El presidente de la Federación Catalana de Sociedades Musicales nos habla del estado de las bandas, sus preocupaciones y la reacción del Gobierno tras las últimas restricciones que provocaron cancelaciones de conciertos.
Fuente: https://xarxanet.org/
La cultura será declarada como un servicio esencial. Así lo pidió el presidente de la Generalitat Quim Torra a la consejera de Cultura, Mariàngela Villalonga , para evitar el cese de la actividad cultural en una situación como la actual. Las últimas restricciones del Gobierno generaron algunas dudas sobre la posibilidad o no de ejercer actividades culturales, lo que provocó una serie de cancelaciones. Después de una carta de la Academia Catalana de la Música , la reacción ha sido rápida.
Una de las entidades que forman parte de esta organización, Federación Catalana de Sociedades Musicales , ha sido una de las más afectadas por estas cancelaciones de conciertos. Hablamos con su presidente, Josep Parés sobre las bandas de música y la labor de la Federación:
¿Cuál es el trabajo de la Federación Catalana de Sociedades Musicales?
Lo que hacemos desde la Federación es coordinar y acompañar todas las bandas de música. En este momento tenemos unas 54 bandas federadas en Cataluña. Intentamos conjugar con las bandas una serie de actividades que ellas proponen y, en muchos momentos, como este, actuamos casi como promotores también.
Simultáneamente hacemos una serie de actividades en las que aglutinamos todas las bandas. Cada año hay Encuentro de Bandas donde acuden todas las bandas de Cataluña. También organizamos el Festival de Bandas, en el auditorio de Barcelona, con la actuación de tres de ellas, todo organizado por la misma Federación y siempre a coste cero para las entidades.
El Festival de Bandas se suspendió por la pandemia. Hay nueva fecha?
Efectivamente, este año se tuvo que suspender, pero trabajamos a ver si lo podemos recuperar el próximo año, en 2021.
También tenemos un concurso de composición anual, en el ámbito internacional, así como otras actividades permanentes, como por ejemplo referente a la formación. En definitiva, hacemos de acompañantes de las bandas para salir adelante y defender nuestros intereses colectivos.
Qué afectación ha tenido la pandemia?
Al mismo momento en que se declaró la pandemia, lo que hicimos es, inmediatamente, suspender todo, cualquier actividad, supongo que como muchos otros sectores. Por lo tanto, desde marzo hasta mayo, ha está todo paralizado, no hemos podido hacer nada. Ni siquiera hacer cosas previas para que arranque, como por ejemplo los ensayos. Las bandas de música no pueden actuar si previamente no ensayan, y no pueden plantear ningún proyecto porque no están afinadas.
Y cuál fue la reacción de la Federación?
Desde el primer momento vimos claro que teníamos que trabajar para la reanudación durante este tiempo. Proporcionamos a todas las entidades un kit sanitario, con termómetros de infrarrojos para tomar la temperatura, gel para las manos, mascarillas, objetos para limpiar los aerosoles que se quedan dentro de los instrumentos, etc.
Y simultáneamente, generamos un protocolo de actuación que recoge desde la distancia que deben estar los músicos en el escenario, hasta cómo utilizar las mascarillas y como se incorporan en el escenario, tanto en los ensayos , como en los conciertos. Esto costó muchísimo. Formamos parte de la European Music Council que aglutina a muchas actividades de los sectores musicales de Europa, ya través de ellos conseguimos que nos llegaran estudios médicos y técnicos para dar validez y reforzar el protocolo.
Las bandas han podido volver a su actividad?
Algunas están activas, otros no, por diferentes razones. La mayoría intentando ensayar para reanudar la actividad. Aquellas que tienen que ensayar en espacios cedidos, que son espacios municipales, o que directamente son bandas municipales, donde los ayuntamientos lo han paralizado todo, están paradas. No son la mayoría, pero son muchas. Sin embargo, tenemos bandas activas, que están realizando conciertos en diferentes lugares, aunque nos hayan suspendido casi todos.
Con las últimas medidas decretadas por el Gobierno de la Generalitat ha habido un poco de confusión y algunas actividades culturales se han suspendido.
Se transmitieron algunas expresiones que llevaban a error oa dudas, y en una situación como la que estamos, ante las dudas, automáticamente se cierra todo. Los ayuntamientos suspendieron actividades y se cancelaron muchos conciertos.
Teníamos claro que el PROCICAT había validado que en actividades en las que tenemos un protocolo en marcha, no había ninguna dificultad para realizar la actividad. Pero como esto no lo había entendido todo el mundo, la Academia Catalana de la Música, en la que nosotros formamos parte activa, pidió una reunión con el presidente de la Generalitat y envió una carta donde se especificaba la situación y se le manifestaba que lo que se estaba transmitiendo desde el gobierno llevaba a unas interpretaciones que provocaban algunas dudas.
¿Cuál ha sido la respuesta?
El presidente dispuso que la consejera de Cultura y todo el equipo del Departamento de Cultura se reunieran con la Academia. Se han acordado una serie de mesas bilaterales para hablar de qué podemos hacer de aquí en adelante. También se ha publicado una resolución donde se especifica que las actividades culturales, conciertos y actos de fiestas mayores que cumplen los protocolos acordados por PROCICAT no están sometidas a las últimas restricciones.
Por nuestra parte, hemos enviado un comunicado a todas las bandas informando de esta situación y informándoles que nos reconocen como sector esencial en el ámbito de Cataluña.
Se han desvanecido las dudas?
Completamente. Se ha reaccionado correctamente por parte de la Generalitat, del presidente Quim Torra, de la Directora General de Cultura Popular María Ángeles Blasco, y la consellera Mariàngela Villalonga, ha sabido estar a la altura. Estamos satisfechos y tendremos que luchar para que todo esto acordado se pueda llevar a cabo.
Aparte de ésta, qué otras preocupaciones os hacen llegar las bandas?
Básicamente quieren poder tener su actividad normalizada, con todas las restricciones que nos marcamos. La segunda gran preocupación sería la de las escuelas de música. Hay entidades con bandas que tienen alguna escuela de música. Estas tienen, además, el añadido de que en cuanto a enseñanza no se acaba de aclarar si va a un lado u otro y las normas van variando cada día. Y la tercera es la supervivencia, los temas económicos.
La pandemia ha afectado su supervivencia?
La suerte que tienen las bandas más pequeñas es que, en el ámbito de costes fijos, básicamente tienen el gasto del director. En la Federación de Sociedades Musicales hay una parte que son amateurs, pero otra parte que son profesionales. En este caso, al estar absolutamente legalizados todos, tienen más gastos.
En todo caso, sea como sea, hay muchas dificultades para que las bandas se nutren de las fiestas mayores, los conciertos, los acuerdos que hemos llegado con la Diputación de Tarragona, o el Ayuntamiento de Barcelona, por poner dos ejemplos, con los que se consiguen unas compensaciones económicas que les permiten tener posibilidades de desarrollarse. Ante eso hemos actuado directamente como promotores de conciertos.