Como ratón de biblioteca buceaba en la literatura musical para banda compuesta por mujeres y os puedo asegurar que no me resultaba nada fácil, parecía estar buscando un tesoro escondido por un pirata experto.

Tras horas de exploración, el entusiasmo se reflejó en la comisura de mi boca al descubrir un cofre lleno de joyas, la vida y obra de Ida Gotkovsky.

26 noviembre, 2020 Escrito por diapason

Ida Gotkovsky, compositora francesa nacida el 26 de agosto de 1933 en Calais, Francia, dedicó su vida a la composición y a la docencia. Estudió en el Conservatorio superior de Música de París, bajo la tutela de dos grandes compositores: Oliver Messiaen y Nadia Boulanger. Recibió innumerables premios, como el Premio Lily Boulanger, el Primer premio del referéndum Pasdeloup, el Premio internacional de Divone-les-bains, el Gran premio musical de la ciudad de París, el Premio Blumenthal y la Medalla de la ciudad de París, entre muchos otros…

Su extenso catálogo de obras parte de encargos realizados internacionalmente y se ubica entre los años 1954 y 2005. Incluye obras para orquesta, orquesta y solistas, orquesta de vientos, óperas, música de cámara, ballets, música vocal, obras pedagógicas y música para radio y televisión. Su obra ha sido interpretada internacionalmente, Europa, EEUU, Japón, Rusia, Asia, Australia… siendo reconocida como embajadora de la música francesa.

Junio 1984

Se puede ver su catálogo de obras en: https://www.gotkovsky.com/

La obra de Gotkovsky se identifica por su fuerza creativa, en su concepto compositivo plantea: “Crear un trabajo universal con un lenguaje contemporáneo, con estructuras vigorosas, la unidad de expresión musical en todo momento”. En su temperamental obra se puede escuchar la fortaleza de unas fuertes estructuras, su noción de infinito y el uso de ideas melódicas líricas.

…….

Al enfrentarme a su obra descubrí una inmensa energía que atrapa con rapidez, te rodea en sus texturas y te agita a través del ritmo. A su vez, el uso de los timbres implica tanto un magistral control de los colores individuales como la multiplicidad nacida de las diferentes combinaciones tímbricas. Esta última es capaz de abrumar unas veces con una densidad homogénea que avanza con una fuerza imparable y en otros momentos entretejida en una polifonía en perfecto equilibrio.

Su obra para banda Poema de Fuego, de 1978, me regaló la oportunidad de mimetizarme con el mito sagrado de tradición celta que simboliza el cambio de año. Ceremonia en que una larga procesión transita entre dos grandes hogueras anunciando el nuevo año. En su prólogo Ida describe que el primer fuego, representado en el primer movimiento, ha sido observado y honrado durante todo el año, mas, al concluir su ciclo, éste llega a su fin. El segundo, representado en el segundo movimiento, da luz al nuevo fuego a través del proceso memorial y mágico compuesto por los dos elementos: celestes y terrenales.

Es imposible no sentir la inmensidad entre los brazos, en la palma de las manos, en el aire que se respira mientras se dirige esta imponente obra.

Poema de fuego, Ida Gotkovsky. Silvia Olivero al frente de la Banda Sinfónica municipal de Albacete. Marzo 2019.

Una segunda oportunidad de disfrutar la dirección musical de la obra de Ida Gotkovsky fue con el otoño y el verano de su Symphonie de Printemps. La obra está compuesta por cuatro movimientos que encarnan las cuatro estaciones.

Aún siento la vibración de los dos movimientos que tuve entre mis manos. Automne impresiona por el lirismo en movimiento dentro de la estaticidad del conjunto, la sensación de un tiempo situado en la ingravidez. Eté contrasta con un sentido rítmico ubicado entre columnas sonoras.

Automne et Eté, Symphonie de Printemps, Ida Gotkovsky. Silvia Olivero al frente de la Banda Municipal de Música de Granada.

…….

Ida mantuvo relación con la música de Banda en España. En marzo de 1968 asistió al estreno de su Sinfonía para gran banda en el Concierto extraordinario de la Primitiva de Liria, dirigido por el director francés Desiré Dondeyne. En el recorte de prensa la autora expresa: Mi sinfonía sigue los caminos clásicos, quizá dentro de una línea similar a la de Prokofieff y Béla Bartók. Es una música temperamental. La escribí para el maestro Dondeyne, para dar a las bandas de música una composición de lenguaje moderno.

Marzo 1968

Tras el estreno, la prensa reseñó: la partitura de ida Gotkovsky, reveladora de todo un temperamento, colmaron los entusiasmos… Los aplausos llegaron últimamente al arrebato cuando la dramaticidad de la “Sinfonía para gran banda” crispaba los nervios levantando al público de sus asientos.

19 marzo 1968    16 marzo 1968

Años después, en 1984, regresó a España para asesorar a la banda Primitiva en el Certamen de Valencia. El periódico Noticias del día, el 5 de julio de 1984, indicaba que la obra obligada del certamen era la Sinfonía para grandes bandas de Ida Gotkovsky, para lo cual la banda Primitiva había invitado a la compositora para que les asesorase sobre la interpretación de la obra.

Julio 1984

…….

Aún me resulta incomprensible no haber conocido anteriormente la obra de Ida Gotkovsky, no hallara en los libros de texto de compositores del siglo XX, no haberla escuchado en concierto. De lo que no tengo ninguna duda es de haber hallado un tesoro que debe estar a la vista y oídos del público, de haber hallado una compositora de una fuerza extraordinaria cuyo talento he tenido la fortuna de sentir a través de mi mente, mi corazón y mis brazos.

Silvia Olivero Anarte