a escuchar este instrumento en formato de dúo con piano, cuarteto, dúo solo e incluso sin ningún tipo de acompañamiento.
Las obras escogidas son una pequeña muestra de música escrita desde el corazón para enriquecer el oído del escuchante.
Para poder realizar estos conciertos vamos a seguir todas las pautas que nos indican las autoridades sanitarias:
1º. Aforo limitado a 80 personas.
2º. Reserva de localidad con cita previa.
3º. Itinerario diferente de entrada y de salida.
4º. Se dispondrá de material de higiene y protección tanto a la entrada del edificio como en la propia Sala de Audiciones.
5º. Uso recomendado de mascarilla durante toda la estancia en las instalaciones de la Escuela de Música, incluido en dicha sala durante el desarrollo del concierto.
Debido a la limitación de 80 personas de la ocupación de la sala, que como ya hemos dicho, estará sujeta a las indicaciones de las autoridades sanitarias, se deberá de reservar, hasta completar el aforo, en la Conserjería de la Escuela de Música, llamando al teléfono 968752485 o a través del correo: administracion@amigosmusica.com; en horario de lunes a viernes de 16:30 a 20:30 h. El día del concierto, si quedan sillas libres, se asignarán por riguroso orden de llegada hasta completar la capacidad permitida.
https://coessm.org/wp-content/uploads/2022/05/384-2022-Aula-Conciertos-7-de-mayo.jpg546448Vicente Cerdáhttps://coessm.org/wp-content/uploads/2017/10/COES_TRANS.pngVicente Cerdá2022-05-03 19:20:112022-05-03 19:20:24XX Ciclo “Aula de Conciertos” Saxofones a la española