Escrito en diapason / 16 marzo, 2023
La primera vez que mi hijo Ismael se fue a tocar con la banda de música de Yecla a unas Fiestas de Moros y Cristianos cuando lo recogimos llevaba las partituras que había utilizado para el desfile y como lectora compulsiva y por curiosidad personal allí vi la pieza “Borosko” de J. J. Pérez Camús, me sorprendió y tuve que cerciorarme que esa era la transcripción de su nombre en las partituras, Juan José Pérez Camús, para confirmar que era aquel amigo de mi padre con el que compartía el gusto por la música cantada y por ello alguna que otra noche de sábado en “El maset dels Estudiants”, el local de la comparsa de Estudiantes de las Fiestas de Moros y Cristianos de Banyeres de Mariola, donde se juntaban a cantar tangos, boleros, canción ligera y las propias composiciones que Pérez Camús fue creando a lo largo de su vida.
J. Pérez Camús, como se ve escrito en las partituras que se interpretan en las bandas de música, fue una persona autodidacta que no se dedicó exclusivamente a la música hasta que se jubiló de su trabajo de tejedor, eso no le impidió componer en el año 1956 el pasodoble “El Bon Humor” dedicado a la Comparsa de Estudiantes de Banyeres de Mariola a la que pertenecía y, hoy en día, uno de los pasodobles que identifican mejor las fiestas de todo un pueblo, sus estrofas en valenciano perfectamente pueden servir para describir la alegría y el buen ambiente de cualquier tipo de fiesta: “Ja s’acosten les Festes del Poble/Festes plenes de molta il·lusió/ tots desitgem aquests bons quatre dies/ per la fartera, xamera i “El Bon Humor…”(Ya se acercan las fiestas del pueblo/ unas fiestas de mucha ilusión/ todos deseamos estos buenos cuatro días/ por la hartura de comida, bebida y Buen Humor…)
Aunque había nacido en Camp de Mirra (1916) con pocos años ya vivía en Banyeres y a los diez asistía a la academia de la “Música Vella” llamada entonces “Unión Musical” dirigida por don Silvestre Vicent Doménech, estudiaba solfeo y después de iniciarse en los dos primeros cursos del “Eslava” le dieron el clarinete que junto con el saxofón serían los instrumentos de su vida. Además tenía una gran voz de tenor que hizo que se dedicara también a cantar desde los quince años, haciendo su primera actuación con diecisiete años, acompañado de un piano, en la sala Aitana de Alicante, donde también cantaron músicos famosos como “Machín”, también quedó finalista en un concurso regional en la Plaza de Toros de Valencia y cantó en orquestas de aquella época como “La Rister”, en la que tocaba el contrabajo y con las que amenizaban las verbenas y fiestas que se organizaban por los pueblos, todo ello sin dejar de pertenecer a la banda. En su faceta de compositor de canciones, y cantadas por él mismo en celebraciones, galas y conciertos, estrenó: “Soy Estudiante”, “Queremos volver”, “Toda la vida es muy bella”, “Guitarra, guitarra, guitarra”, “Voy en busca de un amor”, “Una noche abrileña”,… además hacía arreglos de canciones de otros compositores para su orquesta y colaboraba con Don Godofredo Garrigues Perucho, director de la banda de Banyeres en esos tiempos, cuando se requería su faceta de cantante para las actuaciones y los conciertos. Junto a este director al piano grabó un disco con dieciséis canciones y con un pianista de Alicante otro con 9 tangos. También se recuerda su voz en la grabación de “El Himne a la Festa” dedicado a Banyeres que había compuesto Don Godofredo con letra de Modesto Micó.
Cuando se jubiló es cuando afianzó su vocación de compositor con un buen repertorio registrado en la Sociedad General de Autores, entre sus pasodobles se cuentan los ya citados “El Bon Humor” y “Borosko”, además de “Juanielen” (dedicado a sus dos hijas mellizas Juanita y Mª Elena,) “Pilarina” (dedicado a su mujer y a su hija mayor), “Joper” (autodedicado), “Roger”, “Charles” (dedicado a su nieto Juan Carlos), “Elvi” (dedicado a su nieta Mª Elvira), “Benjamín”, “Festero”, “Saleroso”, “Soilon”, “Edward” (dedicado a su nieto Eduardo), “Marchando”, “Poloperete”, “Vicentlar”, “Chaume”, “La Falla”, “Beneixama, Beneixama”, “Compasa Tarik de Biar”, “Comparsa Ka-Mil”, “La Amistad”, “Els Cristians” (música, himno de la Comparsa de Cristians de Banyeres), “Califas” (letra y música, himno de la Comparsa de Califas de Banyeres), “Moro Nou” (música, himno de la Comparsa de Moros Nous de Banyeres), Els “Jordians” (letra y música, himno de la Comparsa de Jordians de Banyeres), “Maruja Calatayud”, “Juanín” (el último que escribió cuando ya estaba enfermo, dedicado a su nieto Juan Antonio),… junto a “Abdulá”, la única marcha mora que compuso. Como se puede ver hay muchos dedicados a su familia, otros son los himnos de distintas comparsas de Moros y Cristianosen varios pueblos de la comarca y, muchos de ellos, se ven en las partituras de las bandas porque se suelen interpretar en ofrendas, desfiles y cabalgatas de Fiestas de Moros y Cristianos, y de otros tipos de fiestas como las Fallas, o en los paseos festivos deFerias o romerías. Actualmente en las redes se pueden encontraralgunos de sus pasodobles grabados en conciertos o actuaciones de diferentes bandas:“El Bon Humor”, “Edward”, “Borosko”…
En 1990 “La Unión Musical Pobla de Farnals” le dedicó un homenaje interpretando, en un concierto especial, diez de sus pasodobles, J. J. Pérez Camús también estuvo en el homenaje de la UNDEF y la “Asociación San Jorge” a los compositores de música festera que se realizó en el Círculo Industrial” de Alcoy en 1981… y la “Sociedad Musical Banyerense” dirigida por Juan Iznardo Colom grabó en 1993 el cassette “Homenatge. Pasodobles Festeros” con una portada en la que destaca “La Torre del Homenaje” del castillo de Banyeres de Mariola y cuyos beneficios fueron donados por el autor a la “Asociación de Amigos de los Reyes Magos de Banyeres de Mariola”, una grabación en la que la producción corrió a su cargo, que se difundió localmente y que se presentó el 4 de abril de 1993 en los actos preliminares de la Fiestas grandes de Moros y Cristianos que se celebran en abril, pocos meses antes de su muerte acaecida en “La Reliquia”, las otras Fiestas de Moros y Cristianos del primer fin de semana de septiembre con las que se completa el ciclo festivo del pueblo. Un cassette en el que se recopilan algunos de sus pasodobles más interpretados por las bandas, su única marcha mora y el himno de la Comparsa de Estudiantes de Banyeres que tanto lo identifica: “Edward”, “Saleroso”, “Juanielen”, “Pilarina”, “Joper”, “Soilon”, “Benjamín”, “Maruja Calatayud”, “Borosko”, “Marchando”, “Charles”, “Juanín”, “Elvi”, “Festero”, “Abdúla” y “El Bon Humor”. Todo un recuerdo, difícil de encontrar actualmente, del trabajo de un compositor autodidacta que no dudó nunca en colaborar para orquestar composiciones adaptándolas a las bandas o a las orquestas en las que participó, o en cantar en galas conciertos y actuaciones de la banda, siempre demostrando su gran amor por la música.
M. Esperanza Esplugues M.