Por Manuel Martín Ventura.

En este artículo conoceremos una técnica que se suele emplear en algunas de las reparaciones de instrumentos de viento-metal.

El grabado en el metal es una de ellas, aunque parezca una tarea difícil, no lo es  en general si realizas algunas prácticas previas. La grabación es un proceso de corrosión del metal mediante la acción química. Algunas partes del metal utilizado quedan cubiertas por un sistema para enmascarar. Puede ser una pintura bituminosa o a base de resina, un rotulador permanente, una calcomanía que se trasfiera por frotación, o una etiqueta autoadhesiva. Cuando la pieza está sumergida en la sustancia corrosiva normalmente suele utilizarse cloruro férrico, las partes que quedan al descubierto se corroen, mientras que las partes protegidas o enmascaradas quedan intactas.

El grabado de metales preciosos requiere el uso de otro tipo de ácidos mas  agresivos, hidrofilacios y nítricos para corroer. El cobre, latón pueden grabarse usando cloruro férrico, es una técnica y una solución menos agresiva y más adecuada para los trabajos de grabados en instrumentos de viento-metal.Es un proceso de trabajo que bien desarrollado nos puede ofrecer muchas posibilidades creativas.

Las sustancias de grabado con cloruro férrico, suelen venderse en bolitas que se disuelven en agua caliente y la solución sigue funcionando incluso con el agua se enfría. Hay que trabajar en una zona que este bien ventilada , utilizando todas las medidas de seguridad requeridas, guantes de protección, gafas protectoras, mascara etc.…Mezclar la sustancia de grabado en un recipiente fuerte, nunca de metálico, colocándolo en una bandeja de plástico con un cuenco de al lado para poder enjuagar las piezas metálicas, debiendo siempre seguir las especificaciones del fabricante. Cuelgue la pieza de metal de un trozo de hilo eléctrico aislado y suspenderemos la pieza en la solución. El tiempo de exposición en la mezcla dependerá de la fuerza de la solución liquida, la profundidad de corrosión deseada.

Observe la pieza de vez en cuando, cada cinco minutos sacándola de la solución y tras ser enjuagada la pieza, procederemos a quitar todas las piezas autoadhesivas colocadas, o el aislante utilizado, el resultado es sorprendente. Estos procedimientos de trabajo se utilizan igualmente en trabajos de joyería. Espero que os haya gustado esta técnica de trabajo tan especial, pero siempre deberéis seguir las recomendaciones de vuestro técnico de confianza. Un saludo amigos.